CAPÍTULO 63

813 60 6
                                    

CAPÍTULO 63


En cuanto llegaron lo primero que hice fue sonreír y abrazar a Emma que hacía tiempo que no la veía.

—¿Como estás? Me siento olvidada por ti. —dijo luego de separarnos y negué de inmediato.

—No es excusa, pero la universidad demanda mucho últimamente. Sin mencionar que desde ahora participaré en las reuniones de mi padre. —murmuré lo último, pero lo comprendió y sonrió.

—Es buen momento para...

—Cariño te presento al señor Anderson, trabajaremos mucho juntos. —la interrumpió su esposo

—Aunque ya nos conocemos, quiero que Sam, nos presente. No quiero algo tan formal. —lo miró con el ceño fruncido y reí.

—Biem, padre... —llamé su atención —te presento a Emma Rogers, Emma él es mi padre, Simón Anderson; mejor conocido como el CEO Anderson. —señalé con ambas manos como una presentadora.

Ambos se saludaron gustosos y me sentí muy bien, esperaba que se llevaran bien desde ese momento en adelante. Me acerqué a Daniel para halarlo conmigo y poder presentarlo del mismo modo.

—Y este joven de aquí, es Daniel Anderson, mi hermano mellizo —sonreí y Dan asintió.

—Vaya, personalmente son muy parecidos. —sonrió y mi hermano se avergonzó.

—No diga eso, somos bastantes diferentes —levanté las manos. —Que ese rostro bonito no te confunda, en realidad es alguien muy molesto.

Ella rió para luego mirarlo como si recordara algo.

—Escuché que tienes un coeficiente intelectual al nivel de Thomas.

—Así es, quizás por esa razón nos llevamos tan bien. —respondió mi hermano mirando al mencinado.

—Entonces si en algún momento llegara a pasar algo entre ellos, no tendrías ningún problema. —bromeó y tuve que reí de manera forzada por la mirada de mi padre.

Casi nunca había visto a Thomas apenado, pero esa era una las veces que pude apreciarlo de ese modo, hasta que noté que era por la mirada de mi padre quien acomodaba su corbata con un semblante para nada en acuerdo.

—Mejor pidamos la cena. —volví a ellos —esa reunión me agotó despertando mi apetito —fronté mi estomago que comenzaba a cobrar vida.

La comida llegó y nos sentamos tranquilamente, curiosamente quedé en medio de Thomas y mi padre. Era un poco incomodo, pero quería reír por cierta tensión de ambos.

—Entonces Sam, definitivamente comenzaras a trabajar en la empresa. —llamó mi atención Emma y asentí de inmediato.

—No lo llamaría trabajar, creo que comenzaré a adaptarme. Eso si mi padre no cambió de opinión. —lo miré esperanzada y negó.

—Claro que no, te hará bien conocer los negocios y mantenerte activa.

Suspiré resignada y Daniel se rió con ganas.

—Sam creyó que por lo que dijo quedaría librada. —soltó y lo miré mal, aunque tenía razón, tenía esa esperanza.

—En ese momento creí que los demás se levantarían avergonzados —agregó el señor Jack y lo miré —incluso yo me sentí un poco avergonzado —rió.

—¿Eso por qué? ¿Que dijiste mi niña? —me preguntó Emma animada.

—Nada en particular, solo verdades. —respondí reprimiendo una sonrisa.

CICATRICES [FINALIZADA ✓]   |+18|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora