Tras los juegos de Navidad, nadie de Tortillaland se propuso ir de vuelta a aquel lugar excepto yo, el lugar era lo suficientemente silencioso para estar tranquilo pero si me aburría mucho podría ir a hablar con los elfos.
Encendí la chimenea y me senté en el suelo delante de la cama, después de unos cuantos minutos el calor en la habitación se hizo presente, ahora tengo ganas de un chocolate caliente pero estoy muy cómodo aquí sentado, que dilema...
-- ¡¡Gracias Heberons!!-- grité al ver que una taza llena de chocolate caliente y unos churros aparecieron al lado mía.
Empecé a comer tranquilamente y de un momento a otro sentí la presencia de alguien a mi lado...
-- ¿Drako?
-- Hola, hijo, ¿que tal estás?
-- ¿Que haces aquí?
-- Ah, vine a entregarle personalmente mi carta a Santa.
Devolví de nuevo mi mirada al baile de la llama de la chimenea, mientras volvía a entrar en trance...
-- ¿Tú le has hecho alguna carta a Santa?
-- No...
-- ¿Porqué?
-- Simplemente no sé qué pedirle, ¿tu que le has pedido?
-- Un amor correspondido...
-- Deberías añadirle la palabra sano... a veces es mejor estar solo que en una relación tóxica.
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Una Navidad juntos (Drakoplay/Auronko)
RandomA Auron le agrada la zona donde vive Santa y una tarde de descanso no le vendría mal, por eso descansar frente a la hoguera no le parece tan mala idea, pero de un momento a otro aparece el seguidor más conocido del profeta, Drako.