𝐁𝐥𝐨𝐨𝐝𝐥𝐢𝐧𝐞 | 𝐋𝐑𝐇

11♡

Luke POV

Algo andaba mal.

El silencio a nuestro al rededor comenzaba a aturdir mis oídos, ni siquiera la música proveniente del estéreo en la camioneta era suficiente.

Alexa movía con velocidad sus pulgares sobre la pantalla de su celular. Parecía escribir mil palabras por segundo y podía verla hacer muecas en un par de ocasiones que giré mi vista ella.

Tras despertar por la mañana después de una increíble noche a su lado y obtener solamente unas cuantas palabras de su parte durante el desayuno, mi pésimo sexto sentido me decía que algo andaba mal.

¿Olvidé algo? ¿Es hoy alguna fecha especial que no recuerde? ¿Olvidé bajar la tapa del baño? Mil preguntas rondaban mi cabeza de camino a una de las primeras paradas que haríamos en el día. Las oficinas de una revista local.

La escuché soltar un largo suspiro lleno de frustración, yo apreté los labios contemplando la idea de preguntar qué había pasado. Llevé mi mano hasta la parte alta de su muslo. Esperaba de alguna manera que tomara mi mano como usualmente lo hacía pero parecía que no estaba dentro de sus planes.

La luz en rojo del semáforo sobre una de las tantas calles del centro de Los Ángeles me obligo a llevar mi mirada a ella. Mantenía su brazo apoyado en la puerta y acunaba su rostro con su mano simplemente mirando al exterior.

Me armé de valor para hablar y estrujé mi mano en su pierna para llamar su atención.

"¿Sucede algo?" Pregunté, ella giró su rostro a mi con la seriedad presente en sus facciones. Trataba de buscar la respuesta con su silencio.

"No, nada"

"¿Segura?" Pregunté de nuevo. "Haz estado muy callada"

"Estoy bien" Respondió regresando la vista a la ventana.

"Alexa..." Insistí de nuevo estrujando mi mano contra su pierna. "Se que tienes algo y me gustaría saber qué es, estoy tratando de comunicarme contigo como lo hemos hablado tantas veces"

"No tengo nada Luke, ya te dije que estoy bien" Habló algo irritada dándome una rápida mirada antes de observar al frente. "Ya está en verde"

Apreté los labios poniendo la camioneta en marcha. Comenzaba a sentirme frustrado por la situación, era claro que ella no quería hablar lo que sea que había pasado, pero era peor si no me decía, pues sabía perfectamente que guardar secretos era lo que había fracturado nuestra relación de alguna manera.

Ella rebuscó en su bolso algo hasta sacar un par de lentes de sol y colocarlos sobre sus ojos. Yo opté por quedarme en silencio hasta que llegamos a nuestro destino.

Esperaría a mas tarde para volver a preguntarle que sucedía, pero de alguna u otra manera tenía que saber el por qué de su comportamiento. Mientras tanto, cumpliría con el primer pendiente del día.

Al estacionar en uno de los cajones libres en el estacionamiento del pequeño edificio donde estaríamos al menos un par de horas, me sentí completamente solo a pesar de tener la presencia de mi novia justo a mi lado. Es como si ella realmente pretendiera que no existía, o quizás era mi desesperación por saber ahora que mierda había hecho.

Ella bajó de la camioneta y la alcancé por detrás tomando su mano entre la mía con fuerza por si quería safarse de mi agarre. Al menos quería que entendiera que no iba a dejar pasar esto por alto y que a pesar de su fría actitud, yo seguiría aquí esperando.

Con el cubrebocas en nuestras rostro, ambos entramos al edificio inmediatamente anunciando mi llegada en recepción. Mi mente difusa aún buscando como solucionar un problema que desconocía hizo que no registrara correctamente el corto viaje en elevador.