La chica perfecta de mi escuela

Capítulo 20.- ¿Qué?

Cuando abrí mis ojos me encuentro en una sala blanca. Yo estaba en una cama que ni era la mía. Un hospital.

¿Por qué estaba en un hospital?

Giro mi cabeza y siento una punzada en mi estómago por el movimiento.

¿Qué sucedió?

Veo a Tyler, mamá y papá en los asientos al lado de mi cama. Los tres se veían preocupados y asustados.

- ¿Dónde estoy?- aunque ya sabía la respuesta, no quería creerla.

Los tres me miran y sonríen levemente. Es Tyler quien se levanta para hablarme.

- Tus pulmones no resistieron el humo y poco a poco fueron cerrándose. Te desvaneciste en el sitio.- dice- Tuvimos que traerte al hospital.

¿Humo?

Entonces recuerdo el incendio. La escuela en llamas. El humo por todas partes.

- El doctor dijo que mañana podrás volver a casa.- dice mamá.

- Hoy tendrás que permanecer en el hospital para ver que todo este correctamente.- dice papá.

- ¿Y qué hay de la escuela?- pregunto.

- Con suerte quedaron algunos casilleros.- dice Tyler- Mañana determinarán que sucederá definitivamente, pero lo más probable es que la escuela quede clausurada.

- ¿Qué?- pregunto algo mareada

- Es lo lógico. Si por alguna razón lograrán reconstruir la escuela, son demasiados los padres de familia que están en contra de que sus hijos vuelan a exponerse a tal peligro.

- ¿Alguien salió herido?- pregunto

Tyler queda callado por un momento.

- ¿Conozco a esa persona?- digo eso más como una afirmación que como pregunta.

Su expresión lo dice todo.

- ¿Quién es?- pregunto.

- Katy está internada al igual que Owen. Isabella salió apenas. Jackson está bien, pregunta por ti cada hora por teléfono desde que lo botaron.

Me dio cuenta de que no mencionó a algunos.

- ¿Qué les pasó a Dago, Isabella, Skye y Megan?- pregunto.

- Ellos desaparecieron.

Tardo un tiempo en digerir la noticia y pienso un momento en lo que estaba sucediendo: Cuatro conocidos desaparecieron, nuestra escuela se incendió, ya no habría concurso y... ni siquiera estaba segura de poder hacer algo al respecto.

Mis padres empezaron a hablarme de varias cosas, como si se hubieran dado cuenta de que tienen una hija a la que no le prestaron atención. La verdad parecían haber cambiado.

Pero a pesar del milagro, yo no los escuchaba. Seguía absorta en mis pensamientos.

¿Cómo sería todo desde ahora?

¿Dónde rayos estaban Dago, Isabella, Megan y Skye?

¿Desde cuándo me preocupan Megan y Skye?

Unas horas después, un doctor vino y les dijo a mis padres y a Tyler que salieran y me dejaran descansar, que mañana volvería a casa.

Las luces se apagaron y poco a poco cerré los ojos hasta quedarme dormida.

Dormía tranquila, hasta que un ruido me despertó.

Al abrir los ojos, una mano me cubre la boca.

Skye estaba delante de mí mientras que alguien más me cubría la boca.