der beste Freund

2.1K 329 32
                                    

Completamente extraño.

Así describió Yoko a Pericles después de que desapareciera en la oscuridad, y lo peor... sólo le dio un estúpido collar.

-¿Y qué mierda se supone que haga con esto? - Dijo mientras corría al cementerio que se le indicó.

-Usa el cerebro, Tanaka - un escalofrío recorrió su cuerpo.

-¿Quién está ahí? - Dijo volteando a todas direcciones...

Nada.

Estaba sola.

- Cuando la encuentres, dale el collar -esa voz le causaba escalofríos, tan Tetrica, tan sombría.

Sólo había una persona que causaba tal terror en su cuerpo, una persona que lograba que se congelará con tan sólo una mirada de advertencia.

-¿Addams? -pregunto con cuidado de no hacer enojar a aquella alma.

No sabía porque, pero sentía que si la molestaba, terminaría contra el suelo.

Y no se equivocaba.

-Tanaka - le respondió una figura más visible.

Estaba jodida.

Y lo peor... es que estaba con Merlina.

-¿Qué haces aquí? ¿qué necesitas de mi? -pregunto mientras se detenía, no correría mientras hablaba con los muertos.

Ya que lo más probable es que se terminaría yendo con ellos.

-Necesito que sigas corriendo, a no ser que quieras que Enid se vuelva más loca.

Yoko sólo.asintio y siguió corriendo, tal vez no era buena idea escuchar a Merlina.

Pero si ambas tenían algo en común era una cosa.

Ambas querían ver bien a Enid.

-¿Me darás explicación alguna?

Se sentís completamente ridícula al pedirle explicación alguna a un ser no viviente.

Pero ¿qué más le quedaba?

- Enid aún cree que regresare, debe entender que no lo haré.

-¿Y como se supone que lo harás?

-a la derecha -indico Merlina cambiando de tema, desapareciendo de nuevo.

-Maldita Addams, estúpida, tan idiota  -comenzó a insultarla, se había ido, no la escucharía ¿verdad?

El amanecer se hacía presente, oh Santa mierda.

¿por cuanto tiempo corrió?

Nisiquiera lo había notado.

Cuando llegó al cementerio Enid estaba ahí, hablando con la Nada.
Se acercó cuidadosamente a su amiga, no quería asustarla.

Estaba llena de ramas y rasguños.

-Tal parece que hoy tampoco volveras - le dijo Enid al viento, realmente estaba mal.

-Lobo idiota - Enid volteó, Yoko estaba molesta y agradecida.
Temia no encontrar a la rubia.

-¿Merlina? -Pregunto sonriente, y las lágrimas comenzaron a salir.

Yoko suspiro, aún seguía en negación, se estaba cansando de eso.

Sinclair la abrazo, aferrandose a ella, llorando y murmurando mil gracias.
Hasta que la empujó, alejandola, desilusionada.

Siempre Te Esperaré|| Wenclair Donde viven las historias. Descúbrelo ahora