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Parte: 1/2
tw: violencia.

Las teclas del teclado de Felix eran de las cosas que más se escuchaban en su habitación, seguido del tic tac del reloj de pared que tenía

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Las teclas del teclado de Felix eran de las cosas que más se escuchaban en su habitación, seguido del tic tac del reloj de pared que tenía.

Llevaba más de dos horas revisando los videos de las cámaras de seguridad de la bodega, sin poder encontrar una sola toma donde se le viera la cara o algo parecido que se pudiera identificar.

—Mierda... ¿Por qué no voltea? —seguía tratando de detener el video en el momento exacto con la barra espaciadora, dónde se viera el rostro.

—¿En serio no te has dormido? —YeJi, su roommate, se paró con los ojos entrecerrados y su cabello algo despeinado, en la puerta de su habitación.  —Felix, son las... Dos de la madrugada.

—Gracias por recordármelo, pero estoy en medio de algo importante, noona —la observó levemente, riendo por la imagen que tenía al lado. —Tienes saliva en la mejilla.

La chica rápidamente se limpió el lugar donde el australiano le mencionó. —Primero, deja de decirme así que no tenemos pero ni un año de diferencia, y segundo, ¿Qué es más importante que tengas un poco de descanso?

—Los videos de seguridad de un tiroteo —soltó sin más.

—Cariño, eso puedes verlo luego en el trabajo —llegó a su silla, corriéndola hacia atrás. —Le diré a Chan que sigues despierto, tal vez así buscas la cama.

—No eres tan soplona —rió puesto a que era cierto, dejando correr el video.

—Pero podría hacer la excepción —se sentó en su cama, de brazos cruzados.

—Ya, me iré a dormir si algo- ¡Oh, Dios, ahí hay tres personas, YeJi! ¿Si las ves también, verdad?

En efecto, tres personas más podían observarse en el video. Una de ellas llevaba el rostro cubierto con un cubrebocas y una gorra, en su mano portaba una pistola, muy seguramente la dueña de las balas que se encontraron cerca del cadáver.

Detrás de él, dos personas con sus rostros descubiertos y pistolas en sus manos también aparecían, los tres salían corriendo, y entonces uno de ellos, volteó a la cámara, avisando a los otros dos la presencia de la misma, para correr más rápido, y así, desaparecer.

—¡Sí los viste! —se levantó de su silla, para abrazar a la joven y comenzar a saltar en círculos por la felicidad. —¡Serán maravillosas noticias para JiSung!

La chica estaba tiesa entre los brazos del otro, aún con sueño, pero podía sentir la felicidad de su amigo, entonces lo más que hacía era dejarse abrazar y saltar junto a él.

—Sí, sí, todo muy lindo —se soltó, viendo la sonrisa aún presente del pecoso. —Ahora, a dormir, yo también tengo que ir al bufete mañana a trabajar.

—Llamaré a JiSung primer-

—¿Y tú crees que te va a contestar a esta hora? —se cruzó de brazos nuevamente. —Él seguro está durmiendo, como deberías hacer tú también.

don't blame me ✧ minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora