ゴースト(GHOST) | SaMo | TRADUCCIÓN

Capítulo 10: Vuelta a Casa

Cuando Sana sale del segundo piso para que Jihyo y Nayeon hablen, empieza a buscar a Yugyeom por los alrededores. Tanto su tío como Nayeon sugirieron que el hombre estaría borracho, así que debería ser fácil de detectar, pero en la Cala Umugi viven muchos personajes turbios que probablemente también pasan el día bebiendo. El primer piso está lleno de hombres y mujeres que venden y compran Dios sabe qué, pero un hombre en particular llama la atención de la samurái. Era bastante alto y tenía el pelo negro y rizado hasta más allá de las orejas. Llevaba una copa en la mano, así que Sana decide que sería una buena primera persona con la que empezar.

A medida que Sana se acerca, varios ojos la siguen moviéndose por la sala, entre ellos el del hombre hacia el que caminaba. Este empieza a caminar hacia atrás para no alarmar a nadie, pero Sana se da cuenta de que está intentando marcharse, así que acelera el paso para alcanzarlo. Antes de que pudiera marcharse, Sana consigue hacerle retroceder hasta un mostrador.

"Busco a un hombre llamado Yugyeom, ¿por casualidad sabrás dónde se encuentra?"

El hombre se lleva la mano a la barbilla, fingiendo pensar en la pregunta de Sana.

"¿Yugyeom dices? Hmmm me suena familiar."

Antes de que Sana pudiera decir otra palabra, el hombre sin nombre lanza su bebida a Sana, distrayendo momentáneamente a la samurái. Mientras Sana estaba distraída, el hombre intentó huir, pero Sana le pisó los talones. Fuera quien fuera ese tipo, ella iba a atraparlo. El hombre salió corriendo de la plaza principal de la Cala Umugi, hacia la zona residencial más apartada, donde las chozas estaban más juntas creando estrechos callejones. Sana lo siguió hasta un callejón especialmente pequeño, por lo que a la samurái le resultaba difícil seguirle el ritmo. Sana atravesó una de las chozas, afortunadamente desocupada, hasta el final del callejón para cortarle el paso al hombre. El hombre le llevaba ventaja a Sana antes, pero su estado de embriaguez le hacía más lento, por lo que Sana pudo llegar fácilmente al final del callejón antes que el hombre.

"Para de correr. No estoy aquí para hacerte daño, solo busco a alguien."

El hombre se detuvo y miró detrás de él, para encontrar una salida, pero Sana no iba a dejarle huir de nuevo y parecía que el hombre sabía que no podría dejar atrás a la samurái por mucho tiempo.

"Está bien. ¿Qué quieres?"

"¿Asumo que tú eres Yugyeom?"

"Sí, ¿quién pregunta?"

"Minatozaki Sana. Mi tío es el Jito y me pidió buscarte."

Al mencionar al Jito, Yugyeom se apresuró hacia Sana y cubrió su boca. "Shhhh, ¿estás loca?"

Sana empuja al hombre y se limpia la boca. "Tócame de nuevo y te cortaré todos tus dedos."

"Entonces las historias son ciertas. ¿Una obediente samurái convertida en despiadada asesina? Me gusta."

"Tal vez solo no me gusta que hombres pongan sus manos sobre mí."

"En fin, no puedes andar por aquí, gritando sobre el Jito, especialmente cerca de mí. No puedo permitir que la gente de aquí piense que lo conozco."

"¿Entonces eres amigo del Jito?"

"Amigo es muy noble, pero no podemos hablar aquí. Te llevaré a mi casa donde podremos hablar libremente."

Yugyeom pasa junto a Sana, vuelve por el callejón y gira a la izquierda en una de las chozas. Sana le sigue y entra en lo que supone que es su casa. No era un gran hogar, pero no todo el mundo tiene la suerte de nacer en una familia noble con grandes propiedades como Sana.