Like it or not... We're family | [a history of DSMP]

~ we did it for love ~

- Narrador -

En lo alto de los cielos se encontraba un hombre, no era cualquier hombre. Philza Minecraft, el conocido "angel de la muerte" se encontraba volando tranquilamente, solia estar solo la mayoría del tiempo y no le molestaba, de hecho disfrutaba de la soledad.

Era un día comun, buscaba un nuevo lugar en donde instalarse ya que no se quedaba en un mismo sitio por un largo tiempo, sin embargo, algo había en ese día que era diferente, no sabía que, pero lo era.

Perdido en su propia paz, no se dió cuenta de que una figura se elevaba hacia las nubes en dónde el estaba, fue hasta que se sintió observado que volteo, creyendo que había una amenaza saco su espada pero se quedó congelado al ver a quien tenía enfrente.

?: Oh vaya, lo lamento, no quería molestarte

Philza: ah.. No- no se preocupe, no tenía idea de que usted estaba aquí

?: Estoy segura de que ya sabes quién soy, pero permíteme presentarme, mi nombre es Kristin, la diosa de la muerte

Philza: Lo se... Me llamo Philza Minecraft

Kristin: Angel de la muerte, ¿Puedo preguntar que te trae por aquí?

Philza: busco un nuevo hogar... ¿Que hay de usted?

Kristin: solo necesitaba salir del Inframundo por un momento... Las almas que llegan no me dan tanto trabajo y pensé que sería un buen momento para volar un rato

La diosa de la muerte, a los ojos de Philza, ella poseía una belleza única, digna de una diosa, desde hace tiempo el varón era lo más cercano a un siervo leal, pues ambos estaban directamente relacionados con la muerte misma, el era el único a quien la diosa podía tocar sin que pereciera, no se sabía la razón, pero ella se sentía afortunada de encontrar a alguien que pudiera estar cerca

Philza: será demasiado si le pido que me acompañe? El cielo es lo suficientemente grande para ambos

Kristin: *risilla* me encantaría

Fue así como comenzó una historia de amor única, se veían por momentos, los momentos de volvieron días, los días se volvieron semanas, las semanas se hicieron meses y los meses se hicieron años, nadie tenía idea de como un hombre que se veía simple y tranquilo se ganó el corazón de una diosa, pero ese era su secreto, Philza se mantuvo cómo lo que era y, en cuanto tuvo el corazón de la mujer, pobre del que se atreviera a dañarlo

Kristin de vez en cuando se achicaba a un tamaño más convencional, si, era una mujer enorme, comparada con un gigante en muchas ocasiones, pero a ella no le molestaba, en su tamaño más "humano" le era más sencillo hablar con el hombre alado, podían pasar siglos y aún así, ninguno se podía aburrir del otro aunque lo intentara, Kristin se había vuelto el mundo de Philza, y Philza el de Kristin

Unos años pasaron y se encontraban casados, había un tema del que debían de hablar pero ninguno sabía cómo hasta que el varón decidió dejar de evitarlo y sentarse, era importante, tanto que el sería capaz de bajar al mismísimo Inframundo solo para tener "esa" conversación

Kristin: Phil... Ambos sabemos que no podemos tener hijos de manera... Convencional

Philza: Lo se... Pero ambos queremos una familia ¿No? ¿Cómo será eso posible entonces?

Kristin: podemos tener hijos pero.... Hay un precio que pagar

Philza: otro? Amor, sabes que no hay nada que yo no haría por ti, ¿Pero que más debemos entregar por nuestra felicidad?

Kristin: aún no me parece justo que hayas desechado dos de tus tres vidas, tampoco me agrada que seas tú quien tenga que pagar más por algo que es de ambos pero-