𝐒𝐌𝐀: « Betty necesitaba alguien a quien darle amor. Jughead necesitaba alguien que lo ame en verdad, poder sentirse suficiente.
Saciaron sus almas juntos. »
Betty & Jughead. [riverdale]
Autor: @reinhqrtsgf
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Elizabeth nació en el pequeño pueblo de greendale. Todos la conocían allí como "Betty". De niña solía ser alguien muy alegre, iba con su pequeña y perfecta coleta peinando sus cabellos dorados. Su tez blanca casi como la nieve y sus ojos verdes que asemejaban a preciosas esmeraldas.
Su vida dio un giro rotundo cuando su hermana mayor se fue a la universidad. Ella tenía tan solo 14 años de edad. Sus padres se obsesionaron con que sea la chica perfecta; su aspecto, sus notas, sus amistades, sus intereses amorosos, sus pasatiempos...
Hacia todo aquello que sus padres le decían. Era la típica porrista popular de las películas cliché.
Salía con apuestos chicos, pero en verdad nunca la querían más que por su cuerpo. Todos la anhelaban por la belleza que poseía. Desgraciadamente nadie llegó a apreciarla por quien era ella en verdad.
Pero Betty se sentía querida y suficiente solo con su vecino, Archie Andrews.
Él también era popular, jugaba en el equipo de la escuela, sus notas... mejor no hablar de ellas. Tocaba la guitarra, cantaba, era sumamente apuesto.
Ella pensaba que él la comprendía de ciertq forma, él era perfecto. Excepto que el era perfecto desde nacimiento, no como ella.
Alice, la madre de Betty, siempre ansió poder ver a su hija en el altar junto a el pelirrojo. Eso fue lo único que Betty no hizo por sus padres, Betty aprecia mucho a Archie, su mejor amigo. Ella no lo amaba de forma romántica ni platónica. Lo ama de forma pura, es su único amigo que puede considerar real. Lo aprecia con toda su alma, ya que fue el único que le mostró un poco de cariño al menos. Aunque era consciente de que, para Archie, era una más.
En su último año de secundaria estuvieron algo separados porque estaban preocupados tratando de entrar a una universidad.
Los padres de Betty pensaban en grande. Hardvard, quizá Yale. Tal vez, Oxford. La adolescente rubia quería comenzar desde cero, les mintió a sus padres para eso. Dijo que entró en Yale, para que sus padres si la dejen irse.
Bueno, no es mentira. Ella entró, pero no asistirá porque irá a la sencilla universidad de Riverdale, el pueblo con río. A pesar de los horripilantes rumores de allí, ella se enamoró cuando fue a visitar el pueblo con tan solo 13 años.
Se estaba escapando y sus padres no lo sabían.
Quería tener una vida allí. Conocer personas nuevas. Un trabajo. Una casa. Quizá una pareja. Pero quería estar allí.
Entonces lo hizo.
Ni en riverdale ni en greendale hay aeropuerto lastimosamente. Asi que, con una semana de anticipación, compró un boleto en micro.
Luego tendría 4 días para instalarse correctamente. Alquiló un ambiente en una residencia. Sus ahorros no alcanzaban para mucho más, además de que estaba becada.
Se despidió de sus padres, quienes pensaban que tomaba un micro a un pueblo cercano que si tenía aeropuerto. Y de allí iría a Yale. Pero no, ella iba a riverdale
Betty estaba nerviosa.
Con sus valija y su mochila de mano entró a la terminal. Mostró el boleto, su identificación y esperó a que la llamaran junto al resto de pasajeros que había en la fila de la terminal.
Hasta que finalmente un hombre le permitió el paso al micro, luego de que todos dejen su equipaje atrás.
Esperaron 5 minutos más y emprendieron viaje hacia riverdale, por la ruta 33.
Betty Cooper dejo greendale y se adentró en riverdale.
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