꒰Cómo me vas a comprar este traje, Enzo꒱ Enzo F. x Julián Á.

ෆBunny Costume⁠ෆ

Habían ido a un shopping ese fin de semana, querían ver una película y después cenar ahí.

Estuvieron bastante tiempo adentro del lugar, cuando terminó la película, les parecía algo temprano para ir a comer. Por lo que decidieron dar una vuelta para ver todas las tiendas que había.

Había tiendas de ropa, juguetes, comida, caramelos, entre muchas cosas más.

Estaban tranquilamente caminando de la mano hasta que Enzo fué detenido brutalmente por Julián quién se quedó embobado viendo el vidrial en una de las tiendas. 

Se puso a su lado para ver qué tenía tan distraído a su pareja, y cuándo vió, se rió bastante divertido al observar un montón de cosas de Spiderman adentro.

—Enzo, Enzo, ¡mirá! Mirá todas las cosas de Spiderman que hay.— Le dijo realmente entusiasmado el chico mientras lo sacudía por el hombro.

—Andá a fijarte lo que tienen, yo te espero acá.— Contestó enternecido por el comportamiento infantil del mayor.

—¿Seguro?—Él asintió—Bueno, esperame acá nomás.—Dicho eso, no tardó ni un segundo en entrar al lugar para empezar a ver las cosas que había de su héroe favorito.

El azabache se quedó al frente esperando, hasta que visualizó una tienda de lencería al frente, y justo vió un traje de conejita bastante provocativo, "Cómo le quedaría eso a Juli?" se preguntó mentalmente y sonrió ante la idea, decidió entrar a ver qué hacía.

Julián salió de la tienda con un cómic del Hombre Araña entre sus manos, se acercó hasta el menor y se fijó en que este también tenía una bolsa, le pareció raro.

—Amor, ¿Qué compraste?—Le preguntó extrañado.

—Es un regalo para vos, pero que prácticamente voy a disfrutar más yo.—Se rió y empezó a tomar el paso siendo seguido por un Julián confundido ante sus palabras, pero decidió ignorarlo y juntó sus manos de nuevo para ir al Mcdonald's que había. 

～⁠☆

Llegaron a su casa algo cansados pero felices al haber podido salir un rato y disfrutar como pareja que eran.

Entraron a la habitación cambiándose la ropa por algo más cómodo, el más bajito estaba apunto de vestirse nuevamente cuando escuchó al menor.

—Pará, ponete esto mejor.—Le enseñó la bolsa que anteriormente traía desde la salida.

El otro chico la tomó y sacó lo que había adentro, era un traje de conejita que tenía hasta hasta las orejas y la colita, sintió su cara arder de la vergüenza que tenía.

—Cómo me vas a comprar este traje, Enzo.—Miró al contrario frente a él con el ceño fruncido y el sonrojo hasta las orejas mínimo.

—Dale amor, ponetelo, es para probar algo nuevo esta vez. Hacelo por mí, ¿sí?—Lo miró con ojos de perrito suplicándole que se pusiera dicha prenda, al mayor no le quedó de otra y se fue a cambiar al baño.

Pasaron unos minutos, y Enzo estaba tranquilamente sentado en la cama con su celular en mano mientras esperaba pacientemente como todo buen novio que era.

—Me siento re boludo con esto.—Se escuchó decir al del número 9 mientras entraba a la habitación con el traje puesto y completamente apenado.

Y ahí el mediocampista pudo saber cómo se veía el cielo, por más exagerado que fuera, lo sentía así.

Juli tenía el típico traje negro que dejaba sus dos piernas completamente al descubierto con un cancán del mismo color, tenía la vincha de orejitas y se subía cada tanto la parte del frente para no dejar al descubierto su pecho. Se sentía un payaso mal.

—Encima mirá, viene hasta con colita esto, sin mencionar que no me cubre el culo por completo.—Se dio vuelta inocentemente mientras giraba su cabeza lo tanto que su cuello se lo permitía a ver qué opinaba su pareja.

—Yo digo, que te voy a romper todo el orto esta noche.—Y lo cierto era, que ya comenzaba a molestarle su reciente erección con la vista que le proporcionaba el mayor.

—Dios, no digas eso.

—Fijate cómo lo digo.—Agarró al otro de la mano acostandolo en la cama mientras quedaba arriba de él.

—Te voy a comer entero, olvidate de dormir esta noche.—

Dijo comenzando a besar desesperadamente al otro abajo de él, haciendo que el castaño pasara sus brazos enredandolos sobre su cuello mientras soltaba jadeos entre el beso.

～☆

Se podía sentir los altos gemidos que soltaba Álvarez saltando encima de la la pelvis de Fernández auto embistiendose mientras el nombrado soltaba uno que otro gruñido, lo estaba disfrutando bastante.

—Me encanta cómo saltás encima mío como todo un conejito, mi amor.—Le dijo sentandose haciendo que el contrario parara sus saltos, no lo pensó dos veces y empezó a chupar y lamer los pezones del mayor mientras éste soltaba lágrimas y jadeos del placer que estaba sintiendo en el momento. Enzo lograba hacerle ver las estrellas, y mierda que lo hacía muy bien.

El de tatuajes cambió de posición quedando él arriba del cordobés quién abrió sus piernas para darle espacio, sin pensarlo dos veces retomó las embestidas de antes sacándole varios gemidos al de menor estatura quién solo le pedía por más y más, y él no era nadie para negarse.

—Me parece que el conejo acá sos vos, me cogiste como 10 veces hoy.—Dijo el castaño mientras se reía.

—Y con lo garchable que estabas usando eso, cómo no lo haría.—Julián le golpeó levemente el pecho y solo pudo abrazarlo mientras se reía.

Le dió unos cuantos besitos y al final los dos se durmieron abrazados, no era joda lo de casi no dormir esa noche.

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hola gente, cómo están? 

cómo verán, se me dió por escribir un 18+ de estos dos, perdón sí no lo pude redactar bien porque es la primera vez que escribo algo así

bueno, me voy despidiendo, nos vemooooos