Capítulo 14

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Amane y yo hemos sido amigos desde que tenemos 4 años, fue simplemente amistad a primera vista

Desde nos conocimos hemos estado juntoS

Mismo vecindario

Mismo jardín

Misma primaria

Misma secundaria

Mismos amigos

Somos el confidente del otro, juntos hicimos muchas locuras juntos, nos cubrimos la espalda y en muchas ocasiones mentimos para cubrir al otro

Él conoce todo de mi así como yo conozco todo de él, al crecer juntos y ver cada aspecto del otro, llegó un punto en el que simplemente lo empecé a ver con otros ojos, no sé como, cuando ni por qué, sólo recuerdo una tarde en la que lo vi reírse y me dije a mi misma "Se ve muy lindo cuando se ríe", en mis, en ese entonces, 14 años, fue la primera vez que pensé así de alguien, desde entonces tengo esa clase de pensamientos sobre él, sobre todos sus aspectos

Cuando sacaba buenas notas, cuando se frustraba en clases de cocina, cuando comía donas, cuando reía, cuando lloraba por alguna cosa, cuando hacía educación física, cuando se enfermaba, la vez que se enojó porque alguien dijo algo sobre mis piernas, sobre todo cuando hablaba sobre la luna, las estrellas o simplemente de sus gustos

En ese momento no sabía que era, era raro, quería sentarme siempre a su lado cuando estábamos con Kou y Mitsuba, muchas veces tuve el impulso de ir e abrazarlo, a veces hacía algo y automáticamente pensaba en él, respondía enseguida a sus mensajes, los pensamientos extraños, mi corazón latía rápido, me estaba volviendo loca de

Un día ayudando a Mei le pregunté si sabía que me pasaba, le dije esto y me respondió sin dudar:

-Él te gusta

-¿Qué él a mi qué?

-Te gusta, es así de simple

-¿Como estas tan segura?

-Recapitulemos: piensas siempre en él, cada cosa te recuerda a él, quieres estar siempre a su lado, si de ti dependiera te colgarías a él, tienes esa clase de pensamientos cada vez que él simplemente respira, los latinos de tu corazón, se conocen desde que son niños, ¿Olvido algo?

-No, no olvidas nada...

Al principio ignoré lo que Mei dijo, no era posible que Amane me gustara, siempre fuimos como hermanos, estuvimos en nuestros buenos y malos momentos y siempre dimos la cara por el otro

Pero luego de tiempo, simplemente me hice mas consiente de él y de mis sentimientos, Ý si realmente me gustaba? Hice la misma pregunta en un foro de internet diciendo lo mismo y todas las respuestas decían lo mismo, en ese punto no podía simplemente ignorarlo y hacer como si nada

Tiempo después, ya con 16 años tenía planeado decirle a Amane sobre mis sentimientos o decirle que creía que era eso, si, 2 años y aún no estaba segura de si realmente me gustaba o no, ¿Qué puedo decir? Tenía planeado donde, como y cuando decírselo, pero el accidente de mis padres detuvo todo, cuando todo pasó no tuve ni tiempo de pensar en él, solamente que lo extrañaba y que quería que él estuviera conmigo acompañándome

Entre el funeral, el hospital, Sumire y su esposo Hakubo*, la herida en mi pierna, la gente extraña que se acercaba a mi en el funeral para darme el pésame, personas de traje que me explicaban cosas sobre la herencia de mis padres, cosas que no podía procesar y de las que Sumire se hizo cargo, el regreso a clases que estaba la vuelta de la esquina

Cuando terminó el funeral y volví a casa sólo me fui a mi habitación, debía recoger el cuarto de mis padres y deshacerme de algunas cosas, donar su ropa y todo eso, pero nunca lo hice, sólo la dejé así, cuando entro parecería que el tiempo está congelado

Tres meses después del accidente, cuando las aguas finalmente se habían calmado, vi a Amane parado en mi puerta rebuscando en su bolso algo apurado, era muy temprano en la mañana

-A-ah, buenos días Yashiro -Me saludó él

-¿Qué haces aquí? -Le pregunté cerrando la puerta detrás de mi

-Yo... -él se veía sudoroso y no parecía reaccionar -Quería... darte... algo...

-¿Qué es? -De su mochila sacó una caja de almuerzo verde claro y me la pasó, él se veía raro, así que dudé en abrirla, al hacerlo vi lo que había dentro y me alegré enseguida -Son mochis fresa

-O-ojalá te gusten... -Habló mirando a otro lado, se veía lindo avergonzado

-Gracias -En ese momento tuve el impulso de abrazarlo y así hice, me aferré a él sintiendo su olor y calidez, se sentía bien -Gracias por el regalo, Yugi -él respondió con un "De nada" tembloroso, en ese momento noté que no me devolvía el abrazo, así que me separé de él pensando que no le gustaba, cuando lo vi estaba rojo como tomate -¿Qué pasa, Yugi? Estas muy rojo

-Na-nada, no es nada -Sonrió tratando de ocultar la razón de estar así, a mi me preocupaba

-¿Tienes fiebre? Desde hace rato estas algo rojo -Puse mi frente junto a la suya creyendo que quizás tenia fiebre, él gritó que no era nada y se apartó de mí bastante brusco, era raro, Amane ni es del tipo que odia el contacto físico

-Va-vamos a la escuela, se hará tarde -Apurado me tomó de la muñeca y comenzó a caminar por el pasillo, yo solamente lo seguí sin decir nada, su mano estaba tan cálida y la sensación de sostenerla era reconfortante, mi corazón en ese momento latía a full

Luego de eso me enfermé, era extraño pues no soy del tipo de persona que se enferma, simplemente pasó, Sumire no estaba pues tuvo que ir a su ciudad natal a arreglar algunas cosas y su marido estaba en la escuela trabajando, al despertar y comprobar mi estado sólo pude enviarle un mensaje mal escrito a Akane-kun diciéndole que no me sentía bien

Al día siguiente de camino a la escuela recibí un mensaje de Akane-kun que decía que él fue a cuidarme, en ese momento sólo pude pensar en como agradecerlo, por lo que apenas llegar a la escuela pedí prestado el salón de cocina y ahí le hice rápido unas donas, al dárselas después de clases estaba bastante feliz, aunque también se veía bastante nervioso, cuando lo vi así sólo pude pensar en quizás había dicho algo demás, pero me tranquilicé cuando me dijo que no había dicho nada

Aún así Amane actuaba extraño, se quedaba viendo un punto fijo como pensativo y después de camino a casa me contó un chiste de humor negro y eso si que era raro ya que a él no le gusta el humor negro, de hecho en muchas ocasiones le parece repulsivo y fuera de lugar

*Hakubo es el verdadero nombre de Shinigami, lo dejaré como

Fantástica de los fanfics (Amanene)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora