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Elena y Jane estaban tomando el té en el invernadero del centro del jardín.

Sin embargo, Lexion, que apareció justo a tiempo, estaba mirando las flores del exterior del jardín.

La mayoría de las flores del exterior del invernadero se habían marchitado porque el tiempo se estaba volviendo más frío.

Como resultado, la expresión de Lexion se volvió pálida.

-Debe estar triste porque las flores se han marchitado.

La forma en que su hombro se hundió parecía adorable.

Elena inconscientemente sonrió.

En ese momento, la cabeza de Lexion se volvió hacia el invernadero.

El par de ojos del niño se encontraron con los de Elena, haciendo que sus ojos se abrieran de par en par. Pronto, una brillante sonrisa apareció en su rostro.

«Es sólo que nuestros ojos se encontraron, pero ya me gusta tanto.»

Estaba francamente sorprendida.

-¡Nunca había visto a Lexion sonreír así!

Jane también parecía sorprendida.

No mucho después, Lexion corrió hacia atrás y entró en el invernadero.

-¡Hermana Elena!-exclamó Lexion con la cara iluminada.

«¡¿Ahora me llamas hermana?!»

Hasta ahora, sólo Elena había llamado a Lexion, pero Lexion nunca la había llamado a ella.

Nunca esperó que la llamara por su nombre; él la llamaría por su nombre de pila, y no 'hermana'.

Pero él la llamó con esa impresionante sonrisa suya.

«Uf. Es tan encantador.»

-Maestro Lexion.-saludó Elena, incapaz de contener la sonrisa.

Entonces, Lexion corrió hacia un lado y se sentó en una silla vacía.

-¡Yo también quiero té!

Cuando el niño se dirigió a la sirvienta que lo esperaba, ésta lo acomodó de inmediato.

Lexion sonrió en la habitación y miró a Elena.

«¡Un ángel tan puro! Uf.»

La expresión del niño era muy brillante estos días, ya que Killian ha estado muy ocupado tomando clases para su sucesión.

Además, desde que recibió ayuda de Elena, Lexion ha estado muy cerca de ella.

-¡Oh! Elena, he oído que uno de estos días tomarás clases de magia.

Elena miraba fijamente al adorable Lexion cuando Jane le habló.

Misteriosamente, Lexion miró directamente a Jane.

Afortunadamente, la mirada no duró mucho, así que Jane no se dio cuenta de su presencia.

Pero Elena lo notó.

¿Por qué Lexion miraba fijamente a Jane?

No lo entendía, pero Elena respondió a la pregunta de Jane por el momento.

-Sí. Quiero convertirme en maga.

-¿Ya tienes algo que quieres hacer? Eso es notable. Por otro lado, no sé lo que debería hacer o no quiero hacer nada. Me temo que estoy siendo una molestia para los Halos.

Jane rió amargamente.

-Ser capaz de hacer algo no significa que tengas que tener algo que quieras hacer.-dijo Elena, cogiéndole suavemente la mano. Al poco rato, los labios de Jane se curvaron ligeramente.

Accidentalmente seduje al hermano menor del protagonista masculinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora