HPLA

Capítulo 6

Larissa:

Estoy a punto de cruzar la calle cuando una gran pared roja a mitad de cuadra llama mi atencion. Decido doblar para acercarme y leo el cartel en grande con luces neon rojas detrás de las letras,  Pleasure. Bastante hot si a mi me preguntan. En el suelo hay una alfombra roja, rodeada de vallas doradas que guían un camino en donde supongo que se hace la fila para entrar.

Desde dentro se escucha Watch Me Burn y noto que en la puerta hay un cartel. Dice "se busca bailarina mayor de 18 años, que sepa moverse y tenga ganas de calentar pollas". La curiosidad mató al gato, porque antes de darme cuenta, estoy entrando al lugar.

  Adentro es todo rojo, pero en distintas tonalidades. El suelo esta revestido de una alfombra aterciopelada que llega a todos lados. Me recibe un pasillo de unos diez metros de largo. A mitad del mismo, a mi derecha, hay una escalera que vaya a saber a donde te lleva. Sigo caminando hasta que entro en una habitación enorme. Debe ocupar al menos la mitad de la calle.

   Al fondo del local hay un escenario en forma de T, largo al fondo y a medida que se va acercando al público se achica en un pasillo de unos veinte metros, abarcando hasta la mitad de las mesas. Sobre el escenario, al fondo, hay una gran pantalla y en el techo un juego de luces impresionante.

  Pero ¿qué carajo es este lugar? ¿Un strip tease?

  Un grupo de nueve chicas están ensayando una coreografía, algunas la hacen en el escenario, otras entre las mesas y unas ultimas sobre la barra que ocupa toda la pared de la derecha. Es de madera caoba y hay tres barmans limpiando vasos y organizando botellas.

  Las chicas bailan en tacones, de una forma muy sensual, sin llegar a ser obseno, manejando elegancia. Estan transpiradas, agitadas y con ropa de deporte, pero se ven hermosas.

-Increibles, ¿verdad? - una voz me hace sobresaltar y me doy vuelta, llevandome una mano al pecho. Estaba tan concentrada en todos los detalles, que me deje llevar.

-Que susto dios mio - trato de calmar la respiración mientras examino a la mujer que me habló.

  Es pelirroja y muy alta. Con sus ojos verdes me mira avasallante, de la misma forma que yo lo hago con ella. Me siento analizada, no se abstiene a ocultar donde dirige su mirada en cada momento. Mira desde mis piernas, caderas, tetas y cara. Creo que llevar este pantalón de cuero negro con el body polera de cuello alto, también negro y encima ajustado no fue tan buena idea hoy.

Me tiende su mano - hola, soy Caroline, encantada. Tú? ¿Eres nueva verdad? - me pregunta sonriendome. Le acepto la mano.

-Soy Larissa y si, soy nueva, llegué hace unos días aquí - respondo algo nerviosa, es intimidante esta mujer.

Se muerde el labio infieror sin perder la sonrisa - y dime, has leído el cartel de la puerta? Buscamos una bailarina y diría que si entraste, estas interesada.

Me suelta la mano y me sienta en una de las mesas negras y redondas junto con ella. Aca se tiene una visión completa del escenario, ni muy adelante ni muy atrás.

-Leí el cartel, pero no estoy interesada, yo no bailo. Aunque debo admitir que es un lugar magnífico, ¿qué es precisamente? - le pregunto mirando a las chicas repasar todas juntas la misma coreografía.

Se ríe - es un bar/discoteca. Se encuentra en el centro de la ciudad y cerca de universidades. Tenemos bastante clientela de un nivel adquisitivo alto. Los clientes vienen, toman algo, comen lo que hay en nuestro menú, mientras nuestras bailarinas les dan algo que vale la pena ver, su talento.

Nose en qué momento apoyé mi codo izquierdo en la mesa y apoyé mi cara en mi mano. La escucho atenta.

-No somos strippers, ni prostitutas. Simplemente hacemos lo que amamos hacer, que es bailar, entretener al público. Si no bailas esta bien, nosotras podemos enseñarte - me dice copiando mi postura.

Incomoda niego con la cabeza, dejando caer mi antebrazo sobre la mesa - ya te lo he dicho, no soy bailarina ni me interesa serlo.

-Mhh - me mira no muy convencida pero decide dejarlo ahí - Ahora dime, ¿qué haces por aquí?

Casparreo y me enderezo - estaba de camino a conocer mi nueva Universidad - me cruzo de piernas.

Se ríe - No era tan literal la pregunta. Estas en NY, la gran manzana, por que?- pregunta con intriga.

Le sonrío - Vine a estudiar con mis amigas, soy argentina - comento orgullosa.

- ¿Y que más?

-¿Cómo "y que más"? - la miro confundida con el ceño fruncido.

-Solo te mudaste a la otra punta del mundo por una puta universidad? No puede ser que tengas tan poca personalidad - niega con la cabeza, mirandome como si fuese una ridiculez.

  Me encojo de hombros - no quería seguir en Argentina, tengo dinero, mis amigas también, nos fuimos de casa y punto final.

-Pues chica, que pena me da tu yo del futuro - se para de la silla.

-Eh?

Apoya ambas manos en la mesa y se inclina hacia mi, mirando a la pared detrás mía - me gusta pensar que nuestra vida es como un libro. Mi mayor deseo es llegar a ser anciana y poder recordar mi vida con la seguridad de que no me quedó nada por hacer o experimentar - devuelve su mirada - eres joven, guapa, con dinero y encima estas en NY. No quiero pensar que tu libro será monótono y que solo recordaras tus épocas de estudio.

-Yo no soy monotona - le digo molesta.

-Ah, no? Dime entonces, que hacias en Argentina ademas de estudiar? - se cruza de brazos y me mira superior.

Trago fuerte apretando mis dientes. Luego decido mirarla arqueando una ceja,- Cosas muy interesantes que jamas entenderías - digo.

Un aplauso a la boluda del año damas y caballeros. Tienen que darte un premio Nobel a la respuesta más madura del año.

Consciencia, haceme el favor y cerra el orto.

Asiente - Ya veo. Bueno, debo ir a ensayar con las chicas, pero puedes quedarte echar un vistazo al lugar. Tal vez tienes suerte y encuentras algo divertido para hacer con tu vida - me sonríe y antes de que me de tiempo a responderle, se va, dejándome con la palabra en la boca.

-Mina pelotuda.

-Cobarde.

Decimos ambas al mismo tiempo. Somos conscientes que la otra lo escucho, pero decidimos dejarlo ahí.

Me quedo sentada en esa mesa redonda número 8, viendo a las chicas bailar. Es una coreografía sencilla, de solo verla durante 30 minutos, estoy un 85% segura de que me la sé. Supongo que es así porque los vestuarios deben ser llamativos, el juego de luces exquisito y si los clientes van a estar tomando, la formula da un resultado excelente.

Mi celular vibra dentro de mi tapado. Con la vista en el escenario, atiendo la llamada.

-¿Donde estas nena? - pregunta Acho, se escucha con la voz ronca, como si se hubiera despertado de la siesta.

-No tengo idea - le respondo. Al fin y al cabo es verdad, nose como llegue aca, ni tampoco por qué sigo sentada.

-Debería preocuparme?

-Nah, colgué, sabes como soy - separo mi celular de mi oreja para ver la hora y estoy hace... UNA HORA Y MEDIA.

Ni istiy intirisidi.

Ruedo mis ojos parandome rapido.

-Ya voy a casa, perdí la noción del tiempo. Seguimos The Office mientras cenamos?

Se ríe del otro lado - dalo por hecho chiqui. Te espero aca.

Corto la llamada cuando salgo del local y abro mapas. Mientras cambio mi ruta de la universidad hacia casa, admiro el atardecer por las calles de New York.

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Hola turrakas, como estan?

Yo aca, de vacaciones de invierno. Se me acaban de ocurrir unas escenas spicy para un futuro que siento que tienen potencial.

Ustedes? Cómo estan?

Los leo siempre🤍

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