¡un crío en la scaloneta! ; enzulian

O4: El mejor del Mundo

Enzo es consciente de que el vinculo que tienen su hijo y su pareja es muy fuerte, Julian se la pasa encima de Lucas como si tuviera miedo de que alguien pudiese arrebatárselo de las manos. Lo lleva a sus entrenamientos, se bañan juntos, salen ellos dos solos y el omega no va a su cama hasta no ver que el niño este durmiendo tranquilamente.

Sabe que Lucas tiene un amor especial por Julian y esta bien con eso. Pero a veces le gustaria que su hijo demostrara que no solo lo quiere para conseguir cosas cuando el omega no quiere dárselas.

Álvarez siempre le dice que su cachorro lo ve como su ejemplo a seguir, y que realmente lo respeta mucho. Pero Fernandez cree que solo esta tratando de hacerlo sentir mejor.

Sin embargo, hoy descubrió que aquellas palabras dichas por su pareja en varias ocasiones no eran una mentira. 

El partido contra México llego y todo el equipo salió a la cancha con el objetivo de salir vencedores. Lo cual se dio, con un resultado dos a cero que alegro al país entero. Y uno de los dos goles que marcaron fue de Enzo.

Luego del festejo en la cancha fueron a los vestuarios, donde nada mas pisar el suelo de este unos diminutos bracitos rodearon sus piernas manteniéndolo inmóvil en la entrada. Al bajar la mirada vio el rostro lleno de felicidad de Lucas.

—¡Lo hiciste papi, metiste un gol! —Exclamo el niño eufórico—¡Teno al mejol papá del mundo!

Enzo sentía ganas de llorar, muy pocas veces su hijo lo halagaba de esa manera, diciendo que era el mejor del mundo. Había dado por hecho que nunca podría quitarle ese puesto a Julian.

Pero acá estaba, escuchando a su cachorro gritar eufórico por lo que había hecho, y sin apartarse de él ni un milímetro. El alfa agarro a su hijo y lo levanto del suelo para alzarlo en sus brazos, a lo que este no dudo en aferrarse a su cuello.

—Te quielo mucho papi.

—Yo también Lu, mas de lo que imaginas.

Luego de aquel emotivo momento, que fue presenciado por todos, se dio comienzo al gran festejo. 

Esa misma noche, luego de que todo termino, Enzo miraba al techo de la habitación mientras acariciaba el cabello de Julian. Pensando una y otra vez en lo sucedido con su hijo, el cual dormía plácidamente en la cama de al lado.

—¿Lo escuchaste Ju? Dijo que era el mejor del mundo, que YO era el mejor del mundo.

—Si amor, estuve ahí —Respondió somnoliento el omega—Me canse de repetirte que para él vos sos importante, solo que no le gusta expresar lo que siente. Como cierta personita que conozco.

—Bue, si yo me expreso re bien.

—Ponele —Julian le dio un pico a su pareja antes de acomodarse en la cama—Ahora dormí, que mañana tenemos que levantarnos temprano.

La habitación quedo en silencio unos pocos minutos, ya que Enzo volvió a hablar arruinando la tranquilidad.

—¿Entendes que le gusto mas mi gol que el de Messi? 

—Dios Enzo cerra el orto y dormí.

Pero no podían culpar al alfa, él estaba feliz de saber que su hijo lo admiraba y amaba un montón. Incluso mas que al famoso Lionel Messi.