Falofilia ♥︎ Bustang

5

Estaban a un par de pasos de la mesa, a unos metros del baño y, por primera vez, observa a Buster hablando con tranquila efusividad, sin tartamudeos ni sonrojos.

Se veía sereno y relajado, incluso las tenues luces frívolas y alocadas del club le hacían contrastar su natural encanto masculino, realzando la belleza de sus duras facciones, pero al mismo tiempo viéndose tan tierno y dulce como siempre.

Ese chico lo estaba volviendo loco. Debía relajarse. Quizá esa chica ni siquiera significaba algo para Buster... pero Fang no podía evitar querer ir hasta ella y abofetearla por meterse con lo que le pertenecía, aunque realmente no fuera así. Pero él le había echado el ojo primero así que eso valía.

Tomó el trago que Bull dejó en sus manos y se lo bebió en dos sorbos, llamando la atención de Bo.

─ Fang, no bebas demasiado, Jacky se enojará si llegas demasiado ebrio a casa─ recuerda su amigo, logrando que un infantil quejido saliera de los labios del peliazul.

─ Jacky no me quiere en casa porque irán sus amigas─ le explica a Bo, tomando el trago que solía ser de Leon para bebérselo.

─ ¿Y dónde planeas quedarte, genio?─ se mete de pronto Lola a la conversación.

─ Con Edgar...

─ Edgar y Colette se irán a la casa de playa de los padre de Colette después de que salgamos de aquí. Dudo que ellos quieran acompañante─ le hace saber Bo, frunciendo el ceño.

─  Entonces con Brock...

─ Lo siento, planeo llevarme a Brock a casa de mis padres, mi madre quiere verlo─ vuelve a hablar Bo.

─ ¿Contigo...?─ sugiere Fang una última vez, dirigiéndose a Lola, quien niega con la cabeza de inmediato, el peliazul siente ganas de llorar─ ¿Dónde mierda dormiré esta noche, entonces?

─ ¿De qué hablas, Fang?─ preguntó la voz de Buster, quién recién llegaba nuevamente a la mesa.

─ De nada─ se apresura a decir Fang.

─ Fangie no tiene donde dormir esta noche─ suelta Lola, con la intención de burlarse de su amigo. Buster lo mira comprensivo.

─ Si quieres...─ Buster comienza, pero Fang le interrumpe abruptamente.

─ No importa, conseguiré un lugar─ gruñe, levantándose del sillón de la mesa.─ Iré por más de estos─ dice entrecortadamente, tambaleándose hasta salir de la multitud y perderse en la misma.

Fang no tenía idea de con cuantas personas diferentes había bailado después del quinto trago. Recordaba vagamente estar entre los brazos de un chico que le susurró en el oído su nombre; Grom. Después se le unieron Bull y Colt, quienes se encontraban con Leon, Edgar, Brock y Gray.

Había bailado un par de canciones con ellos, sin embargo, después se apartó del grupo y los perdió de vista. Hasta ese momento.

Justo ahora, no bailaba con nadie y estaba demasiado ebrio como para preocuparse por ello. La música le ensordecía, pero se sentía bien, porque a su alrededor no flotaban preocupaciones, solo notas musicales y distintos aromas de las personas a sus costados, quienes bailaban en estados iguales o peores que el suyo.