¿..Alguna vez me amaste..?

#4

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Narrador/a:

Imperio Japonés dormía plácidamente sobre su cama, por primera vez en esos años durmio bien y sin preocupación.

Se levantó temprano como de costumbre, se estiró y dirigió su mirada hacia las sabanas desordenadas color verde claro. Después lo ordenaría, fijo su visita en una parte de la cama, se le hacia raro ver un bulto en aquella zona, pensando que sería un almohada que se movió de lugar mientras dormía, lo dejó pasar, en cuanto hiba a desviar sus amarillos ojos de ahí, vio aquel bulto moverse.

Claramente no era una almohada.

Agarro el rifle que estaba en una pata de su mesa de noche, llevo su puntería ante el bulto; dispuesto a disparar a lo que sea que estaba ahí.

Escucho como aquella cosa empezaba a sollozar y muy pronto a llorar a gritos justo antes de apretar el gatillo.

Quito las sábanas, y vio a un bebé ahí mismo, con las mejillas teñidas de un rojo ligero; un lunar abajo del ojo izquierdo piel blanca y largas pestañas y lo más importante, orejas felinas.

Tomó en sus brazos al niño para calmarlo, era la primera vez que tomaba a un bebé en brazos.

(...)

─ Dejame entender, ¿despertaste y ya había un niño en tu cama? ─dijo con duda nazi, al ver que su amigo japonés le confirmó con un movimiento de cabeza, significado un «si» supo que si seguía así terminaría con más dudas, y pocas, pero muy pocas respuestas─ entonces literalmente pariste dormido.

─ ¡Third no seas payaso! ¿¡Que se supone que haga yo con un niño!? ─se justificó el ahora padre de familia.

─ Pues lo mismo, se machito, así como te acostaste con el padre de este niño, ahora tienes que tomar la responsabilidad de tus acciones y cría a tu hijo, para que después vaya a la universidad de bellas Artes consiga entrar, volverse un gran pintor y cumplir el sueño de su tio ─solto con poca seriedad cruzado de brazos

─ ¡Oh claro! Como no lo pensé, gracias Third, me cambiaste la vida, ¡obviamente no puedo criarlo! ─dijo con desesperación Imperio─ ¿¡acaso no viste mis ojeras!? ¿¡Mi cara llena de desgracia!? ¿¡mis brazos y piernas!? ¡Estan llenas de vendas! ¡Apenas puedo conmigo mismo! ─recalco cada parte de su cuerpo con pánico mientras sacudía al nazi─ ¡en serio necesito ayuda!

─ O puedes dejarle la responsabilidad a otra persona ─solto el Fascista jugando con el pequeño que estaba en sus brazos; ganando la atención de sus amigos─ tu no puedes estar todo el tiempo con el, solo contrata a una persona que si pueda hacerlo y ya, no es tanto trabajo, solo es ver al niño de noche todos los días

─ Mhh, solo verlo de noche.., a mi esa idea me suena ─nazi ablo en cuanto Imperio Japonés se callo para pensar un poco las cosas

─ No lo se..., ¿que pasa si el niño piensa que no lo quiero? ¿Que si un día se va con sus amigos? ¿o se escapa de noche dejándome solo con mi miseria? O que un día decida ya no estar más bajo mi techo se vaya y se casé tenga hijos una familia feliz pero que nunca me traiga a mis nietos por miedo que los mate en un intento de jugar con ellos por tener aire de asesino ─respondio ante lo dicho por su compañero dando vueltas por toda la habitación y soltando conclusiones salidas del tema

─ Definitivamente te estas saliendo del tema ─intervino el alemán─ te ves más preocupado que Second Reich cuando supo que tenía más de un niño

─ Pff confirmó yo estube ahí ─el italiano alzó la mano como niño al oir lo que dijo el nazi ─ parecía que quería dispararse cuando vio a Nazi

─ Y después mate a Weimar y todos felices ─dijo con orgullo

─ ¿Holaa? ─interrumpio el imperio─ ¿se olvidan del por que estamos aquí?

─ Yo ya di una idea, no me exigan más de lo que puedo ─dijo sin seriedad alguna el Fascista

─ Ahh ─solto con fastidio el japonés saliendo de su respectivo cuarto; volviendo con un gran pizarrón anotandola idea del Fascista en este y poniendo abajo de este las consecuencias─ ¿Tienes una idea a parte Reich? ─vio al nazi alzar la mano pidiendo permiso─ dime

─ ¿Que tal si lo ponemos en una isla junto con otros niños y que entre ellos peleen por sus derechos? ─dijo con ilusion y brillo en los ojos

─ Dios nazi, es un niño, ─dijo molesto borrando la idea del Nazi─ creo que no me queda de otra.., tomaré la idea de Fascista, no es TAN violenta ─mirado a Third Reich

─ ¡En tu cara Reich! ─dijo de forma burlona el italiano apuntando a Reich con victoria para que el alemán se moleste─ por cierto, ¿como lo llamaras? Esta criatura estannn adorablee ─alzando al pequeño en sus brazos

─ Mhh, buen punto ─dijo dudoso el japonés volteando a ver al niño entre cerrando aún.., más los ojos─ Japón ─dijo para agarrar al niño─, tu te vas a llamar Japón

─ ¡Woww! Enserio se parece mucho a tu nombre. ─dijo sin ganas el alemán cruzándose de brazos

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Si, si, se que me tardo mucho en actualizar, pero recién ayer se me vino la imaginación. Este el capítulo más largo que hize de este libro, con 865 palabras.