Capítulo 7. Confrontación.

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----"muchas gracias, este sábado iré, necesito que actúes sorprendida, no me gustaría que Shanks se moleste contigo."----

---s-si gracias--- antes de poder seguir hablando la llamada se cortó a causa del tiempo límite que permitía la cabina telefónica, Uta suspiro y colgó para luego salir, mientras caminaba se encontró con Mihawk, sonriente corrió hasta el adulto solo para abrazarlo por la espalda, acto que provocó que el mayor diera un pequeño salto, parecía que se había sorprendido pero sus piernas no paraban de temblaban,---- ¿Eh? Tío... ¿Estas bien?---- le pregunto al notar como se giraba con un leve rubor en las mejillas.

----U-uta... ¿Q-qué haces aquí?

----yo te pregunté primero...no pareces estar del todo bien, no sabía que habías vuelto de tu viaje por tu trabajo, parece que te enfermaste por el cambio de clima y horario...

----e-estoy bien...ahora, responde tú--- el hombre hablaba con pausas constantes entre sus palabras, además de mostrar un ligero temblor, pero parecía que hacerse el fuerte era algo que se aprendía porque su padre solía actuar igual.

---vine porque quería hacer una llamada...pero si pareces enfermo...---la menor acercó su mano hacia el mayor pero este se agachó soltando un quejido, Uta se preocupó ante tal acción ya que Mihawk se abrazo a sí mismo rodeando sus brazos en su estómago mientras estaba en cuclillas.

---vaya, que coincidencia vernos aquí Mihawk---- la menor levantó la mirada solo para encontrarse con un hombre vestido bastante elegante que en hombros llevaba lo que parecía un pesado abrigo muy caro, este hombre con los cabellos peinados hacía atrás se inclinó mirando a ambos ocasionando que la menor se sonrojara, es la primera vez que veía un hombre con semejante porte y belleza, por su parte Mihawk solo chasqueó la lengua mientras desviaba la mirada,---- se que no es horario laboral pero sueles ser muy grosero con tu jefe... ¿Que ocurre? ¿Te comió la lengua un cocodrilo? Ahahaha.

Uta no comprendía lo que pasaba pero al ver el rostro rojo del hombre a quien consideraba su tío supuso que lo estaban molestando por lo que hizo un puchero mientras se levantaba para "protegerlo" sin embargo el mayor acarició sus cabellos----, está bien...así es él--- dicho esto fue ayudado a levantarse por parte de Crocodile.

----tranquila hermosa, está en buenas manos--- dicho esto acarició los cabellos de la bicolor quién lo miro atenta, Crocodile coloco su mano en las caderas del abogado quién sonrojado soltó un quejido, la pequeña no entendía porque el hombre llevaba tiempo quejándose al mismo tiempo que respiraba de manera frenética, sin embargo más adelante el ojiambar se retorció inclinando su cuerpo hacia atrás solo que el más alto lo detenía mientras reía y con su otra mano la tenía oculta en su pantalón.

Los adultos eran raros además de que aquella situación lo era aún más pero ya era tarde y debía de volver.
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Aquella semana la habían pasado bastante bien a comparación a la otra donde no vio a su padre probar bocado, gracias a que Dadan les había dado demasiada comida ambos pudieron salir bien esa semana. Había llegado el sábado, Uta hacía las labores del hogar mientras Shanks limpiaba los muebles, aún era temprano por lo que aún no era hora de recalentar la comida sin embargo alguien llamo a la puerta.

----yo voy hija---- le informo el pelirrojo con una sonrisa mientras iba a la puerta siendo seguido por la atenta mirada de la menor, Shanks abrió la puerta con una sonrisa pero parecía que vio a un fantasma ya que rápidamente cerro la puerta,---- ¡N-no hay nadie!--- dijo aquello acompañado de un suave grito.

----papá es de mala educación dejar afuera a las personas.

----U-uta... N-no

La menor ignoro de manera olímpica a su padre ya que abrió la puerta sin pensarlo dos veces topándose con un hombre alto de cabellera negra quien traía unas maletas en sus manos, además de tener entre sus labios un cigarrillo, al ver a la niña lo apago para luego sonreír.

---pero que hermosura ven mis ojos, mucho gusto, soy Ben Beckman y estoy buscando a mi viejo amigo, ¿Lo conoces hermosa?

---¡Si!--- Shanks rápidamente llegó junto a la menor para moverla dejándola detrás de él, miro al pelinegro con un puchero al mismo tiempo que tembló.

---¡Conozco esa vieja rutina!--- le recriminó mientras lo señalaba con su único brazo,--- mi hija es muy joven para que le coqueteen, ya estás viejo.

---también te extrañe--- fue lo que dijo el más alto con una suave sonrisa,----oye preciosa...--- llamo a la menor quién se acerco--- ¿Puedes hacerme un favor?

---s-si...--- asintió sonrojada.

---necesito que vayas a la tienda y me traigas...veamos...un helado de uva en bolitas, a tu padre tráele una barra de chocolate, debe ser de envoltura roja y con el cambio comprate lo que quieras--- dicho esto saco de su billetera varios billetes, ni siquiera los contó pero se los entrego a la menor quién lo miro sorprendida ya que en su corta vida no había tenido tal cantidad de dinero en sus manos. No lo pensó dos veces así que se fue corriendo.

----¿Porqué le pediste eso?

----quiero hablar contigo--- sonrió para luego acercar su mano hasta el pelirrojo la presiono de forma que está quedó en su torso del lado izquierdo, su brazo no estaba por lo que quedó aquella forma---, pobre pollito...

----¿Me vas a molestar siempre con eso?--- desvío la mirada pero Ben sonrió.

---lo siento ¿Me dejas pasar? Tengo que hablar contigo.

El pelirrojo bajo la mira sin embargo se hizo a un lado permitiéndole pasar al más alto, Ben tomo sus maletas e ingreso al hogar lo primero que noto es la gran cantidad de fotografías que había colgadas tanto en las paredes como marcos en diversos muebles de la casa, todos estos centrándose en su hija, además de que había uno que otro con sus amigos, no cabía la menor duda de que la pequeña era su adoración. Con una sonrisa en labios Beckman tomo asiento en el comedor mientras dejaba las maletas de lado, espero al dueño de la casa quién dudando tomo asiento frente a él.

----ha pasado un tiempo desde que nos sentamos frente a frente ---- Shanks sonrió apenado sin saber que decir en realidad ya que jamás pensó que justamente él lo vería en tal estado.

---tienes razón, cuando me enteré que volviste a hablar con los muchachos espere paciente porque pensé que también me llamarás pero...me puse celoso al no ver nada--- sonrió para luego mirarlo a los ojos,---- me debes una gran disculpa ¿Sabes?

---lo siento...--- suspiro,--- no sabía que debía decirte o que hacer entonces...bueno...

---vale, a todo esto ya que estamos aquí, necesito pedirte un favor.

----no presto hijas ni nada.

---no--- suspiro y sonrió,---- tuve problemas con el departamento que estaba rentando y ahora no tengo nada, ¿Qué te parece si me quedo contigo? Prometo pagarte alquiler.

---¿Eh?

---si, me quedo te pagaré por un cuarto, agua y comida, no se me hace una mala idea, además de esa manera podré estar cerca de mi mejor amigo para ponerme al día, ¿Qué dices?

Los ojos de Beckman se centraron en el pelirrojo quien por unos instantes dudo si era correcto pero al mismo tiempo era consciente de que le hacía falta ingresos en el hogar por lo que mientras soltaba un suspiro acepto la propuesta del pelinegro quien le sonrió. Al poco rato de haber tenido esa conversación había vuelto Uta, traía los postres que le encargó Ben y también trajo para ella un helado con la imagen de un personaje de anime, se veía tan feliz por poderse dar un privilegio tan grande que era comer helado incluso el pelirrojo comió el chocolate sonrojado, saboreando de manera lenta aquel dulce de cacao que tanto le gustaba cuando era joven, era claro que ahora incluso un helado era un privilegio para ambos.

---ya que mi buen amigo acepto mi trato--- intervino sorprendiendo a la pequeña familia quién lo miro con curiosidad,---- ¿Qué tal si vamos a comer a fuera? Yo invito, así que no se contengan por favor---- dichas estás palabras sonrió amablemente al dúo frente a él, lo conocía tan bien que Shanks acepto porque, era imposible decirle que no a Ben Beckman.

I'm hanging in your hands.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora