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Y ahí estaba mingi dándolo todo en clases de voley, pronto se vendrían los campeonatos de voley que se hacían en su escuela y quería hacer lo mejor posible para ganar.

Sus brazos dolian de tanto pegarle a esa maldita pelota, se sentía algo débil pero todavía tenia energía.

Flexiono sus piernas levanto su trasero y bajo un poco más su torso cuando tuvo que golpear la pelota con manos bajas, mingi Trataba de verse sensual con sus movimientos porque sabia que su novio estaba en las tribunas mirándolo con una sonrisa ladina.

Unos minutos más y terminaron por el Día, saludo a sus compañeros y fue a tomar sus cosas.

──Lo hiciste muy bien minnie──Halago yunho besando sus gorditas mejillas.

──Gracias yuyu, estoy realmente ansioso por el Campeonato──Regalo uno de sus hermosas sonrisas.

──Ganaras cariño, eres muy bueno en esto.

──Gracias yuyu, ven vamos a casa ya estoy muy cansado──Tomo entre sus gorditas manos las del contrario para caminar al estacionamiento.

──Realmente te quedan muy bien esos shorts bebe──Ya dentro del auto yunho apretó uno de sus muslo sacandole un jadeo──Si hubieras visto como tu culo rebotaba──Apreto más fuerte su agarre dejándole sus dedos marcados.

──Y-yuyu no diga eso──Susurro avergonzado.

Y ahi estaban de nuevo,sufriendo de una tensión sexual.

Mingi y yunho eran novios desde hace un año, hace poco los habían cumplido, yunho estaba realmente feliz de tener a mingi a su lado, el menor era tanto peculiar y le encantaba, no sabía que era lo que hizo para obtener al pequeño song mingi delante de sus ojos, era un amor que necesitaba ser cuidado solo por el, por jeong yunho.

Su amor era tan grande que quería tener siempre a su menor entre sus brazos, darle cariños, abrazarlo como tanto le gustaba, mimarlo, darle besitos y muchas más cosas que hacían que a mingi lo ponga feliz.

Cualquiera los envidiaria.

Todo marchaba a la perfección, amor y cariño era lo que describía en esa relación pero no sólo eran esas dos oraciones para yunho, de cierta forma había empezado a experimentar cosas que todo adolescente experimentaría aunque el ya había pasado por esa etapa ahora era un adulto.

Ver a su Dongsaen ya no era casi lo mismo, ¿dede cuando usaba esos shorts que dejaban ver sus blanquecinos muslos?, era eso o nunca se dio cuenta que tales prendas le darían serios problemas en su entrepierna.

Si el peligris supiera de tales pensamientos del mayor querría correr lejos de el, no quería verse como un adulto hormonal pasando por las hormonas alborotadas de un adolescente.

Pero estaba equivocado, su menor tenia casi sus mismos pensamientos y en una noche cualquiera la lujuria se apoderó de ellos sacando sus lados salvaje.

──Yuyu me escuchaste?──El de cabello gris lo miro con un puchero curioso en sus labios, era tan inocente.

──Lo siento cariño, de que hablabas? me distraje── Pregunto acracioando los mechones grises del menor.

──No importa, hyung me daria besitos?── Abulto sus labios e infló sus gorditas mejillas, le daban ganas de estrangular esas pomposa mejillas y besarlas.

──Claro cielo──Lo tomó de las caderas y lo levanto para sentarlo sobre sus muslos, tomó sus mejillitas y las beso y hacerco sus labios a los del contrio.

𝘚𝘸𝘦𝘦𝘵 𝘰𝘳𝘨𝘢𝘴𝘮♢𝘠𝘶𝘯𝘨𝘪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora