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Levi tiene un pequeño negocio de flores a las afueras de Kioto, mientras que cierto rubio pasa a comprar unas cuantas camelias cada fin de semana.
o donde Levi está enamorado del desconocido de las camelias.
Cuando termino de preparar el chocolate logro escuchar la puerta del baño abrirse, sus fosas nasales se dilataron al sentir el olor a jabón lavanda que ocupaba, justo cuando creyó que su corazón se había calmado, esté volvió a palpitar de forma desordenada terminando con los nervios a flor de piel, a fin de cuentas, Erwin termino en su casa, oliendo a él y tal vez eso le gustaba más de lo que debería.
Como pudo, llevo ambas tazas en sus manos enervantes hasta dejarlas sobre la pequeña mesita ratonera que adornaba de forma armoniosa la sala. –Levi, necesito algo de ropa– mierda, Levi había olvidado por completo el hecho de que toda la ropa de Erwin estaba empapada, probablemente en el baño
–Ah, s-sí, espera– Corrió a su habitación con las mejillas algo coloradas, tratando de mantener la compostura, llevo la ropa más grande que había encontrado en su armario, toco la puerta del baño y pronto Erwin asomo sus ojos por una pequeña rendija, que lindo, Levi rio– Aquí tienes, ¿puedes darme tu ropa mojada?, la pondré en la secadora– El rubio asintió, entrando de vuelta el baño tomando la ropa empapada depositándola en las manos del pelinegro –Gracias, oh, el chocolate caliente esta sobre la mesa, date prisa o se enfriara, Le dio una última sonrisa para después ir a su secadora y poner la ropa.
Después de programar la secadora volvió con pasos sosegados a la sala, listo para beber su taza de chocolate caliente, Erwin ya se encontraba sentado sobre el sofá más grande, el más bajo avanzó hasta el sofá más cercano a él.
Vapor caliente aun emanaba de su cuerpo con la sensación de estar en el cuarto de baño –Gracias por prestarme tu ducha– Erwin estaba erguido mirando fijamente el techo, tal vez pensando en algo y Levi definitivamente estaba ansioso por saber la razón de su semblante tan abatido. –A veces no puedo entenderlo– Entorno los ojos, para después mirar con ojos profundos a Levi. Aire helado recorrido su espalda viendo los ojos de Erwin –me siento tan cómodo y feliz en donde tu estés– el corazón de Levi se encogió, no sabía que responder, a decir verdad, se sentía algo abrumado, con el cuerpo entero en llamas y como si estuviera entumecido–
–Supongo que ambos nos sentimos igual, me alegra poder ser tu lugar seguro– Erwin admiro como las facciones de Levi se suavizaron con una sonrisa, no supo si lo que pasaron fueron segundos o minutos, o simplemente el tiempo se detuvo, basta, Levi se acomodó en el sofá –¿Puedes hablarme de lo que te paso? – el de cabello oscuro vaciló un poco en sus palabras, no sabía si sería buena idea preguntar. –Puedes ir a dormir a mi habitación, si no quieres Hab–
–Victoria.– Su cuerpo grande se removió en el sofá, su mano se estiro hacía la taza de chocolate, Levi pudo notarlo Está temblando, tomo la taza en sus manos como si intentará calentarlas, a pesar de que dentro de la pequeña casa había un ambiente cálido... –ella me abandono– Su voz se cortó solo unos segundos después, agachó su cabeza sosteniendo con dificultad la taza, un gemido doloso salió desde lo profundo de su garganta y sus lágrimas salieron como un raudal, Levi se levantó con rapidez dejando su propio chocolate sobre la mesa y llegando a su lado de forma rápida, tomo lo que obstruía sus manos para finalmente tomarlo entre sus brazos, estos mismos no cubrieron su cuerpo en totalidad. –Ella solo dijo que estaba enferma de mi– su cuerpo entero temblaba como una hoja en medio de una corriente de aire –¿de verdad soy tan detestable, y miserable para que las personas me abandonen de esta forma?, Soy tan común y reemplazable, ¿Por qué las personas pasan por encima mío tan fácil?, Levi...– y aunque no lo dijo, su corazón se rompió, a veces, él pensaba lo duro que era seguir una amistad con el hombre que amaba en secreto, y ahora estaba el aquí, en su casa, con su olor hablándole de la mujer que amaba, sus sentimientos comenzaron a desbordarse como un vaso completamente lleno de agua, trato de alejarse antes de sobrepasar sus límites, pero los brazos fornidos del hombre lo sostuvieron con fuerza –No, por favor, quédate aquí– Erwin enterró su cara en su estómago, pronto su corazón se sintió tan roto–
–¿No... puedo ser yo?– El cuerpo de Erwin se destenso, su cabeza se levanto para mirar los ojos azules de Levi –¿Estaría bien si soy yo, Erwin?–
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Primer capitulo del año, siento mucho demorar tanto ಥ_ಥ.
