Rodrigo sintió un par de brazos rodear su cintura por detrás para luego un par de dientes
mordisquear su hombro caminando hasta llegar a su cuello donde siguió con los mordiscos, lamiendo un poco también haciéndole cosquillas; se detuvo unos momentos donde estiró el brazo para dejar el vaso recién vacío sobre la mesa de la cocina y acarició los brazos de su novio por sobre la tela de su curiosa pijama de cuerpo entero que siempre solía usar.— Buen día, tomi. —murmuró girándose sin romper el abrazo, causando que tomas dejara descansar su mejilla en la curvatura de su hombro.— ¿Acabas de levantarte?
— Desde hace rato, pero me duché, luego volví a meterme a la cama... Y no quise salir de nuevo.
Negó divertido, alzando ambas manos para acunar su rostro y dejar un suave beso sobre su frente. Le miró abultar los labios pidiéndole mimos silenciosamente, a lo que se inclinó un poco para dejar dos pequeños picos sobre sus labios que le causaron cosquillas, haciéndole soltar una risita baja. Tomas dejó un besito sobre su mentón antes de rodear su cuello con sus brazos y esconderse en su lugar favorito, la curvatura de su hombro.
Rodrigo abrazó su cintura acariciándole con sus pulgares por sobre la suave tela del pijama de conejito.— ¿Por qué volviste a ponerte el pijama si ya te habías duchado?
— Es que es muy cómodo.— Murmuró sobre su piel.—Además está haciendo frío y el pijama está calentito. Y lindo... Y me gusta mucho.
— Eish, deja de ser tan tierno.— Fingió quejarse abrazándole con más fuerza.— Mi corazón no lo soportará más tiempo.
Tomas salió de su pequeño escondite para mirar directamente sus ojos; su ceño se había fruncido y sus labios aplanado ligeramente.— Yo no soy tierno, tú eres el tierno gatito.
— Claro que no, el tierno aquí eres tú~
— Tú lo eres~
— Yo no soy el que está usando una pijama de conejito.
Tomas abrió la boca para protestar, pero al no tener nada que decir ante eso volvió a cerrarla.
Frunció el ceño y abultó ligeramente los labios antes de inflar sus mejillas y soltar aire en un resoplido frustrado. Rodrigo rió sinceramente agachándose un poco y deslizando las manos por la tela del pijama hasta llegar a sus glúteos, sosteniéndole con fuerza logrando alzarlo y obligarle a rodearle con sus piernas teniendo que aferrarse a sus hombros para no caer. Caminó con él en brazos hasta lograr llegar al salón principal, sentándose en el sofá más grande acomodándole sobre su regazo.— Realmente te gusta muchísimo.— había dicho mientras jugaba con la colita esponjosa del pijama.
— ¡Es realmente cómodo!
Tomas asintió totalmente seguro, removiéndose unos segundos donde meneó la esponjosa colita del pijama antes de quedarse completamente quieto, enterrando sus pequeños dedos en los cabellos crecientes de la nuca de su menor. Desde que Rodrigo había conseguido ese pijama en especial para cobrar la pequeña deuda que tenían por haberle hecho usar ese par de orejitas de gato, Tomas había cumplido con su promesa de usarla cada noche, pero incluso llegaba a usarla durante el día. Claro que no le molestaba en lo absoluto, le fascinaba verle caminar de un lado a otro vestido de aquella manera mientras daba pequeños saltos juguetones de en vez en cuando fingiendo ser un conejito real, meneando la colita esponjosa al mover sus caderas y jugando con las largas orejitas caídas. Era tan adorable.
Pero habían ocasiones en que no podía evitar mirarle con otros ojos. Porque el pijama era un poco ceñido en los lugares correctos; al ser casi de su talla exacta la tela suave apretaba sus muslos y levantaba ligeramente sus glúteos como si fuese una segunda piel, dejando casi nada a la imaginación. No podía evitar sentirse acalorado de pronto cuando tomas caminaba por los pasillos del pequeño departamento, dando cortos saltitos mientras jugaba con barry o naruto haciendo mover la colita esponjosa cuando intentaba atrapar a alguno, teniendo que gatear por las baldosas al haberse metido bajo la mesa y así lograr alcanzarle. No podía evitar sentirse avergonzado cuando se atrapaba a sí mismo teniendo fantasías al verle de esa manera, pues se veía demasiado adorable como para pensar en ese tipo de cosas. ¿Era enfermo calentarse al verle usar un pijama de conejo viéndose realmente inocente?
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⊱✿⊰𝐽𝑢𝑚𝑝 𝑠𝑤𝑒𝑒𝑡𝑖𝑒 𝑏𝑢𝑛𝑛𝑦 ⊱✿⊰
Fanfiction¡𝑇𝑜𝑚𝑎𝑠 𝑒𝑟𝑎 𝑟𝑒𝑎𝑙𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑎𝑑𝑜𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 𝑢𝑠𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑒𝑠𝑒 𝑎𝑑𝑜𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 𝑝𝑖𝑗𝑎𝑚𝑎 𝑒𝑛𝑡𝑒𝑟𝑜 𝑑𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑒𝑗𝑖𝑡𝑜! 𝑎𝑢𝑛𝑞𝑢𝑒. 𝐶𝑜𝑚𝑜 𝑙𝑜𝑠 𝑐𝑜𝑛𝑒𝑗𝑖𝑡𝑜𝑠, ¿𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑎𝑛 𝑎𝑙𝑡𝑜 𝑝𝑜𝑑𝑖𝑎 𝑠𝑎𝑙𝑡𝑎𝑟? - 𝑆𝑒 𝑠...