Aguacero ꒷꒦

Ardor

❤️☀️🌊

Era uno de los días más cálidos en las playas del Mar del Plata y no había manera de que Rodrigo Carrera lo pasara encerrado adentro de la habitación de hotel. Iba a costar mucho convencer a Iván de que se uniera a él, pero a Rodrigo siempre le gustaron los desafíos.

“Dale Ivancito, no hay chance de quedarse acá adentro cuando está hermoso afuera, podemos ir a buscar una parte apartada de la playa, que esté cerca de esa tienda que te gusta, hasta alquilaré una sombrilla así no te quemás”. Rodrigo le dio a Iván su mejor sonrisa.

Cuando Iván ni levantó la vista de su celular, dió a entender que su primera oferta no había funcionado, subió las apuestas y le prometió a Iván que cuando regresaran a Buenos Aires le ordenaba todo el departamento.

Eso pareció funcionar, ya que unas horas más tarde, Rodrigo se encontró en la playa, cargando sus cosas y las de Iván y encontró un lugar apartado que estaba cerca de la tienda como le había prometido a Iván. Extendió la manta sobre la arena y se aseguró de que Iván estuviera listo antes de ir a buscarle un trago y ver si alquilaba una tabla de surf.

Regresó a su ubicación, donde Iván estaba ocupado poniéndose protector solar en los brazos, "¿Querés ayuda?" preguntó, tomando asiento detrás de Iván en la manta. Extendió su mano hacia la botella de protector solar, que Iván le entregó, solo después de darle una mirada sospechosa.

Dándole a Iván una sonrisa inocente, Rodrigo vertió un poco de protector solar en su mano y comenzó a masajearlo en los hombros desnudos de Iván. Movió sus manos en movimientos circulares, poniendo presión donde podía sentir que se habían formado los nudos en los músculos de Iván.

Iván suspiró suavemente, moviendo la cabeza hacia un lado, con los ojos cerrados disfrutando de su masaje. Rodrigo se inclinó hacia adelante y presionó un beso en su cuello, “Estás re tenso, no es raro que hayas estado tan gruñón, bebé”, bromeó, besando su cuello unas cuantas veces más.

Dejando escapar un suspiro de frustración, Iván giró la cabeza para mirar a Rodrigo, "Entonces hacé algo al respecto", lo desafió.

Levantando una ceja hacia Iván, "¿En público?" inquirió. Cuando el rostro de Iván se sonrojó, Rodrigo se rió y ahuecó su mandíbula para presionar sus bocas juntas. Iván gimió mientras le devolvía el beso, moviéndose para que su espalda quedara al ras contra el pecho de Rodrigo.

Rodrigo lamió el labio inferior de Iván mientras sus manos recorrían su cuerpo, antes de colocarlas sobre la piel pálida de Iván, "Tan hermoso", murmuró contra la boca de Iván, las uñas arrastrándose suavemente sobre la piel de sus muslos, deteniéndose cuando llegaron al borde. de su bañador.

Iván gimió, abriendo sus piernas mientras Rodrigo pasaba sus manos por el resto de los muslos de Iván hasta sus caderas. Pasó las manos por el bulto que se hizo prominente en su traje de baño.

Con un gemido silencioso, Iván agarró la muñeca de Rodrigo y colocó su mano sobre su pene vestido. Jadeó y se frotó contra la mano de su novio, gimiendo contra su boca, "Solo tócame ya", se erizó.

“Sí señor,” Rodrigo lo palmeó a través de su traje de baño antes de deslizar su mano debajo de la cinturilla de su maya y sacar su dura pija.

Iván apoyó su cabeza contra el hombro de Rodrigo, una mano agarrando la manta mientras la otra sostenía la muñeca de Rodrigo. Movió sus caderas contra su mano, buscando su propio placer.

Inclinándose para besar la piel pálida del cuello de Iván, Rodrigo chupó una marca en la base antes de besar su oreja, "Mirate", susurró, arrastrando los dientes por la oreja de Iván, "Garchandome la mano y en la playa, quién diría que serías tan pervertido Ivancito —bromeó, chupando el lóbulo de su oreja antes de besarlo detrás de ahí.

Al darse cuenta de cómo las caderas de Iván se aceleraron ante las palabras susurradas en su oído, Rodrigo sonrió antes de presionar su boca contra la oreja nuevamente y susurrar: "No sabía que mi lindo Iván era tan sucio, seguro que te encantaría que te coga acá y ahora, donde cualquiera pueda ver". —susurró.

Un fuerte jadeo escapó de la boca de Iván cuando sus caderas se derramaron, el semen se derramó sobre la mano de Rodrigo. Ayudó a Iván a sobrellevar su orgasmo, moviendo su mano a lo largo de la cabeza hasta que Iván se derrumbó contra él.

“Te odio demasiado,” resopló Iván, sus mejillas rojas por el sol y por su orgasmo.

Rodrigo solo sonrió mientras deslizaba el traje de baño de Iván sobre su ablandada pija y se ponía de pie, "No tanto, vas a odiarme cuando haga esto", dijo mientras se limpiaba la mano con unas toallas de papel. Se inclinó a cargar a Iván, quien se movió y luchó contra su fuerte agarre, "¡Rodrigo Carrera, te juro que si me tirás al agua, te voy a matar!" gritó mientras Rodrigo se acercaba a la orilla.

Sin una palabra y solo un beso en la mejilla de Iván, Rodrigo lo tiró al agua. Se rió mientras Iván se esforzaba en respirar, apartándose el agua de su cara. Miró a Rodrigo antes de agarrar su tobillo y tirarlo al agua.

Rodrigo miró juguetonamente a Iván antes de salpicarlo con agua, "¡Que grosero Iván! ¡Ahora estoy todo mojado!" Él rió.

Iván ignoró sus quejas mientras se arrastraba hacia Rodrigo y lo besaba en la boca, "Y qué tal si me cogés contra la arena ahora".

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No tengo nd para desir, además q nunca fuí a mar del plata entonces todo sobre la playa lo inventé

Si t gustó dale laic