Esta flor del género Paeonia debe su nombre a Paeón, el médico de los dioses.
La Peonía es una de las flores más utilizada en la cultura oriental siendo el símbolo tradicional en China de la riqueza y el honor.
Simboliza las acciones personales que asumen riesgos y desafíos para obtener grandes recompensas.
La sangre parece ralentizarse en las venas de Min-ho, y desde luego su corazón no late con normalidad. Podría no ser nada. Es más, está convencido de que es una mera casualidad. Es imposible que Assane haya escogido ese nombre pensando en él y en lo que pasó hace diez años en Seúl. Porque si aquel acontecimiento hubiera significado tanto para él, hoy le hubiera reconocido, ¿no? ¿Quizá sí que se acuerda de lo que vivieron juntos? ¿Puede ser cierto que esté tan irreconocible que Assane no se percate de que es él? Pero eso es imposible, porque Min-ho sabe que él mismo no ha cambiado tanto. Sigue siendo igual de delgado y de bajito, casi juraría que no ha crecido ni un centímetro. Y su cara, a pesar de los años transcurridos, tampoco ha cambiado tanto. Pero, ¿podría ser?
La sola idea de que Assane realmente no le haya olvidado, desata un rayo de esperanza en su interior. Es estúpido, lo sabe, pensar así, pero no puede evitarlo.
Quien sí ha cambiado de verdad, es Assane. Aquel adolescente que conoció entonces, ha desaparecido bajo este nuevo cuerpo más grande, fuerte y esbelto. Es más, Min-ho no le ha reconocido hasta que él ha dicho su nombre. ¿Podría ser que a Assane le haya ocurrido lo mismo?
Min-ho siente el peso de las miradas de sus amigas. Justo después de lo que les ha contado sobre Assane en la habitación, es imposible que ellas no hayan atado cabos. Pero Min-ho no se va a arriesgar a mirarlas, porque si lo hace, podría derrumbarse, y no quiere hacerlo. Al menos no delante de él. Así que, con todas las fuerzas que es capaz de reunir, permanece con la vista clavada en el plato, como si lo que acabara de pasar no le estuviera estrujando hasta el alma por dentro. Se muere de la curiosidad, necesita saber más.
Tras un breve silencio que, seguro que todo el mundo entiende menos Diego, Emma vuelve a tomar la voz cantante en la conversación.
—¿Cerisier? Vaya, un nombre muy original, Assane. Y, dinos, ¿en qué te inspiraste?
Ella sabe que está metiendo las narices donde no la llaman, pero también conoce bien a sus amigas y está convencida de que justo ahora todas apoyan, por una vez, que sea tan cotilla e intrusiva. Es consciente de que todas ellas, incluido Min-ho, quieren saber el por qué.
Assane la mira a los ojos sin pestañear, camuflando por completo cómo se siente al respecto. Nadie en esa mesa, ni siquiera su amigo Diego, sabe qué piensa en este momento. No flaqueará, no dejará que los demás sepan lo mucho que le ha afectado este encuentro con Min-ho. Ese chico que le cambió por completo, que le enamoró en su juventud y que después le abandonó sin pensarlo dos veces.
—No tiene nada de especial, — replica, imperturbable. —Tenemos una franquicia con diferentes hostales en varios países, y todos tienen el nombre de alguna flor.
Esa respuesta se clava en el corazón de Min-ho acuchillando la leve felicidad que había sentido minutos antes. Pero sigue sin mostrar ninguna reacción, prefiere seguir mirando el plato.
—Bueno, dicho así, parece que somos los dueños de una gran cadena. En realidad, sólo tenemos un hostal aquí, y otro en Holanda. Aunque con perspectivas de abrir otro nuevo este año. —Añade Diego, sin ser consciente de que está dejando vendido a su amigo. Este le lanza una mirada de odio que Diego reconoce bien, pero que no sabe interpretar.
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EL JARDÍN QUE DIBUJAMOS
RomanceEsta novela se escribió en directo en el canal de Twitch "Entre tulipanes" cada martes desde el 30 de agosto de 2022. Muy pronto estará disponible en Amazon.