Un Bebé En El Área (Newt y tú) CORRIGIENDO ORTOGRAFÍA

Cuatro

-Te amo-me dice.

-Y yo a ti Newt-él me mira y me da un dulce beso.
Nos quedamos un rato abrazados, hasta que decidimos ir a la habitación de los chicos, a ver que había de nuevo... aunque yo solo queria ver a mi hermano.

Llegamos a la habitación donde los chicos habían dormido.
Algunos, muy pocos, dormian, Thomas era uno de ellos, Minho estaba parado al lado de su cama.

Newt y Minho intercambiaron miradas, mi novio asintio y mi mejor amigo se acercó un poco más a mi hermano y lo agitó ligeramente.

-Eh, Thomas... despierta, hermano-Thomas abrió los ojos y los posó en Minho, luego los posó en Newt.

-Me alegra ver que todavía recuerdas cómo echarte una siesta-dijo Newt.

-¿Cuánto tiempo dormí?-preguntó mi hermano.

Newt miro su reloj que llevaba en la muñeca.

-Un par de horas. Cuando notamos que te habías acostado, en realidad todos nos sentimos más tranquilos. No hay mucho que hacer excepto sentarnos y esperar que ocurra algo nuevo. Este lugar no tiene salida.

-¿Al menos tenemos algo de comida?-preguntó mi hermano de nuevo.

-No. Pero estoy totalmente seguro de que esta gente no se tomaría el trabajo de traernos hasta aquí y engañarnos o lo que sea que hayan hecho, para dejarnos morir de hambre. Algo va a suceder, estoy seguro. Me recuerda cuando nos mandaron al Área. Yo estaba en el primer grupo, junto con Alby, Minho y varios más. Los Habitantes originales.

-¿Y en qué se parecía a esto? -pregunté con curiosidad, Newt fijo su mirada en la pared de ladrillos de una de las ventana.

-Nos despertamos al mediodía. Nos hallábamos acostados en el suelo alrededor de las puertas de la Caja, que estaba cerrada. Nos habían borrado la memoria, igual que a ti cuando llegaste. Te habría sorprendido ver lo rápido que nos recuperamos y dejamos el pánico a un lado. Obviamente, no teníamos ni la más remota idea de lo que había pasado, cómo habíamos terminado allí ni qué se suponía que debíamos hacer. Estábamos aterrados, desorientados. Sin embargo, como todos nos encontrábamos en la misma situación espantosa, nos organizamos y analizamos el lugar. En pocos días, la granja estaba funcionando plenamente y cada uno tenía su propio trabajo.

-¿Los Creadores les habían dejado todo preparado? ¿Los cultivos, los animales, todo eso?-preguntó mi hermano. Newt asintió.

-Sí, pero nos tomó muchísimo trabajo que todo funcionara en forma eficiente. Utilizamos mucho el metodo de ensayo y error.

-Entonces... ¿en qué te recuerda esto a aquello?-volvió a preguntar mi hermano, Newt desvió la vista de la ventana y lo miró.

-Supongo que en ese momento todos pensamos que era obvio que nos habían mandado allí por una razón. Si hubieran querido matarnos, ya lo habrían hecho. ¿Para qué iban a enviarnos a un lugar inmenso con una casa, un granero y animales? Y como no teníamos otra opción, lo aceptamos y comenzamos a trabajar y a explorar.

-Pero aquí ya terminamos de explorar .Y no hay animales, ni comida, ni Laberinto.

-Ya lo sé, pero, bueno, es la misma idea. Es obvio que estamos aquí por una maldita razón. A la larga descubriremos cuál es.

-Si antes no nos morimos de hambre-dijo mi hermano.

Newt apuntó hacia el baño.

-Tenemos agua de sobra, así que pasarán por lo menos unos días antes de eso. Algo va a suceder.

-¿Y qué piensas de todos esos muertos que vimos? Quizá nos rescataron de verdad, los mataron y ahora estamos perdidos. Tal vez se suponía que debíamos hacer algo, pero ahora todo se arruinó y nos dejaron aquí para morir-Newt lanzó una carcajada.

-Shanck, eres un larcho deprimido. No, después de ver desaparecer todos esos
cadáveres mágicamente y las paredes de ladrillos, yo diría que esto es parecido al Laberinto, raro y sin explicación. El misterio más grande de todos. Quién sabe: tal vez sea nuestra próxima prueba. Pase lo que pase, tendremos una oportunidad, igual que en el maldito Laberinto.

-Sí-murmuró Thomas-Espero que tengas razón. Mientras no aparezcan de improviso los Penitentes, estaremos bien-Newt nego con la cabeza.

-Por favor, güey, ten cuidado con lo que pides. Quizá nos manden algo peor.

-¿Y ahora quién es el alegre?-dijo Thomas con sarcasmo.

-Es cierto-replicó Newt y luego se puso de pie-Ire a ver a Dylan y luego ire a molestar a otro larcho antes que empiece la maldita diversión.

-Ten cuidado con lo que pides-le dijo Thomas.

Newt se alejó sin decir nada más, me senté en la cama, al lado de mi hermano.

-¿En serio crees que vendran los penitentes? ¿Es una posibilidad?-pregunté, mi hermano sólo se encogió de hombros y negó con la cabeza.

-No lo sé-dijo-Espero que no, pero pase lo que pase, siempre te protegere-me abrazó, y dejó un beso en mi cabeza.

*3 días después*

Tres días, tres malditos días pasaron, y seguíamos sin comer. Me sentía muy débil, cada vez el estómago me duele peor, mi piel está muy pálida, más de lo normal.
Dylan cuando esta despierto no para de llorar hasta que logró dormirlo.

Acarició el cabellito de Dyl que ahora esta dormido a mi lado, esta muy pálido y débil, como todos nosotros, respiraba pesadamente y parecia haber perdido algunos kilos. Lo acurruco entre mis brazos y poco a poco logro quedarme dormida.

********

-Pss....______ despierta-alguien me sansandeaba ligeramente-Vamos, despierta-segía insistiendo. Estire mi brazo y aparte bruscamente el de la persona.

-Minho, no.... dejame en paz-no tenía ganas de que me despierten, al estar despierta lo único que hacía era morir de hambre como los demás y estar de mal humor.

-Vamos, levantate-dijó, abrí los ojos molesta, cuando mi vista se adaptó, vi a Minho enfrente mio con una manzana.

-¿Qué...?-no pude terminar de hablar porque Minho me metió la manzana en la boca.

-Callate y come... haber si así te va el mal humor-dijo y mordió su manzana.

-No tenías porque hacer eso-me queje molesta cuando me saque la manzana de la boca-¿De donde salió?-pregunté más calmada y le di un mordisco a la manzana.

-No sé, apareció, unos habitantes lo encontraron-dijo encongiendose de hombros, me senté despacio en la cama-Ven, vamos, todos están afuera-me ayudó a levantarme lentamente de la cama, un fuerte mareo me atacó y casi caigo al suelo, por suerte Minho me sujetó antes de caer al suelo-Con cuidado-pasó mi brazo por encima de sus hombros y su brazo por mi cintura-Vamos-empezamos a caminar hasta afuera

Caminamos hasta la sala principal, me acerqué despacio a mi hermano, que estaba viendo algo de una manera que no pude descifrar, seguí su mirada y esta di con un hombre.

Atras de un escritorio había un hombre delgado, llevaba un traje blanco, estaba sentado en un silla, con los pies levantados y cruzados sobre el escritorio, leyendo un libro.

No olviden que los amodoro

*Belu