With flowers and kisses- Yeonbin/Soojun

Rosas en el aire

Yeonjun acaba de llegar a Seúl, se cambió de ciudad porque sus padres dijeron que debía ir acostumbrándose ya que viviría ahí cuando comience la universidad. Se encontraba mudándose a un barrio muy acomodado, sus padres eran detallistas en eso, querían que su hijo siempre tenga lo mejor y cómo tenían posibilidad económica siempre se lo darían.

El planea prepararse para estudiar artes, pintar es una de las cosas que más ama y se considera un prodigio en eso. Le encantan las flores y pintarlas aún más.

Mientras terminaba de acomodar unas cosas que le faltaban sonó el timbre. No pidió nada ni esperaba visitas, camino hasta la puerta y la abrió.

-Hola cielo- Su madre, una mujer pequeña pero hermosa que en sus manos llevaba una pequeña maceta- te traje esto, espero que te guste.

-Gracias mamá, hola papá.

El padre de Yeonjun hizo una reverencia y el menor se movió para que puedan ingresar.

-Veo que lo decoraste muy bien, no me gusta tanto el azul pero supongo que son tus gustos, te traje una orquídea para el jardín, ¿Ya comenzaste a sembrar?por lo visto no.- Su madre no había dado ni diez pasos y ya había dicho media biblia ida y vuelta, caminado afuera y adentro de la casa- ¿Fuiste a tu nueva escuela?¿conociste a tus profesores?¿Ya tienes a alguien o amigos?- se volteó a verlo.

Su padre solo se sentó en el primer sillón que vio y Yeonjun aún seguía con la maceta en sus manos.

-Primero, el azul contrasta bien con el blanco; segundo, en la maceta dice lluvia no orquídea; tercero, aun no voy a comprar los bulbos; cuarto, llegue hace menos de una semana y quinto, las clases comienzan en un mes y no estoy interesado en personas ahora. Mamá sigo pensando que me mude muy rápido, la universidad aún es dentro de dos años.- Se movió abriendo la puerta del jardín dejando la maceta a un costado en el suelo mientras observaba el jardín de su vecina, era hermoso con muchas flores.- No puedes esperar que todo sea tan rapido, literalmente me echaste de tu casa con cariño y dinero pero me echaste.- dijo ahora volviendo a entrar caminando con intención de sentarse al costado de su padre.

-Es por tu bien cariño, conocerás amigos y algunos te acompañarán a la universidad, esta ciudad es grande y hay muchas cosas que ver en lo que conviene al arte.- su madre se sentó en el sillón haciendo que Yeonjun quede en el centro- también espero que aprendas a vivir solo desde joven, te tenemos muy mimado- beso su mejilla y lo abrazo.

-Papá dile algo por favor- mirando con ojos de perrito a su padre.

-El azul se ve bien.

•

Sus padres se habían ido al fin, camino hacia el sofá y se tumbó ahí, tenía apenas 17 y ya se estaba mudando solo, un sueño para muchos y una triste realidad para el. Le gustaba su hogar y su familia, pero de cierta forma sabía que era necesario. Nunca había tenido cambios en su vida, siempre estudió en el mismo lugar, vivió en el mismo lugar y tuvo los mismos amigos. Era la primera vez que cambiaba drásticamente algo, hogar, escuela y amigos;hasta tuvo el mismo corte toda su vida. Esperaba conocer gente y entender la escuela fácilmente, no sabía que tanto cambiarían las cosas.

Se recostó cayendo dormido rápidamente.

Esperaba que todo le vaya bien en la nueva ciudad.

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La escuela a la que asistiría era una de alto prestigio aún así que tenía miedo que lo excluyan por ser nuevo y no tener grupo.

El pelinegro se encontraba buscando su salón, la escuela era gigante y sentía que seguía dando vueltas por los mismos lugares. A lo lejos divisó "Salón de maestros" quería saber donde serían sus salones y pensó que algún profesor podría explicarle.