3 días de agonía

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Sol estaba bastante devastada como para hablar, comer y para lo que más le gustaba; leer y escribir en su diario. Es por ello que Saturno era la única que la "calmaba" por así decirlo, ya que la peli-rubia le había perdonado a la chica de los anillos. 

¿Sol? - pregunto Saturno -¿sigues ahí? Ya han pasado 1 día después de lo mío...  ¿Estas bien? - Sol apenas le contesto con un sollozo. - Sabes que soy la única que logra hacerte feliz, ¿no? Así que te traje esto para que estés tranquila y que te acuerdes de mi a pesar de todas las circunstancias ¿ok? 

Sol al escuchar esto le abre la puerta por la curiosidad y se sorprende ya que Saturno le había regalado una pulsera de la amistad. Esta linda manualidad estaba hecha con unos hilos amarillos y rosados con un poco de rojo y verde. Además tenía un dije con forma de estrella que se juntaba con la pulsera de su amiga, la cual tenia tonos verdes y mostazas, con un dije de hula-hulas.

¡Oh!- dijo Sol con una voz casi susurrando ya que aún le dolía la garganta después de llorar toda la noche- te quedo precioso Sat, muchas gracias. ¿Para que es ese dije?

Mira esto- le enseño la chica que había realizado esta manualidad:

¡Asu! -dijo la peli-rubia con su similar tono de voz sobrio - ¡Qué bello! me encanta

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¡Asu! -dijo la peli-rubia con su similar tono de voz sobrio - ¡Qué bello! me encanta.




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Día 2 OnO

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