--Lo he dejado todo.... No tengo nada más, y debes creerme. Estoy aquí porque no he parado de buscarlos, y no te permitiré que me apartes de nuevo, no te irás esta vez, Taylor, no sin mí.
Taylor
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Cuando Zayn me encontró en Santiago, Chile, yo no estaba segura de quien era el padre. Una semana después de su llegada, nos entregaron un análisis, Zayn era el padre.
¿Para mi? Fue la mejor noticia que pude recibir, sentía como lanzaba cientos de kilos de mi espalda al suelo, como ese nudo en mi garganta desapareció, porque sinceramente, no creo que hubiese podido amar algo que proviniera de un monstruo como Joe....
Al saber que él era su padre, surgió lo que fue la decisión más difícil que he tomado.
7 meses antes
Santiago, Chile📍
Zayn me seguía por toda la casa, esto era una pelea.
-¡TE DIJE QUE NO QUIERO!- mientras yo huia a la sala.
-¿NO TE IMPORTA LA ESTABILIDAD ECONÓMICA DE NUESTRO HIJO?-grita furioso.
-ME IMPORTA MÁS QUE NO QUIERAN MATARLO, POR DIOS.- Y decirlo en voz alta es algo tan duro, siento que me quiebro,me siento sobre el sofá cubriendo mi rostro.
-Cielo.... No digas eso- se acerca y me atrae hasta el abrazándome mientras acaricia mi espalda- Yo estoy aquí, y no dejaré que nada malo les suceda, ni a ti, ni a él.
- Nose trata de eso, Zayn. Se trata de alejarlo de todo lo que hemos estado metidos nosotros. Cuando huí traje conmigo el suficiente dinero para vivir de una forma "honesta" en varios años, ¿por que no quieres soltar esa vida tú?
-Sabes que no es tan fácil, Taylor.
Me levanto y camino hasta la puerta abriéndola
-Escuchame bien, Zayn.-el camina hacia mi- ¡el dia en el que nuestro hijo sea más valioso que tu asqueroso dinero, vuelves!- tomo su brazo echándolo.
-No hagas esto, Taylor.- suplica con sus ojos llenos de lágrimas.
-Es que no lo quiero- ahora también estoy llorando- yo también te amo, zayn... Pero no quiero que nuestra mierda esté en su vida.
Y mientras cierro despacio la puerta, el me mira con desprecio, y lo entiendo....
Ahora.
Y escapé, huí de el, una vez más...
-¿no hay nada?- pregunta evitando sonreir
-hay dinero, mucho lavado de dinero de por medio, pero tenemos dinero que no debemos esconder- sonríe tratando de acercarse de nuevo- ahora lo que más me importa, es averiguar donde estoy parado contigo.
Zayn se acerca tomando mi cintura, yo no puedo evitar sonreír y deslizo mis manos a cu cuello.
-Te he guardado un lugar junto a mi.
Zayn
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Deseo tanto besarla, mi boca se derrite por hacerlo. Ella se acerca dando un beso en mi mejilla y sin soltarme se aleja.
-Deberías proponerme algo formal entonces.- menciona Taylor con cierta inocencia.
- Debería, sí- me acerco besandola.
La he extrañado tamto que mis besos lo demuestran, siento como si en cada movimiento mutuamente nos quisieramos arrancar los labio, tan intenso, pero no quita su maldita delicadeza que me hace sentirme vicioso a ella. Sus dedos juegan con la piel de mi cuello deslizandose una vez tras otra, presiono su cintura con mis manos. Mientras el tiempo corre, la intensidad aumenta, ella se separa y nuestras frentes se juntas, mira hacia abajo y escucho una risa tan dulce de su parte.
-Eso... ¿lo causo yo?- pregunta a la notable ereccion dentro de mis pantalones.
-No tienes idea de todo lo que causas.- ella sonríe y comienza a levantarse hasta sentarse sobre mis piernas. Acaricia mi rostro aun besandonos, sostengo su cintura y escucho nuevamente esa risa peculiar, su mano baja de mi pecho hasta mi erección y comienza a estrujar mi pene a su antojo.
-¿Puedes mostrarme que tanto me extrañaste?- susurra a mi oido con su voz ronca. Es loco que solo hemos estado juntos una vez, que de esa vez ahora tengamos un bebé de dos meses, y que se lo buena que es haciéndolo, que de solo imaginarlo quiera estar dentro de ella.
Hago que se siente montándome y me levanto sosteniéndola, ella besa suavemente mi cuello mientras camino hacia el pasillo, estoy por entrar a una habitación pero ella me detiene.
-Aqui no, aquí no, aquí está Isaac- comienza a reirse y señala la siguiente habitación. Abro la puerta y solo diviso la cama, me dirijo hasta ella, la coloco sobre la cama recostándome sobre ella mientras comienzo a besar su cuello.
Taylor comienza a respirar ruidosamente y entrelaza sus manos a mi cabello, bajo hasta la parte descubierta donde solo me deja ver el volumen de sus pechos, comienzo a desabotonar el vestido con su misma ayuda, no lleva nada más que una bragas por debajo, su cuerpo es tres veces más sexi de lo que podía imaginar, podría jurar que no hay bebé, digo, su cuerpo siempre ha sido espectacular, pero ahora no tengo palabras. miro sus pezones y están duros, me acerco a su seno derecho y paso mi lengua suavemente para despues succionarlo. Su cuerpo se contra y comienzo a jugar con sus pezones, pero quiero más, quiero hacerle saber cuanto la estoy desean, cuanto quiero que sea mía, y esta vez solo mía. Mi mano entra en su braga y ella aprieta las piernas por un segundo, para después abrir sus piernas, está realmente mojada, demasiado y eso logra ponerme aún más duro, comienzo a acariciarla sin dejar lugar sin tocar, muevo mis dedos con suavidad sobre su clitoris y ella jadea tratando de hacerme subir, pero no quiero, no ahora.
Mis dedos resbalan y me encanta esa sensación, todo su cuerpo se mueve por mi, decido que es momento de hacerla sentirlo un poco más, mientras froto mi entrepierna contra su pierna, dos dedos míos se deslizan dentro de ella logrando escuchar su primer gemido.
-Baja mi pantalón- susurro a su oido y ella de inmediato lo hace, mientras comienzo a mover mi dedos despacio. me levanto de la cama sin dejar de movermis dedos para colocarme de rodillas frente a ella, con mis dos manos, bajo sus bragas y comienzo a besar desde el interior de sus muslos hasta su cadera. Doy un tirón a su cuerpo escuchando un jadeo de sorpresa, ella mira todos mis movimientos y beso desde su monte de venus hasta bajar a su vagina. Sus gemidos se hacen cada vez más fuertes, pero recuerda que te emos a nuestro bebé aquí así que cubre su boca.
Quiero tanto estar dentro de ella, embestirla an duro hasta lograr hacerla terminar, mi meta de hoy.
Me levanto y bajo la última tela que me cubre, al mirarla, veo debajo de su seno izquierdo una marca, una cicatriz. Regreso solo para besar su cicatriz y me detengo para mirarla a los ojos.
-solo quiero sanarte, Tay, porque te amo.
Doy yn beso a sus labios, por accidente a o tal vez no- mi oene roza con su pierna g ella gume, me levanto y comienzo a jugar haciendola desesperar, pero se que le gusta la sensación al frotarme contra ell, por la forma en la que jadea, lo disfruta. Decido empujarlo dentro de ella y ella mueve todo su cuerpo, cuando logro entrar despacio, me inclino a besarla mientras mis embestidas se vuelven constantes....
