Capítulo 11 "El Banquete de la Reina"

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Descargo responsabilidad lamentablemente no tengo los derechos de autor material esos pertenecen a Richelle Mead.

Está trama está escrita por Gigi 256

Capítulo 11 "El Banquete de la Reina"

Estaba de pie cerca del fondo de la habitación vigilando. Muchos de los guardianes de la escuela se encontraron trabajando esta noche, y una buena parte de ellos se encontraron en esta habitación. La llegada de la Reina Moroi siempre requería un poco más de precaución. Las gurdas que rodeaban la escuela habían sido reforzadas esta mañana y había el doble de guardianes patrullando el perímetro de la academia. Ya que todos los alumnos estarían presentes en el banquete, había muy pocos guardianes vigilando los otros edificios aparte de este. La Guardia Real de la reina se encargaría de escoltar a la Reina Tatiana, pero la escuela también tuvo refuerzos si era necesario. Había sido asignado como "de guardia" para ese trabajo, pero como aún no había recibido órdenes relacionadas con ello,

En realidad estaba bastante impresionado por lo bien que les había quedado está transformando. Usualmente la cafetería tenía un aire bastante industrial. Luces fluorescentes, largas mesas de plástico, paredes blancas con piezas ocasionales de arte sin estilo. Al menos el salón de guardianes, donde la mayoría de los guardianes tomaban sus comidas, tenía algo de personalidad.

Para un evento como este sin embargo, la cafetería difícilmente parecía la misma habitación. Las mesas habían sido cubiertas con manteles de lino rojo, con jarrones de rosas y lirios alternando con brillantes candelabros en el centro. Las bandejas de comida habían sido reemplazadas por finas vajillas de porcelana blanca con tarjetas para cada uno de los asientos asignados. Una larga alfombra roja dividía el pasillo central y terminaba al pie de una pequeña plataforma cerca del frente de la habitación. Una mesa principal estaba colocada de forma perpendicular a las filas de mesas de estudiantes y esta estaba designada para la Reina, el personal principal de la escuela y algunos invitados reales. La iluminación general era lo suficientemente baja como para que las paredes desnudas se desvanecieran en el fondo, y nosotros los guardianes,

Un banquete organizado por la reina requería formalidad. Los estudiantes y el personal de la escuela se vestían mucho mejor de lo que lo harían normalmente para un día escolar ya los guardianes se nos pedía vestir nuestros trajes formales en blanco y negro. Aunque la reina le requería a su guardia real vestir profesionalmente, la mayoría de los guardianes preferiríamos algo más casual a menos que estuviéramos asistiendo a un evento especial. Había utilizado mi traje formal probablemente una docena de veces en la academia, principalmente en la mayoría de los bailes y graduaciones de cada año. Con Iván había sido una necesidad, debido mayormente a su vida social, pero había algo de camaradería en el hecho de que él odiara vestirse formalmente casi tanto como yo. Por lo general siempre llevaba mis trajes formales cuando tenía que ir a la corte,

Los estudiantes consiguieron llenar la sala junto con algunos profesores y otros miembros del personal. Via a la directora Kirova ocupar su lugar en la mesa principal y rápidamente localicé a Vasilisa encontrando su asiento cerca del frente de la sección de estudiantes, del lado derecho de la alfombra carmín. Esto no era inusual, ver como la mitad delantera de las mesas estaban reservadas para los estudiantes Moroi mientras que los estudiantes novicios tenían que tomar asiento al fondo de la habitación. La división de raza y de clase era algo muy marcado en nuestro mundo, y la juventud no se salvaba de esta división más que el resto de nosotros. Incluso entre los estudiantes Moroi había signos de esto, aquellos que nacían pertenecían a la realeza y en una buena posición económica siempre se sentaban más cerca de la parte delantera y central de la habitación. Todo era un juego político, y para su posición expuesta, Lissa lo estaba haciendo muy bien.

Academia de Vampiros desde el punto de vista de Dimitri Belikov Donde viven las historias. Descúbrelo ahora