Tu de nuevo, como todos los días

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Miércoles 18 de enero del 2023

Brillo, brillo que deslumbran. Alma mía que arrinconada se encuentra. Tanto que cuesta el precio a pagar por no revelarme ante esqueletos de diferentes procesos cognitivos.

Tragar, tragar en seco y sin anestesia para la ansiedad, las espinas que me he de clavar yo misma a cada milisegundo.

Mirada, mirada que siempre he de centralizar hacia otro punto de toda pupila dirigida hacia las mías.

Temor, temor es el constante vivir de mi sistema nervioso al acumular intrusos rumiantes, o verdaderos agentes cognitivos.

Todo, todo quisiera tener para no perderte, pero ni siquiera te tengo, ni siquiera te tendré. Aún y lo intente, en el aire siempre estará suspendida una disonancia tormentosa para mi batalla entre el exigente ello y el temeroso Superyó, al contraatacar mis pensamientos.

Pensamientos, pensamientos que no debería revisar y ni volver a analizar, sobre ti.

Mutilar, mutilar mi corazón para no sentir amor romántico en lo más recóndito de este, nunca mas.

Sufrir, sufrir yo sola, por permitir esos pensamientos, por sentirlos y quererlos ejecutar. Nada como lo trágico para alguien que se siente cómodo en ello. Como yo, acostumbrada a atesorar y sufrir yo sola. Fácil, y a la vez abstracto.

Besar, abrazar, acariciar, expresar mi sentir hacia ti. Nunca. Te amo y me amas, pero yo más. Ahí radica la raíz del problema, porque el acceso está bloqueado.

Amar, ... como te amo ... un concepto ajeno a un nosotras.

Mirarte a los ojos y admirar su brillo por un tiempo más que milisegundos,  tentador, pero me mutilarías el alma y descubrirías mi pecador, antinatural y decepcionante sentir por ti.

Somos, somos en lo que no pasará, ... señales mal ubicadas, anti natural.

Me mutilo yo mis propios deseos, ya que de dejarlos solos, no respetaría la preferencia por esqueletos pensantes diferentes a mi que tienes en mente, y de golpe te confesaría todo.

Entonces. Aquí estoy. A tiempo todos los días para mi sesión de auto convencerme de no quererte lo suficiente, para no decepcionarte, para no alterar más mi alma. Te amo, pero amo que seas feliz sin pensar en la carga que sería el saber lo que por ti siento, siento y siento.

Si tan solo pudiera, ... si tan solo pudiera cambiar mi proceso cognitivo y mi ello, para no lidiar con esto hacia alguien que no quisiera arruinar. Si tan solo pudiera ...

Quiero descansar de mi misma. Te quiero, pero más quiero no quererte como lo hago, porque sé la correspondencia a cualquier carta que intente hacer.

Amor romántico, con una dinamita de pensamientos estructurados quisiera explotarlo en mi sistema, para no pensar en ti y dañar lo que tenemos.

Pero atada a esta dualidad estoy entre mi yo ideal y mi yo primitivo. El quererte y el no deber quererte.

Dios! Cuanto quisiera y cuánto a la vez no, y solo dejar de sentir.

Psicodinámica y Psico - que más daDonde viven las historias. Descúbrelo ahora