I

89 19 6
                                    

Las lágrimas recorrían su juvenil rostro, el pecho le dolía y por más que sus amigos estaban ahí la sensación de soledad no se marchaba.

Lo necesitaba a él, a su novio.

—Saldrás adelante Kyungsoo. — Sintió el peso de la mano de su mejor amigo Baekhyun en el hombro, pero las gotas salinas aún escurrían de sus irritados ojos.

Sus piernas perdieron la fuerza, cayendo de rodillas frente al ataúd del único hombre que ha amado. Park Chanyeol.

Desde su perspectiva la vida era injusta, tantas personas malas en el mundo... Y entre todos los seres del planeta tuvo que morir su adorable Chanyeol.

—¿Por qué? — Preguntó al aire, emitiendo pequeños hipidos de dolor.

Dolía, era desastroso y aunque la tierra cubría el cuerpo inerte de su amado él lo seguía sintiendo ahí, a su lado.

Pero necesitaba más, quería verlo... Sentirlo, olerlo, besarlo.

Su relación había sido hermosa, cada pequeño momento era como un tesoro precioso en sus recuerdos, pero habían hecho tantas promesas. Estudiar en la universidad juntos, vivir en la misma casa, adoptar un perro, envejecer juntos.

—... ¿Por qué me dejaste Yeol?

Estiró su mano hacia el enorme y oscuro agujero en el que estaría su preciado amante, pero Chanyeol no la tomó.

Podía escuchar los murmuros de las personas a su alrededor, el llanto de la madre de Chanyeol junto con pequeños lamentos de su hermano Sehun.

Todo era como una mala, muy mala pesadilla. Pero no, para su mala suerte era real.

En algún punto su felicidad se esfumó, su mente se nubló y la voz gruesa del médico le retumbaba todo su ser.

"Lo lamentó"

Había sido lo que dijo aquel hombre, como si una simple disculpa le podría traer a la vida a su novio. Su todo.

—Kyungsoo... — Jongin aún con los ojos hinchados intento levantar el cansado cuerpo del bajito, pero este se negó. —Por favor... A Chanyeol no le gustaría verte así...

Golpe bajo para el lastimado espíritu de Kyungsoo, ni siquiera poseía fuerzas para lanzar un comentario sarcástico.

Terminó negando con la cabeza, sus manos cubriendo sus ojos y derramando por medio de ellos el gran dolor que apretaba su alma.

Quebrado, roto, moribundo...

«Chanyeol... Mi amado Chanyeol, te extraño. Te necesito. No puedo seguir sin ti.»

Cuando Kyungsoo alejo sus manos de su rostro se percató que estaba casi solo, pues la luz de la luna le hacía compañía. La tierra sobre la tumba de su novio seguía fresca.

Fresca como la herida en el interior de su pecho que amenazaba con partirlo en dos, y tal vez eso sería lo mejor. Morir, acompañar al alto.

Kyungsoo suspiro, limpio con sus mangas las lágrimas secas y haciendo un gran esfuerzo por fin se puso de pie.

La luz de los faroles iluminaba su caminar, algunos sonidos de perros aullando se apreciaban a la distancia.

—Yeol, no soy tan fuerte como creías. — Hablo en voz rota, casi un susurro.

Mi Kyungsoo, estaremos juntos hasta tener la piel arrugada como pasas.

—Eras mi única razón para sonreír, no puedo... Yeol, aún tengo en mi nariz el olor de tu sangre y mis manos están empapadas de ese molesto líquido rojo.

Si mueres primero por favor ven por mí, si yo lo hago... Prometo tomar tu mano siempre.

—Sabes... Al principio te vi como un chico realmente torpe y sin gracia, pero a los pocos minutos te convertiste en mi sol. Realmente soy feliz de haber aceptado esa cita a ciegas.

Kyungsoo, nada en este mundo hará que te deje. ¡TE AMO!

—Chanyeol... Daría todo lo que tengo, todo lo que soy para poder volver a verte, aunque sea una vez más.

Sus pasos eran lentos, los zapatos chocaban con la tierra y aunque lágrimas no salieran de sus ojos debido a la deshidratación sí que le dolía la garganta.

Su mirada se fijó en un gran lago, aquel mismo en donde se dio tantos besos con el mayor.

—No puedo Chanyeol... No puedo.

No pensó en su familia, ni el dolor que ocasionaría en sus amigos, sólo pensaba en lo mucho que extrañaba a su novio.

Se quitó los zapatos, también su saco negro y las dejó a un lado de la carretera, a pasos seguros se acercó a la orilla del lago.

Kyungsoo, te amo.

—Yo te amo mucho más Chanyeol.

El agua fría le hizo temblar de inmediato, pero no le importaba. Vería pronto a su amado de cabello alborotado, de grandes proporciones, aquel que iluminaba una habitación con su sonrisa.

Cerro sus ojos, a medida que perdía el conocimiento.

Kyungsoo...

Promesa || ChanSoo [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora