Capitulo IV

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Al despertar lo primero que vio Johan fue a Alec durmiendo a su lado, fue bastante extraño para él, era la primera vez que invitaba a alguien a quedarse en su casa y además dormir juntos sin hacer nada, fue una sensación agradable.

...

Cuando Alec despertó Johan ya no estaba a su lado, había olor a pan tostado y café. Después de tomar el desayuno Alec tomó una ducha y se vistió.

- Ya te vas?- preguntó Johan.

- Si, tengo cosas que hacer en casa.

- Que lástima, pensé que te quedarías un rato más.- él mismo se sorprendió al decir eso, cómo podía sentir lástima si ya se había quedado toda la noche.

- Puedes textearme cuando tengas tiempo.- Alec se puso sus zapatos y se dispuso a irse, Johan puso su mano en la muralla para impedirle el paso y lo besó.

- No olvides lo que aprendiste.- dijo.

Alec salió del apartamento y caminó a la estación. Por alguna razón se sentía con confianza, creía que ya estaba casi listo para poder salir en busca de su futuro novio, la práctica con Johan había dado frutos, los besos ahora los sentía como algo natural, se decidió a dar el siguiente paso en su aprendizaje, se lo diría a Johan la próxima vez que lo viera.

...

Pasaron tres días sin verse, Johan texteaba a Alec todas las noches sin falta, por alguna razón le molestaba que Alec no tuviera tiempo para reunirse, hasta que por fin decidieron juntarse en su próximo día libre.

Ese día Johan se arregló más de lo normal, utilizó su mejor ropa y no olvidó su perfume. Quedaron de juntarse en un bar del centro a las ocho de la tarde, Él llegó media hora antes sin darse cuenta, mientras lo esperaba se sentía ansioso de volver a verlo, era una emoción que desconocía; a las ocho y cinco divisó a Alec en la puerta y le hizo unas señas, Alec caminó hacia él y se sentó en frente.

- Perdona la tardanza.-

- No hay problema, solo fueron unos minutos.- contestó sonriendo.

Ordenaron dos cervezas y un picoteo para acompañarlas, hablaron de lo que habían hecho, Alec le comentó que estuvo trabajando turnos extra debido a que un ayudante de cocina se ausentó, también dijo que había salido a beber con sus amigos y por eso no pudo encontrase con él.

Cuando terminaron de beber decidieron ir a casa de Johan, tomaron un taxi y rápidamente llegaron al apartamento, apenas entraron Johan tomó a Alec cómo si llevara un saco de harina y lo llevó al dormitorio, lo arrojó sobre la cama y lo besó.

- Qué haces?- preguntó Alec entre risas y besos.

- Pasó mucho tiempo, me aseguro que no hayas olvidado lo aprendido.- Alec le rodeo el cuello con los brazos y siguieron besándose, Johan lo sostenía con fuerza como si no quisiera dejarlo ir.

- Espera...

- Que ocurre.

- Hoy.... Creo que ya estoy listo para aprender sobre otras cosas.- dijo Alec mientras lo miraba a los ojos.

Johan se sorprendió pero estaba increíblemente feliz, comenzó a besarlo por el cuello mientras le quitaba la chaqueta, metió su mano dentro de la polera y comenzó a tocar sus pezones, Alec comenzó a dejar salir lindos gemidos lo que encendió más a Johan.

- Hoy no llegaremos hasta el final, debemos prepararte antes de hacerlo completamente.- dijo Johan, aunque había perdido casi toda su cordura no quería lastimar a Alec.

Le sacó la polera y empezó a lamer directamente sus pezones mientras le desabrochaba el pantalón, comenzó a tocarlo sobre el boxer suavemente mientras Alec se encontraba perdido en el placer.

Alec no sabía que hacer, se sentía tan bien que su mente estaba en blanco, cuando Johan tocó directamente su miembro dejo escapar una voz que él no conocía, se avergonzó pero no quería parar.

- Tú también.... Yo quiero que también te sientas bien.- dijo Alec colocando su mano entre las piernas de Johan.

-Hmm..- gimió Johan, él estaba intentando contenerse, no sabía si Alec lo hacía a propósito o no.- entonces ayúdame.

Con sus miembros rozándose comenzaron a masturbarse juntos, ninguno de los dos quería detener sus manos, cuando estaban por llegar al climax Johan lo besó apasionadamente.

Al terminar ambos quedaron agotados, Johan besó la frente de Alec y fue a buscar papel para limpiarse. Mientras limpiaba a Alec, este se encontraba atontado, era la primera vez que hacía esto con otra persona, se sentía mucho mejor que hacerlo solo.

- Estuvo increíble.... La próxima vez lleguemos hasta el final.- dijo Alec sonriendo, la alergia que sintió Johan en ese momento no duró demasiado.- me gustaría tener sexo por primera vez contigo, se que no me dañarás, así tendré menos miedo cuando conozca a otra persona.

Al oír esto Johan se quedó callado, no sabía porqué pero su estómago comenzó a estrujarse, sentía un nudo en la garganta, imaginar a Alec con alguien más lo ponía enfermo.

- Ocurre algo?- preguntó Alec.

- No, nada, me aseguraré de tener lo que necesitamos la próxima vez.- aclaró su mente, él había accedido a ayudarlo porque lo encontró lindo, su relación era solo eso, solo se sentía mal porque en algún momento se quedaría sin su juguete.

Luego de eso ambos comieron y se fueron a dormir, esa noche Johan tuvo problemas para conciliar el sueño, solo después de abrazar a Alec pudo dormir.

Lluvia de besosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora