Better Late Than Never - ZhuiYi

Capítulo 1: Matrimonio.

Las noticias llegaron la mañana del día antes de su tercer aniversario.

Lan XiChen había salido de su reclusión e iba a reasumir inmediatamente sus deberes como Líder de Secta.

JingYi, quien estaba en el comedor en medio de su tarea de convencer a su hijo de comer sus vegetales, vio los ojos de su esposo brillar con alegría por las noticias. Y no sintió nada más que fría resignación.

Esto iba a pasar tarde o temprano de todas maneras. No podía mantener atado a SiZhui a él para siempre. No lo haría. Si toda su niñez juntos, un hijo y tres años de casados no fue suficiente para ganarse el amor de SiZhui, entonces nada lo haría. No servía de nada pasar más noches durmiendo en la misma cama con su hijo entre ellos como si fuera una pared impenetrable, estando tan cerca pero al mismo tiempo tan lejos.

SiZhui era su esposo únicamente por título.

Ellos solían ser más cercanos en el pasado, incluso cuando Jin Ling era una constante presencia junto a SiZhui. Cuando se consideraba que Jin Ling y SiZhui se estaban convirtiendo en compañeros de cultivo, JingYi aún continuaba bromeando con él, empujaba su hombro o lo arrastraba de la mano por la calle hasta un puesto de comida callejera para comprar alitas de pollo. En esos momentos, Jin Ling se quejaba de que JingYi se llevara a SiZhui, sin embargo un beso en la mejilla de éste último lo tranquilizaba.

Incluso en ese entonces, observando cómo ambos orbitaban entre ellos de una manera en la que él no estaba incluido, se sintió más cercano a SiZhui de lo que siente actualmente.

Ahora, todo lo que JingYi tiene son sonrisas educadas, regalos costosos sin usar guardados en el fondo de los cajones y la certeza de que SiZhui no veía a JingYi cuando lo miraba. Solo podía ver el error que había cometido hace tres años.

Esa noche, él y Jin Ling decidieron que sus respectivas posiciones como líder de secta y líder interino no les permitirían una relación exitosa. Pero aunque era una decisión tentativa hasta que Lan XiChen volviera a asumir sus tareas como líder de secta, SiZhui estuvo lo suficientemente devastado como para terminar tomando cuatro jarras de Sonrisa del Emperador por su cuenta. JingYi trató de compartir el dolor de su amigo y bebió un trago olvidando completamente que había una razón por la que a los descendientes directos del clan Lan se les prohíbe beber alcohol.

La mañana siguiente, JingYi despertó y se encontró a SiZhui mirándolo con los ojos muy abiertos y el rostro pálido, con la incómoda sensación de que durante la noche algo se había secado en el interior de sus muslos.

Dos meses después, SiZhui, como el estúpido, estúpido, estúpido y estúpidamente hombre justo que es, eligió tomar la responsabilidad por la vida que llevaba JingYi en su vientre. La boda fue corta y en un ambiente tenso. Que el Gran Tío Abuelo Lan QiRen luciera furioso ya era lo suficientemente malo, pero se hizo aún más insoportable por el hecho de que incluso el Maestro Wei no podía sonreír. Oh, lo intentó, realmente lo hizo, pero la decepción del Maestro Wei era tan palpable que todas sus expresiones de ese día parecían haber sido totalmente drenadas. JingYi ni siquiera podía culpar al Maestro Wei, porque él mismo sintió que pudo haber llorado durante toda la ceremonia.

Había soñado casarse con SiZhui, pero no así. Jamás de esa manera.

No significaba nada si SiZhui no quería casarse con él.

Primero reverenciaron al cielo y la tierra, demostrando respeto por los Dioses y sus ancestros.

Entonces, girando hacia sus mayores, llevaron a cabo su segunda reverencia.

El General Fantasma también estaba allí, pero no vestía harapos. Hanguang-Jun y el Maestro Wei estaban sentados con él, los tres totalmente inexpresivos. El lado donde debería estar la familia de JingYi estaba notablemente vacío, sus padres se habían vuelto cenizas durante la Campaña para derribar al Sol.