Capítulo 4

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— Qué mono — pensó Paula al leer el mensaje de Gavi.

Justo cuando bloqueó el móvil Gavi entró a la habitación con dos bolsas que desprendían un olor delicioso.

— Buenos días, guapísima — dijo Gavi sonriente mientras dejaba las bolsas en la mesa de la terraza — ¿Qué tal has dormido?

— Buenos días — respondió Paula incorporándose — Contigo se duerme genial.

Gavi se acercó a ella para darle un beso en la mejilla, pero Paula giró la cara, haciendo que sus labios se encontrasen.

— Vaya, eso sí que no me lo esperaba — dijo Gavi separándose, pero dejando su cara a poca distancia de la de Paula, mientras ponía una sonrisa pícara.

— Te lo debía por el beso que me robaste ayer en el partido — dijo Paula guiñándole un ojo.

Gavi dejó un beso rápido en los labios de Paula.

— Parece que ahora me debes otro — después se pasó la lengua por los labios.

— No me tientes, Pablito — Paula se mordió el labio y Gavi rió.

— Anda, vamos a desayunar que tengo mucha hambre y no me dejas comerte a ti.

Gavi se separó de Paula y se giró mientras caminaba hacia la terraza suspirando. Tenía unas ganas enormes de que la cosa con Paula avanzara, pero no quería que se sintiese presionada, así que prefería que fuese ella quien marcase los tiempos.

Se sentó en una de las sillas y abrió las bolsas, sacando una bandeja de donuts, otra de croissants y dos vasos de café.

Paula abrazó a Gavi aprovechando que estaba de espaldas.

— Muchísimas gracias por el desayuno — dejó un beso en la mejilla de Gavi.

— Los que hagan falta — Gavi sonrió por la cercanía de Paula, le encantaba tenerla así y lo feliz que le hacía.

Paula se sentó en la otra silla y apreció todo lo que había traído Gavi.

— ¿Cómo sabías que quería café con leche? — Paula le miró inocente.

— La vez que fuimos a la cafetería, antes de que Pedri nos llevase a la farmacia el día que te expulsaron, te pediste ese.

Paula sonrió ante el comentario de Gavi, estaba sorprendida y halagada de que aún se acordara de ese detalle. No quiso decir nada, pero era algo que recordaría.

...

Paula bajó a la recepción del hotel mientras que Gavi se quedaba en la habitación esperando, quería ampliar el tiempo de estancia en la habitación para toda la semana.

— Lo siento, señorita, tenemos todo ya ocupado y debe dejar la habitación en dos horas, ya que llegarán los nuevos huéspedes esta tarde y deben limpiarla.

— ¿En serio no queda ninguna en todo el hotel?

— No, lo lamento mucho.

— Está bien, gracias, en un rato bajo a devolver la llave — Paula volvió a subir a la habitación para recoger.

Cuando entró a la habitación, Gavi se quedó mirándola desde la cama.

— ¿Y esa cara? — preguntó Gavi cuando la vio entrar.

— Me han dicho que es imposible ampliar la estancia en esta habitación y que tampoco hay ninguna otra libre — Paula suspiró y cerró la puerta.

— Bueno, no te preocupes, voy a ver como convenzo a mis padres de que te quedes esta semana en casa, pueden ser un poco estrictos a veces — Gavi se levantó para ayudar a recoger, a pesar de que no tenía muchas cosas.

El Reencuentro || TEMPORADA 2 de LPLQQ || Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora