Una singular noche sin estrellas

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¿Qué es aquello que buscamos y deseamos experimentar en esta vida? Entiendo que todos tenemos una respuesta detallada y especifica sobre eso, pero todo termina en lo mismo que es el disfrutar la misma, y cómo se logra eso uno se pregunta; eso es lo que me llevo a ese día, mirando al cielo en aquella singular noche sin estrellas.

Familia, economía e incluso amor, de nada de ello me puedo quejar, lo tengo todo o por lo menos tengo todo lo que se supone que debería tener, uno entiende a lo que me refiero. Aun así se encuentra este sentimiento, un vacío del cual no me puedo deshacer.

Todo lleva a lo que uno desea de la vida misma, del disfrutar incluso de las pequeñas cosas que nos rodean, pero las ignora durante casi toda la vida únicamente por el hecho de que las cosas "importantes" toman un mayor lugar en la lista de prioridades, aún así no nos damos cuenta porque nos falta un click, algo que nos haga abrir los ojos ante este hecho. Y es de esta forma que llego a este lugar, este techo, esta noche.

Miraba al vacío mientras que la oscuridad de la noche me abrazaba, una sensación de temor me invadía y al mismo tiempo sentía la necesidad de saltar y poder volar a la gloria infinita, pensando tal vez, que de esa forma podría sentirme pleno; claro que estaba completamente equivocado, aún así mi descubrimiento no vino gracias a mi propio entendimiento ya que me encontraba demasiado ofuscado en mis pensamientos, vino por una llamada, por una luz que aclaro todo  en un instante, era mi madre... no le conteste, no necesitaba hacerlo, de repente todo vino a mi cabeza, el miedo incesante y profundo de perderlo todo, incluso de aquello que en teoría producía mi vacío, la causa de esto no era que me faltara algo, sino que debía cambiar mi punto de ver las cosas. Todo lo que tengo vale al igual que lo que he logrado, todo esfuerzo es valioso sin importar que uno crea que no es así; solo estaba siendo inmaduro, un niño teniendo una rabieta que le pudo haber costado la vida.

Di un paso hacia atrás avergonzado de mi accionar, me di la vuelta y comencé a avanzar, derecho a mi casa y esta vez sin ningún vacío ni mucho menos nada de lo que rechistar, mire al cielo por ultima vez y me di cuenta, de que la oscuridad de esa noche se despejaba para dar paso a la luminosidad de sus estrellas, tal vez era un mensaje o solo una coincidencia pero lo sentí muy personal ya que estas ahora me acompañaron hasta la seguridad de mi hogar.

Solo una anécdota de vida o tal vez un consejo para cualquiera, toda persona en cuya cabeza cruce el pensamiento de acabarlo todo, tal vez deba pensar en las cosas y personas valiosas que hay pensando en uno, deba pensar en lo que aprendí en aquella noche, una noche singular sin estrellas 


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