💌Capitulo 20💌

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- Buenas tardes - dije seria y molesta, ambos voltearon a verme.

- Corazón, al fin llegas - exclamó Louis tomándome de la mano y me dio un beso en los labios ante la mirada atónita de la tipa que tuvo que moverse hacia atrás

- mira, te presento a Valery, una vieja amiga, Valery, ella es _____ _____, mi novia.

- Mucho gusto - dijo con una sonrisa fingida mientras me recorría con una mirada fulminante y yo estaba quizá más sorprendida que ella por la presentación.

- Igualmente - respondí en toco seco.

- Un placer verte Lou - enfatizó mirándolo y sonriéndole coquetamente - cuando quieras llamame, sabes dónde encontrarme - agregó dándole un beso en la mejilla.

Yo me quedé trabada, era el colmo de la desfachatez, poco le importo que Louis le dijera que yo era su novia y le coqueteó en mis narices, sentí como me hervía la sangre y di un paso al frente, pero Louis me detuvo parándose frente a mí.

- _____, no querrás hacer un escándalo en un lugar público.

- Que tipa tan descarada y tú como si nada dejándote que te besara - exclamé furiosa, si no podía desquitar mi coraje con ella, lo haría con él.

- Un beso en la mejilla no es besar, _____- explicó sonriendo.

- Pero, los vi cuando llegué y su intensión no era precisamente dártelo en la mejilla.

Me encanta cuando te pones celosa - dijo abrazándome y poniendo su frente en la mía - ¿en verdad pensaste que yo iba a permitir que eso sucediera?

- Pues, le sonreías muy animadamente - respondi con menos coraje porque su aliento estaba colándose por mi nariz.

- No es mi estilo portarme grosero y menos con las mujeres, sin embargo, iba a rechazarla sutilmente, claro que lo mejor fue que tú llegaste - aclaró acariciándome la mejilla con el dorso de su mano.

- Pero, te coqueteo descaradamente - repliqué en un tono más tranquilo.

- Y podría haberse desnudado y mi respuesta iba a ser la misma - tomó mi mentón con su mano y me miró directo a los ojos - ____, hace mucho que dejé de estar con otras mujeres, grábate esto muy bien aquí - puso un dedo en mi sien - y aquí - lo puso en mi pecho a la altura del corazón - la única que me importa eres tú, a la única que quiero es a ti
- me dio un beso en los labios - con la única que me interesa compartir mi cama es contigo - susurró en mi oído y me abrazo fuertemente.

Volvió a desarmarme por completo, no pude expresar palabra alguna, estaba por demás emocionada y a la vez avergonzada por haber pensando durante un segundo que me engañaba y sólo buscaba burlarse de mí, no cabía duda que los celos nublaban la razón y jamás los había sentido con tanta fuerza, ni siquiera con Eleanor.

- Aunque, para serte sincero, me da gusto que esto haya pasado - exclamó y me solté para mirarlo - porque tus celos me demuestran cuanto me quieres.

- ¿Y todavía te atreves a dudarlo?

- No, pero me encanta confirmarlo - enfatizó y me dio otro beso.

- ¿De verdad no ibas a dejar que te besara?

- Por supuesto que no, te lo juro, _____, entiendo tu desconfianza, pero si de algo debes estar segura es que jamás te engañaría, no tengo ninguna necesidad de hacerlo, ya vamos a comer, anda.

Me recorrió la silla para que me sentara y después él se sentó frente a mí. Ambos pedimos ensalada y mientras nos las llevaban, Louis me acariciaba una mano, entonces me sentí más tranquila, pero aún así le conté lo que Scott me había dicho de él y volvió a reiterarme que no tenía porque preocuparme, que no me negaba que sí había sido así, pero que ya había cambiado.

¿Estás libre está noche?-Louis Partridge Donde viven las historias. Descúbrelo ahora