Cartas a mi crush | FreenBecky

Cuatro: Gatito

El fin de semana había llegado, esta vez pasaría dos días sin poder enviarle una carta a Rebecca. Billy se encontraba en mi habitación y dejo un par de revistas en mi cama.

—¿Qué es?—

—Leñadoras en bikini por si te sientes sola estos dos días— tomé las revistas y las aventé a hacia a fuera. —ME COSTARON DINERO —

—NUNCA TE PEDI QUE COMPRARAS ESAS REVISTAS — me cruce de brazos mirándolo, se encogió de hombros para sentarse.

—Bueno, ve por las pizza pronto empezará mi serie, te quiero aquí a las 5:00 p.m —

Le lancé un zapato antes de irme, Billy tenía un gusto extraño con las series. Hoy era un día lluvioso así que tomé un paraguas y salí de casa caminando hacia la pizzeria que quedaba un poco lejos pero valía la pena.

Mientras pasaba por un parque vacío vi a una chica sentada en una banca mojandose por la lluvia. Al mirar mejor me di cuenta que era Rebecca y me apresure a ir donde estaba, podría enfermarse si seguía así.

Puse mi paraguas encima de ella y al momento alzó su vista para mirarme, nunca antes había visto su rostro de cerca y era más hermoso verlo de esta manera.

—¿Por qué una chica tan linda como tú se encuentra bajo la lluvia? No le han dicho que hay posibilidades que le caiga un rayo — ella soltó una risa para luego regalarme una sonrisa.

Mi corazón dio un brinco al ver su acción e inconscientemente también sonreí.

—¿Nos conocemos? Siento haberte visto antes...— pregunto aun sin dejar de verme

—Tal vez tú no me conozcas pero te he visto un par de veces en la universidad, eres Rebecca Armstrong la chica más popular hasta el momento — ella se sorprendió al escucharme — no se cual sea la razón del porque estas aquí pero te pido que vayas a casa y te calientes un poco, puedes enfermarte. —

Aunque trataba de no demostrar ningún sentimiento hacia ella era inevitable preocuparme, más si se encontraba de esa manera.

—Perdí al gato de mi mejor amiga y cuando lo encontré entro al patio de una señora que tiene muchos perros y subió al árbol más cercano, la señora se negó a dejarme a entrar, por eso me quedé aquí mientras pensaba en que hacer —

—Muéstrame la casa en la que esta....—

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Cuando uno se enamora puede hacer muchas cosas por su persona especial, así como yo estoy arriesgando mi vida por salvar al gato de la mejor amiga de mi crush. El amor es tan fuerte aveces.

—Ten cuidado — aww, me sentí afortunada cuando se preocupó por mi, cruce la cerca de la señora de los perros, había dejado a Rebecca con mi paraguas, mientras que trataba de no hacer un ruido fuerte para no llamar la atención.

El sonido de la lluvia me ayudaba, camine despacio por el patio hacia el árbol donde estaba el gato y como pude lo escale. Vi al felino asustado sin querer que me acercara pero igual lo tomé hasta que me rasguñara y baje del árbol caminando otra vez hacia la cerca.

Un ladrido detrás mío hizo que me detuviera, Rebecca me hizo varias señas que efectivamente, había un perro detrás de mi.

—Corre, corre — me gritó y corrí hacia la cerca, le extendí el gato para poder escalar y al tratar de subir el perro ya había agarrado mi zapato.

Para mi mala suerte habían llegado sus compañeros así que tuve que sacrificarlo, así pude subir rápidamente.

Pero no me percate que había un hueco debajo de la cerca donde los perros trataban de salir.

— Vete ya, yo me quedaré aquí — le dije que no abría problema si se llevaba mi paraguas. Se apresuro a correr pero se dio la vuelta.

—Muchas gracias eh.....—

—Freen Sarocha — ella sonrió

—¡Te veré el lunes para agradecerte mejor! — asenti y se dio vuelta para correr y cuando ya no la vi más fue mi turno de correr hacia mi casa.

Los perros habían salido en manada y estaba siendo perseguida por ellos, pero no quitaba el hecho de que me sintiera feliz, mi primera vez hablándole a mi crush, ya estaba deseando que fuera lunes.

🐧