Plantado // [Katsudeku]

3. Los sentimientos de Katsuki

🌚 Con todo esto de las nuevas normativas de Wattpad... Tuve que corregir el comienzo.

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Despertó de golpe a causa de su estridente alarma. Su respiración se encontraba agitada y se sintió incómodo de inmediato.

Quedó unos segundos procesando todo, pero ya harto se incorporó en la cama y apagó el molesto despertador. Segundos después pudo darse cuenta de lo que había pasado.

—...

Abrió completamente los ojos y quitó la sábana de un tirón para darse cuenta que, efectivamente, eso no era cualquier líquido.

Recuerdos fugaces de lo que había soñado llegaron a su cabeza y entró en pánico.

¡¿Qué demonios acababa de soñar?! Y aún más terrible ¡Su cuerpo había reaccionado con eso! ¿Cómo demonios vería a Deku a la cara después de eso? 

Oh no.

Volteó a ver el reloj digital en la mesita de noche. Esa alarma había sonado por una razón y esa era que, tenía que ir a la escuela. ¡Mierda! 

Estaba temblando. Que miedo, que miedo le daba todo esto.

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La pasó pensando tanto en ese sueño que no fue consciente de lo que hacía, quién sabe para qué, solo no podía quitárselo de la cabeza. No tiene idea de cómo hizo para bañarse, vestirse y desayunar, seguro que casi se olvida la mochila si no fuera por su madre. Solo reaccionó cuando ya se encontraba afuera del edificio donde su amigo vivía y le escuchó llamarle.

—Kacchan, buenos días —Saludó con su sonrisa de todas las mañanas al cenizo.

Lo miró para devolverle el saludo, pero no pudo, los recuerdos de su sueño le vinieron a la mente y eso provocó que su rostro se tiñera de rojo.

Eso preocupó al menor, quien al verlo cambiar tan drásticamente de color exclamó preocupado:

—¿Estás bien Kacchan?  —Levantó la mano para acercarla a su frente, pero rechazó el contacto volteando el rostro bruscamente.

—¡E-estoy bien! —Habló tan apresurado que se trabó al comienzo y se atoró con su saliva.

Deku se preocupó aún más al oírlo toser.

—¿Estás enfermo? ¿La tía Mitsuki te dejó venir así? Deberías haberte quedado en casa si estabas mal

—Me encuentro perfectamente, Deku —Replicó empezando a andar sin dirigirle la mirada. Izuku lo siguió tratando de verle la cara, pero él aceleraba cada que se encontraba a su costado y volteaba el rostro.— ¡Por un demonio, que estoy bien! ¡Ya deja de seguirme!

—Kacchan, vamos a la misma escuela —Deku lo retuvo del brazo esperando a que lo voltee a ver.—¿Qué te pasa? —Agregó con un tono de voz preocupado.

Quedó estático, pero por fin, después de dar una bocanada de aire, volteó a verlo. La intensidad del color en su cara había bajado.

Conectó su mirada con la verdosa y no la movió de ahí, pensando en qué decirle. Sin embargo, por un momento la imagen que tenía en frente cambió por la de su sueño: labios rojos y apeteciblemente hinchados, mirada verdosa y llorosa y un sonrojo resaltando sus mejillas.