En un parque un chico de pelo castaño estaba hablando con un chico de pelo negro y ojos afilados, el cuál tenía una bolsa llena de cosas, ambos sentados en una banca.
Ambos estaban tranquilos, pero el de pelo castaño estaba apunto de llorar.
Su vida no fue la mejor, tal vez no se compare a otras y no sea tan exagerada, pero no fue la mejor.
Vamos Kazuma, no puedes seguir pensando en eso, ya pasó una semana - dijo el de pelo negro al castaño con una pequeña sonrisa, en un intento de consolarlo.
Subaru, Hana de todas las personas fue quien lo hizo, mi amiga de la infancia, la que creía conocer como si fuera mi propia familia lo a hecho - decía Kazuma a Subaru, soltaba unas lágrimas, le dolía como a todos los que les ha pasado.
¡Pues que se joda Hana!, No puedes estar triste toda la vida por ella, anímate, ¿Y si mejor vamos a jugar ese juego?- dijo Subaru, el conocía a su amigo muy bien, aunque solo se conocieron hace un año, se llevaba mejor Kazuma con Subaru que con Hana.
Soltando una pequeña sonrisa y quitándose las lágrimas Kazuma y Subaru se levantaron de la banca en la que estaban para ir a la casa de Subaru.
Tranquilo Kazuma, estas cosas pasan- fue lo que dijo Subaru mientras caminaba, sacando una lata de refresco de su bolsa para ofrecerse la a Kazuma, este la toma y la abre, no se va a negar solo por estar triste.
A propósito Kazuma, ¿que carrera planeas estudiar?- fue lo que pregunto Subaru mientras sacaba una gaseosa y se la empezaba a tomar.
Estoy entre tres, bachillerato en administración de empresas, bachillerato en mecánica y bachillerato en diseño gráfico - fue lo que dijo Kazuma para empezar a tomar de su gaseosa, tenía sed.
¿Por qué no estudias arquitectura y construcción? Pagan bien -dice Subaru tomando de su refresco.
Kazuma estaba por responder, pero vio que estaban en un cruce, al otro lado estaba una chica de pelo negro, veía al suelo, pero una vez sintió una mirada sobre ella, levantó la cabeza dejando ver unos ojos café y unas lágrimas en sus mejillas.
Ella se sorprendió, vio a Kazuma y Subaru y sus ojos brillaron.
Kazuma se acercaba al igual que Subaru, pero estos no tenían expresión alguna en su rostro, la chica levantó la mano hacia Kazuma, como queriendo pararlo y hablar con el, pero Kazuma solo pasa de largo junto a Subaru.
La chica se arrodilló y empezó a llorar mientras Kazuma y Subaru caminaban, no se preocupaban de ser juzgados mal, pues ya era tarde, no había gente por ese camino.
¿Encerio no quieres hablar con ella? -dijo Subaru con una sombra en sus ojos, el se sentía culpable, sentía como si el fuese el que dejó llorando a la chica.
Ella y Shiro fueron los que causaron esto, no me pidas que hable con ellos - Kazuma hablo mientras una lagrima caía, no tenía tristeza en su cara, solo odio.
Subaru siempre se preguntó por qué, el nunca soltó una lágrima así como así, solo cuando estaba a punto de romperse, solo lo veía enojado, feliz o siendo un racista, pero nunca triste, o al menos en el exterior.
Sinceramente le sorprendió que siguiera cuerdo, no sólo mantenía su mente clara, si no también trataba de no incomodar a sus amigos.
Siguieron caminando hasta otra calle, fue cuando cada uno se dirigió a su propia casa.
Despidiéndose cada quien fue por su camino.
Kazuma estaba viendo el cielo mientras caminaba, su mirada era vacía mientras sentía como su cabeza palpitaba, le dolía un punto de su cuero cabelludo, el simplemente saco un chicle de su bolsa para llevárselo a la boca.
Mientras mastica simplemente sigue viendo el cielo al caminar, su cabeza dejo de palpitar, sentía también como si su corazón se calmara, cuando vio a Hanna el solo quería romperle una tabla en la cabeza, pero el sabe que no lo puede hacer.
El es débil de mente y cuerpo, no puede ver la sangre ni en la pantalla ni en pintura, no tiene buena condición física y tampoco tiene buena memoria, era lo contrario de Mitsurugi,
Mitsurugi, el presidente de la clase, el que viene de intercambio desde Estados Unidos, el mejor atleta de Japón y una celebridad muy famosa entre las chicas.
Le dolía la cabeza de nuevo de pensar en el, sonaba a prota cliché para el, no sólo el chico bonito, si no también el chico perfecto.
Así fue tachado por sus amigos, pero cuando el habla con Kazuma, deja de ser perfecto.
Uno de los pocos amigos que tiene Kazuma, y el más molesto de tratar.
Lo conoció cuando estaba en la azotea del instituto, el estaba cansado y termino desmayado, le dio un susto enorme ese día, pues no sólo estaba cansado, si no también sangraba de la cabeza.
Cuando estaba pensando si llevarlo a la enfermería o dejarlo ahí tirado, este se levantó.
Vio a su alrededor y cuando me vio, se confundió y en forma de pregunta dijo.
"¿Kazuma?"
De ahí lo ayude y el me ayudó, no sé ni como termine siendo su amigo, el tipo es un cliche andante, quizás eso lo logro.
Aunque hace un mes no viene a clases.
Kazuma iba pensando eso mientras caminaba, estaba a una cuadra de su casa.
Este día iba a terminar mal para el, no sólo su novia lo engaño, fue culpado por una broma al director, le debía dinero a su padre, el siguiente día paga la renta de su apartamento, fue víctima de una broma y encima de todo, su hermana venía de visita mañana con sus padres, estaba más que jodido.
¿Que podría empeorar ahora? Se preguntó, para luego darse una cachetada, había levantado una bandera sin darse cuenta.
Solo esperaba que lo que siguiera no doliera tanto.
Pensó para llegar a la puerta de su apartamento, ya había pasado la cuadra y entrado al lugar que renta.
Espero mañana mejore.
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Konosuba: proyecto K-47434
FanfictionKazuma de repente ve todo diferente al llegar a otro mundo. *Ding!* [El sistema está en línea] -Por favor no de nuevo. [Tu misión de hoy será...] Acompaña a Kazuma en esta aventura en un mundo que parece una ilusión.