Ya han pasado tres años.
Tres años desde que llegué aquí.
Tres años de amistad con los mejores amigos que algún dia pude conocer.
Tres años de no volver a Bradford.
Tres años.
Todo sigue, básicamente igual. Bueno, Elizabeth cada vez más obstinada. Ya tenía mis veinte años, recién cumplidos.
Cada dia me enamoro más de la Fotografía, creo que no pude haber elegido mejor carrera.
Mi amistad con Eleanor y Louis mejora minuto tras minuto. Louis es gracioso, es como el hermano mayor que jamás tuve y jamás quise. Descubrí que Megan es una excelente persona. Y Garret... bueno, él no deja de pedirme la cita que tanto anhela.
Algo escalofriante, a decir verdad.
"-Lo siento, pero por ahora, creo que es bueno que sólo seamos amigos.
-P-pero, Bonnie, de verdad me gustas. Llevas diciendo eso por más de tres años...
-Perdón, en serio.
Él bajó la mirada y asintió levemente. "
Fue el último intento de Garret, hace dos meses. Sí, he tenido algunas citas, nada serio en realidad. En cuanto a Bradford, no he sabido nada ni de Liam, ni de Harry, ni de él. Los extraño, a todos, incluso a Niall. El rubio gracioso a el que una vez quise mucho, pero ahora, no siento nada por el. Mis padres tampoco han querido contarme nada acerca de ellos, a petición mía. Estamos en el frio mes de Diciembre, esta vez pasaremos navidad juntos. Megan, Louis, Eleanor, Garret y yo, todavía no tenemos nada planeado por ahora, sólo le pido a el Espíritu Santo que no quieran hacer nada descabellado. Desde que cumplí los dieciocho, no he bebido una sola copa. Y no planeo hacerlo por más que mis amigos me insistan.
Mi aspecto físico ha cambiado poco, estaba un poco más alta. Y sí, también curvilínea. Ya no era aquella chica de diecisiete años que llegó a Nueva York con sueños y un amor por olvidar. Ese amor ya estaba olvidado.
La verdad casi nada había cambiado, sólo lo recién nombrado y mi cabello. Que gracias a una apuesta perdida contra Louis, tuve que teñírmelo. No era nada del otro mundo, sólo algunos mechones cobrizos, algo así como unas Mechas Californianas.
Allí estábamos, Megan, Eleanor y yo. Llegando a el apartamento, mis manos dolían. Cargaba muchas bolsas a la vez, gracias a las compras navideñas. Eleanor poco a poco fue tolerando más a la rubia, hasta el punto de ser inseparables. Era veinticuatro de Diciembre, Louis estaba de cumpleaños y había formado escándalo desde el mes pasado.
-Al fin. -solté dejando las bolsas sobre el suelo.
-Muero por saber mi regalo. -chilló la castaña.
Megan se miró a el espejo, acomodando su rubio cabello. Se había un cambio extremo, cortándoselo a tal punto que apenas rozaba sus hombros. Algo inusual, pero no le quedaba nada mal; incluso puedo decir, que se veía mejor que antes. Desde entonces, no se despega de su reflejo.
-Yo ya tengo el regalo perfecto para Brandon. -murmuró rociándose perfume.
-¿Todavía eres su novia? Llevan seis meses juntos, felicidades. -sonreí.
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Enamorando a Verónica → zayn
Fanfiction"¿Te vestirias de mujer sólo por amor? Zayn Malik sí lo haría." Antiguo: ¡Creí que eras Verónica! Queda prohibida la copia parcial o total de esta obra. Registrada en Safe Creative bajo el código: 1501032899666.