Weird || Lucemond/Jacaegon/Joffron [OMEGAVERSE]

01

02 de febrero, 2023

EL MATASANGRE

ೀ
✎ ❝Estoy tan harto de mi
Desearía ser cualquier otra personar❞ᝰ

____________________________

Aegon espera impaciente, sus dedos golpean la madera de la mesa uno tras otro en una danza cuidadosamente coordinada de forma inconsciente. Mira fijamente el ventanal de su habitación frente a su cama, piensa en si saltar o no por ahí acabaría de forma rápida con la humillación y la vergüenza que le han hecho pasar en este preciso momento.

¿A quien en su sano juicio se le ocurre murmurar en voz alta que el olor de su embarazo ya es evidente?

No está lo suficientemente ebrio como para soportar tantas murmuras al mismo tiempo, lleva semanas sobrio, desde que supo que está en cinta. Su mirada sigue fija en el ventanal, pero ahora a la espera de un jodido cuervo, impaciente una respuesta que no ha llegado. Chasquea la lengua reasignado.

Tal vez ese estúpido alfa no dará la cara.

No es como si de verdad esperase que la diera, después de todo no son tan unidos como pensó que lo eran, después de todo no tiene una buena reputación como para que el alfa se convenza que el cachorro que espera es suyo.  Aegon resopla resignando, siente el olor de su madre muy cerca y se siente incómodo, es consciente de que su olor ha cambiado y ya no puede suprimirlo, Alicent tarde o temprano se daría cuenta.

La primera impresión que da Alicent, sus grandes ojos se fijan con gran preocupación sobre Aagon, le parece increíble que el hijo que más se parece a ella terminará siendo el que más decepciones le ha dado. Aegon agacha la mirada y oculta su rostro gracias a sus cabellos castaños y ondulados frente suyo. Es un reflejo involuntario.

Alicent tras ella, su abuelo Otto es quien entra. Las cosas solo se complican. Dos olores que aborrece juntos en el mismo lugar. El maestre es el último en entrar, trae un té con él.

—. No los quiero en mi habitación — murmura con un tono lleno de rabia, Otto le hace saber con su olor que es quien tiene el dominio de todos ellos en ese instante — ¡Lárguense! — les grita alterado, eso no fue suficiente para que ellos le obedecieran. Alicent se le acerca y lo toma por los hombros, lo zarandea un poco hasta que él le dirige la mirada y se da cuenta que ella tiene muchas lágrimas en los ojos.

—. ¡Aegon, ¿Es cierto?! — interroga con un nudo en la garganta, ahora ningún alfa querría enlazarse con él. Ninguno quería hacerlo antes mucho menos lo harán ahora que está en cinta y no saben de que alfa — ¡Responde! — ella sabe que es cierto, pero quiere oírlo directamente de su hijo.

Aegon mira hacia otro lado, intenta seguir viendo por el ventanal inútilmente. Otto se encarga personalmente que suelte lo que quieren saber, aparta con cuidado a Alicent y lo toma por los hombros con fuerza, usa su voz de alfa y le exige respuestas, el omega de Aegon tiembla, pero se mantiene firme.

—. ¡Aegon, lo que has hecho es grave, al menos dinos quien es el padre! — Aegon vuelve a quedarse en silencio, está tan sobrio que todas las voces alrededor le resultan molestas — ¡Aegon! — Otto le da una cachetada para que responda, su rostro gira y sus cortos cabellos castaños le golpean las mejillas causándole comezón en el lugar donde Otto lo golpeo, Aegon mira a Alicent con sus ojos vidriosos, como si le preguntara con la mirada que es lo que ha hecho en toda su vida para recibir esta clase de desprecio.