Que maldito calor hacía. Justo el día donde consiguió ahorrar el dinero para hacerle un detalle a su recién establecida pareja y el sol parecía querer matarlo por el sofoco que le causaba.
La florería quedaba bastante cerca de su secundario, una de sus favoritas ya que quedaba muy accesible en la zona. Estaba que explotaba de la felicidad, los nervios y claro, las mariposas en el estómago por estar tan ridículamente enamorado de quién tenía a su lado.
Gon siempre fue su mejor amigo, su cómplice y nunca pensó en que terminarían así. Jóvenes con el paso de ir a la universidad en apenas unos meses, a veces volteaba a verlo para solo empeorar su estado cuando le sonreía dulcemente o le brindaba un poco del agua que llevaba en una botella.
Estaba sudado por completo, la camisa se le pegaba al cuerpo y resultaba ser incómodo pero nadie iba a detener sus planes esa calurosa tarde.
Caminaron juntos de la mano, entre charlas amenas sobre lo que debían comprar para el feliz acontecimiento, el cumpleaños de Gon, el primero que podría festejar siendo pareja de Killua. Viviendo juntos en ese departamento que al inicio de su amistad alquilaban para poder vivir cerca de su escuela y no ahogarse en deudas.
Él prefiere tener ropa más holgada y cómoda, un short de jean y su camiseta verde limón. Un brazo de cada uno está cubierto por bolsas.
—¿Podemos preparar la tarta de limón para comer de postre?- Gon le sonríe dulcemente, ama ver esos sonrojos, cómo le tiemblan las manos al apretarlas contra las suyas. —Ya hiciste el pastel sin mí, déjame ayudarte más.
—No-no es necesario... Sabes que me gusta cocinarte. —aunque lo niegue al principio no puede decirle que no. Suspira al notar ese gesto que parecía una mezcla entre puchero y ojitos de cachorro.—Está bien, pero solo un poco. Se supone que es tu día.
Caminan hasta quedar bajo la sombra producida por un alto edificio, protegiéndose del sol, ambos se apoyan contra la pared y suspiran, limpiándose un poco el sudor con la ropa, Gon casi se termina sentando en el piso por el cansancio.
—Ya compramos todo lo necesario, ¿podemos volver a casa?, me quiero bañar.
Killua lo mira acalorado, ya no tenían agua, debían comprar más, los ojitos de perrito otra vez, las sandalias le estaban lastimando los talones. Le niega y Gon hace un puchero más pronunciado.
—¿Qué más hace falta?
—Un último lugar... Falta uno.—sin duda iba a broncearse ese día, la piel está rojiza por la falta de costumbre por el sol. Lo guía entre las calles y cruces hasta dar al frente de una esquina, una florería muy humilde y colorida que tenía las puertas abiertas la mayoría del día. —Vamos a entrar un momento, ¿sí? —le sonríe con ilusión.
Al estar dentro del local, Gon le suelta el brazo y va a mirar diferentes brotes, para saber si agregarlo a su pequeña colección personal allá en su terraza, un pequeño invernadero que cuida con amor desde hace años.
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Cheesecake ❭𝙆𝙞𝙡𝙡𝙪𝙜𝙤𝙣 ✧
FanfictionNoche de pasión en un apagón nacional. ✧ Incluye contenido adulto. ⋆ 𝘓𝘰𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘴𝘰𝘯𝘢𝘫𝘦𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘵𝘦𝘯𝘦𝘤𝘦𝘯 𝘢 𝘠𝘰𝘴𝘩𝘪𝘩𝘪𝘳𝘰 𝘛𝘰𝘨𝘢𝘴𝘩𝘪.