Aquel abrazo produjo sensaciones distintas en ambas, pero que venían del mismo sentir, era una amalgama de sensaciones y emociones, era frío y calor, pero cuando se juntaban se complementaban a la perfección como el invierno y verano, en ese abrazo ambas sintieron la primavera
Sofía no podía o no quería soltar el cuerpo de la castaña, extrañaba su aroma al igual que la calidez y suavidad de aquella piel trigueña, se sentía tranquila al sentir su tacto, pero la maravillosa sensación se esfumó cuando sintió un vacío en el estómago...
Francesca al sentir el abrazo de la rubia se impresiono a tal punto que la lleno de dudas con respecto a la mujer que se aferraba a su cuerpo, pero decidió alejar aquellas dudas porque ella le había aclarado las cosas. Luego de un mes eterno sintió tranquilidad, calidez y aquella electricidad que sentía cuando la rubia la tocaba, pero debía dejar de darle importancia a esas sensaciones, ya que creía que no eran más que una fantasía imposible
La castaña no pudo abrazarla, no después de lo que Sofía le había dicho, ella respetaría su espacio y se alejaría de ella lo más pronto posible para evitar fastidiarla.
Sofía sintió un vacío en su estómago cuando Francesca la alejo suavemente de su cuerpo, la rubia no necesitaba que la otra se quitara los lentes de sol para saber que su mirada era fría, ya que en el resto de su otro no se inmutaba, la castalla soltó el cuerpo de Sofia y se cruzo de brazos aclarando su garganta.
-Le pediré a Adriano que averigüe que le sucedió a tu padre- dijo fríamente.
- Esta bien... - cuando Sofía vio que la castaña caminaba hacia la salida la detuvo- Gracias por volver
-Solo volví para hablar con tu padre- Francesca se mantuvo dándole la espalda a Sofía.
-¿para que quieres hablar con el?- pregunto nerviosa
-Para saber cuando me dará mi dinero, así evitas volver a verme.- respondió seca y se fue
Sofía al escuchar aquellas palabras sintió su pecho oprimirse y sus ojos se aguaron, supo que Francesca estaba enojada o tal vez se había rendido con ella, no sabía porque sentía ese dolor en el pecho ante la frialdad de la castaña cuando en realidad le dijo aquellas cosas para que al fin se rindiera con ella y le diera su espacio y evitar perder el control de su cuerpo o sentimientos.
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Luego de estar casi todo el día en el hospital, Mary le insistió a su hija y a Laura de que fueran a descansar ya que su padre estaba estable y que ella haría guardia esa noche por si algo sucedía al fin la rubia acepto no muy convencida y salió del hospital con su amiga.
Al llegar a la mansión el salón y el jardín estaban desolados, Sofía fue a la cocina y la encontró igual que resto de la casa.
- Que raro que no haya nadie- le dijo Laura.
-Tal vez Francesca volvió a irse y Anna duerme.- suspiro desanimada la rubia.
Laura subió a la habitación a bañarse mientras que Sofía volvió a la cocina por agua, sintió el ruido de una puerta y cuando se asomo vio la puerta del despacho cerrarse, suspiro y se acercó nerviosa, apreto la manija de la puerta del despacho y la abrió
Cuando entro vio un montón de papeles esparcidos por el escritorio y a una Francesca estresada detrás de ese gran desastre de papeles, Sofía entro y cerró la puerta captando la atención de la castaña que la miro directamente y la rubia sintió aquellos nervios que sentía cuando la tenía cerca.
-Y-yo pensé que no había nadie en la casa- dijo nerviosa.
- Lamento si te desagrada mi presencia.- dijo fría y volvió su vista a lo papeles
-No lo decía por eso, me pareció raro no ver a Anna y yo pensé que tu...
- ¿Que había vuelto a irme?- pregunto sin mirar a la rubia
-Así es...
-Anna tuvo que salir... - ordenó los papeles de su escritorio y los guardo- me iré luego de hablar con tu padre o tal vez al fin puedas irte así no vuelves a verme.
Sofía sintió ganas de llorar por la frialdad de aquellas palabras y cuando estaba dispuesta a irse entro Adriano al despacho
-Hola Sofí- dijo amable y ella solo pudo asentir.
-¿Qué sucede Adriano? -pregunto Francesca.
-Tengo lo que me pediste- se acercó al escritorio.
-Acércate Sofía...
-Creo que deberías decirle que se vaya- dijo Adriano mirando a la castaña.
-Es información de su padre tiene que saber que no fui yo.
Sofía se acerco a ellos y se paro a un costado de la castaña
-Esto es todo lo que pude conseguir, unas fotos de las cámaras de vigilancia de un club- Adriano le entrego un sobre a la castaña.
Francesca abrió el sobre y vio las fotos del padre de Sofía hablando con la persona que ella más detestaba y luego otras fotos donde el hombre salía firmando unos papeles y entregando otros, la castaña apreto la mandíbula y arrugó fuertemente aquellas fotos.
-Se han visto varias veces en ese club, quise hablar con uno de servicio para que me dijera el nombre del guardia, pero me dijo trabaja para el y no me dará información- dijo Adriano nervioso por que sabía la reacción que se venía.
-MALDICIÓN - grito la castaña tirando todo lo del escritorio al piso y Sofía se sobre salto.
-Deberías darme una muy buena razón para no ir y ponerle a tu padre una bala en el cráneo!!! - le dijo a Sofía con la voz en alto, asustando a la rubia que salió llorando del despacho.
-¿COMO MIERDA NO LO SUPISTE ANTES? - le pregunto enojada -DEBERIA DISPARARTE POR INUTIL
Adriano no se inmutaba ante aquellos gritos, el al igual que Anna estaban acostumbrados a la reacción de la castaña cuando esa persona daba la mínima señal de vida para joderla, el sabía que algo malo había detrás de todo esto, algo que el no podía averiguar y que solo podría hacerlo ella...
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Les agradecería mucho que comentaran los capítulos sobre que les gusta y que no ya que eso me motiva a seguir con esta historia.❤❤❤❤❤
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Disparo al corazón
Ficțiune adolescențiSofía García es una enfermera de 22 años con una vida sencilla y tranquila luego de mudarse a España, pero esa tranquilidad se acabará cuando viaje a Italia a ver a su madre y al enterarse que su padre tiene problemas con la familia más importante d...