He tomado una decisión muy importante en mi vida y desearía poder contarte, intenté buscarte te vi muy feliz en compañía de otras personas y me detuve a pensar que yo ya no formo parte de tu círculo social así que desistí y lo dejé pasar.
Antes me causaba mucha molestia verte en fotos con otras personas y sé que era algo bastante egoísta y toxico, así que me dispuse a trabajar en ello y obligarme a entender que está bien que compartas con otras personas, el hecho de que ya no seamos confidentes, ni personas tan cercanas no quiere decir que deba sentirme mal o triste al verte feliz y disfrutando de la comodidad que te brindan otras personas.
Estoy asumiendo con el pasar de los días que estás en el pasado como la mejor compañía y el mejor apoyo que pude tener, pero que los tiempos y las personas cambian y que ya es hora de dejarte ir.
No sé cuántas veces he tenido que pasar este mismo proceso, perdí la cuenta de las veces en las que he tenido que conformarme con los recuerdos y repetirme un millón de veces que las personas son pasajeras, que está bien querer en libertad, que está bien querer a distancia y en silencio, que está bien que las personas se alejen cuando sientan que ya no eres su lugar favorito.
Todos hemos desarrollado dependencia emocional alguna vez en nuestra vida, lo importante es que puedas aprender a dejar ir, no puedes obligar a nadie a quedarse cuando en realidad quiere irse y no significa que te deje de querer, no significa que te odien es simplemente que es parte de su proceso de vida alejarse de tí y eso está bien.
La dependencia emocional es la adicción hacia una persona, tenemos la sensación de que necesitamos a esa persona, necesitamos lo que esa persona significa para nosotros y pensamos que sin él o ella no somos absolutamente nada.
Creemos que no encontraremos a ninguna persona parecida que nos quiera y a quien queramos de la misma manera.
Soltar a la gente es saludable para el alma, te libera de situaciones incomodas e insostenibles, cuando alguien ya no se siente cómodo con tu compañía debes soltarle la rienda y dejar que se marche en paz, quiérele con todo tu corazón y deséale lo mejor del universo.
Estoy lista para la siguiente etapa, gracias por ser parte de mi vida, estoy preparada para recibir esta nueva versión de tí y lo que estés en disposición de entregarme de ahora en adelante, gracias por enseñarme a querer en libertad.
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APRENDE A SOLTAR
DiversosA veces tenemos tanta dependencia emocional que cuando las personas deciden irse sentimos un vacío imposible de llenar