En San Valentín -Sailor Moon-

💖San Valentín💖

Comencé a correr hacia el elevador del centro comercial, pues Rei y Ami me dijeron que había un enemigo en la cima del centro comercial. Mi plan es transformarme en el elevador, pues aquí afuera hay demasiadas personas y no puedo arriesgar mi identidad secreta.

Comencé a tocar repetidamente el botón para que me dejara pasar. Y tras unos segundos las puertas comenzaron a abrirse. No permití que se abrieran las puertas, pues entré de una vez. Cuando estuve adentro toqué el botón del último piso. Para mí mala suerte, las puertas se abrieron completamente y luego se cerraron lentamente.

— No puedo creer la suerte que tengo.

Abrí más de lo normal mis ojos en cuanto escuché esa voz a mis espaldas. ¡Esa voz del hombre al que más odio en éste mundo! Me giré y lo encaré. Darién Chiba, o mejor conocido para mí, el señor arrogante estaba ahí.

El elevador comenzó a moverse hacia arriba, mientras yo lo sigo viendo. ¿Ahora cómo rayos me voy a transformar? Él va a ser el último en el universo en saber mi identidad. Jamás se la mostraría.

¿Ésto me tiene que pasar en San Valentín? Yo deseando luchar para ver a Tuxedo Mask...

— ¿Qué haces aquí?— Sus ojos se abrieron más de lo normal mostrando nervios. Sacudió levemente su cabeza y me miró serio.

— Eso debería preguntarte a ti, Cabeza de Chorlito.

¡Lo odio, lo odio tanto!

— A ti no te importa que esté haciendo yo aquí— Le respondí cruzándome de brazos. No entiendo porque rayos todos los días me veo con éste hombre.

— A ti tampoco te importa que esté, yo haciendo aquí.

Parpadeé un par de veces. Voy a admitir que mis palabras han sido usadas en mi propia contra.

Solté un largo bufido de fastidio. Espero que éste hombre se vaya pronto de aquí. No creo poder soportar estar con él tanto rato.

Fue entonces que sentí como todo se sacudía. No me dí cuenta que pasó exactamente, pero al abrir mis ojos, estaba él sobre mí.

Nuestros ojos estaban uno al frente del otro. No voy a negar que verlo de cerca... lo hace ver... guapo...

¡¿En qué estoy pensando?!

— ¡Apártate!— Le dije empujándolo hacia arriba. Él salió de una especie de shock, para luego levantarse.

Fue ahí que noté como ya el ascensor no se movía. Incluso las luces se habían ido, dejando solo las de repuesto ahí. Me levanté de nuevo y miré la tabla de los botones. Comencé a tocar repetidas veces el número de arriba, al cual tenía que ponerme de puntillas para tocar.

¡¿Por qué me pasa ésto a mí?! ¡¿Qué hice para tener que soportar a éste hombre?!

Fue entonces que ví como él tomaba mi mano y la apartaba de la tabla de los botones. Le dí una mala mirada, tratando de que su mirada intimidante no me intimidara.

— El ascensor se baró, no se va a mover hasta que vengan por nosotros— Me dijo soltando un suspiro— Ho simplemente la luz se fue.

— No me importa la razón. ¡Solo no quiero estar aquí contigo!— Le espeté cruzándome de brazos. Él alzó una ceja, antes de apartarme de donde estaba yo.

¿Quién se cree?

¡Está tratando mal a una hermosa señorita como yo!

— ¿Tú crees que quiero quedarme aquí contigo?— Abrió una pequeña caja de la tabla de los botones. Había un pequeño teléfono ahí— Ni en un millón de años estaría feliz de que estés cerca mío.