"Oden" [Yamato x Hiyori] [One Piece]

Capítulo 9

Contenido adulto (+16-Yuri)

[...]

Yamato estaba en un conflicto muy grande. No sentía que podía decirle nada a Hiyori sobre que se iba a ir con Luffy. De hecho... ¿estaba preparado para ir con Luffy al mar? ¿Era ese su destino?

Estaba pensando en eso cuando de repente siente una mano en su regazo. Su mirada se dirigió hacia Hiyori de nuevo, ella se estaba acercando a ella con el rostro sonrojado.

Definitivamente Yamato no estaba preparada para eso, ni siquiera se movió de posición. Cual pirata frente a un almirante, se sintió paralizado.

—Te veo preocupada— dijo Hiyori en un pequeño susurro.

—N-no, estoy b-bien— su voz le falló un poco, pero al menos pudo darle una respuesta clara.

—Entonces no pienses en nada Yamato...— ambas estaban sentadas y aun había cierta diferencia de altura entre ellas. Hiyori decidió ponerse de pie para que aumentara un poco de su altura y estar frente a frente con Yamato.

La de cabello blanco no pudo formar otra oración, simplemente dejó que se cerebro estuviera en blanco.

Las manos de la de cabello turquesa se dirigieron a las mejillas de la peliblanca, claramente Yamato sabía qué estaba a punto de pasar, aunque no podía creerlo.

Los labios rosados de la joven Kozuki se acercaban al rostro de la "Princesa Oni" y ésta pone sus manos en las caderas de la "Princesa Kozuki".

Era el mejor momento para ambas, era un momento crucial en su destino.

Y en el momento justo antes de besarse, Yamato habló.

—Iré con Luffy al mar, ese ha sido mi sueño desde hace tiempo, ser libre como Oden— mantuvo sus ojos cerrados, no quería ver la mirada decepcionada de Hiyori—. De verdad lo lamento, pero no quiero dañarte— se justificó.

Hubo silencio, pero las manos de Hiyori nunca se separaron de su rostro, entonces decidió abrir sus parpados. El rostro de la chica frente a ella tenia una sonrisa muy bonita, una sonrisa que le daba paz.

—Ya lo sé, Momo me lo comentó— ella no se veía decepcionada.

—Entonces tu...— quiso volver a hablar la mas alta.

—Por eso te digo que no pienses en nada, al menos por lo que queda del día— se acercó de nuevo y le dio un beso a la peliblanca, la cual cerró sus ojos y disfrutó del contacto—. Vamos al castillo, que hoy solo seamos tu y yo Yamato— le sonrió de nuevo antes de ponerse de pie y caminar de vuelta.

Yamato sentía lagrimas en sus ojos, pero iba a ignorarlas. Hoy no era Oden ni el Hijo de Kaido, solo era Yamato.

[...]

En el castillo no estaba Momonosuke, era seguro se fue con los Akazaya a donde Mugiwara, entonces estaban totalmente solas.

Hiyori se dirigió a su habitación y le dio paso a Yamato que en ese momento se sentía diminuta en ese cuarto.

Entonces fue donde vio como Hiyori extendía sus brazos para recibirla en un abrazo. Se acercó con cautela y la abrazó, aunque la posición era extraña por la diferencia de altura.

—Yamato ¿sabes lo que está a punto de pasar? — éste asintió con la cabeza—. ¿Cómo debería referirme a ti? Perdón por preguntar tan tarde— dio una risa nerviosa.

—Puedes tratarme de "él", me siento mas cómodo, en Onigashima todos se referían a mi así— dijo mientras se agachaba para poder estar frente a Hiyori.

—Entonces... se un buen chico para mi ¿sí? — sonrió con mucha mas fuerza.

—Por supuesto que lo seré— movió sus manos a las caderas de la mujer mas baja.

—Soy toda tuya— ambos estaban listos—. No me arrepentiré de lo que pase ahora, espero que tu tampoco. Quizás no nos conocemos lo suficiente, pero solo te siento a ti Yamato— en sus ojos había un brillo muy particular.

—Yo... nunca me arrepentiría de esto y después de todo, solo te siento a ti Hiyori— después de eso no hubo que compartir mas palabras. 

[...]

Las grandes manos de Yamato recorrían el cuerpo de Hiyori como se quisiera conocer cada parte de ella. Como si con su tacto pudiera reclamarla como suya, que ese cuerpo y corazón le pertenecía solo a él, aunque al final no fuera así.

Para compensar la diferencia de altura, la joven de cabello oscuro estaba sentada en el regazo de Yamato. No había prenda alguna entre ambos, entonces sus cuerpos también estaban en contacto.

Hiyori acercaba sus labios al cuello de Yamato para dejar besos y marcas como chupetones y mordidas, también reclamándolo como suya.

Los ojos brillantes y grandes del Oni vieron a los de la princesa en un gesto de pregunta, este estaba pidiendo permiso para proseguir. Ninguno de los dos había hecho esto con alguien del "mismo género", en sí, ninguno lo había hecho con una mujer antes, de hecho, Yamato era virgen.

Las manos mas grandes se iban dirigiendo mas para abajo mientras sentía la piel sueva bajo estas. Las manos contrarias también la recorrían con entusiasmo, era un nuevo sentimiento.

Esa noche solo fueron ellos.

Disfrutaron mucho todo lo que pudieron, exploraron sus cuerpos con mucho cariño y amor, al no ser diferentes sabían qué se sentía bien y cómo hacerlo...

De sus poros corría el sudor de una nueva pasión, en donde solo había espacio para dos personas.

De sus ojos corrieron lagrimas de placer y del nuevo amor por quien tenían en frente.

De sus bocas salieron sonidos que no habían escuchado antes. Salieron palabras de amor, dulces promesas que no sabían si iban a poder cumplir.

Así descansaron en la madrugada, abrazadas en el calor de ambos cuerpos, juntos como si fueran solo uno.

Mas tarde en la mañana Hiyori despertó sola.

Los Mugiwaras tuvieron que adelantar su viaje y saldrían dentro de unas pocas horas. 

Perdón por tardar tanto en escribir, dije que tenía tiempo y me puse a hacer otras cosas :D

Espero que les haya gustado el capítulo, quedan como 1 o 2 capítulos para terminar, no esperaba que fuera una historia larga. 

De hecho tuve que releer para ver en qué había quedado, pero aquí está.

Nos vemos dentro de poco Unicorniosaurus <3