El Colegio De Magos

Eldorado fue creado por un poderoso ser mágico llamado Alatar. Él había vivido por mucho tiempo en un mundo gris y monótono, y deseaba algo más emocionante y variado. Así que, con su magia, creó Eldorado, un mundo de fantasía lleno de montañas mágicas, bosques encantados y criaturas míticas. Alatar invitó a seres mágicos y no mágicos a vivir en Eldorado y les dio la libertad de crear su propio destino. Así, los elfos, enanos, humanos y otros seres vivieron juntos en armonía y construyeron una sociedad próspera y alegre. Pero Alatar también sabía que el mal podría amenazar la paz en Eldorado, así que creó un grupo de guardianes mágicos para proteger el mundo de las fuerzas oscuras. Y así, Eldorado floreció y se convirtió en un lugar maravilloso para vivir y soñar. En el 596 de la 2 era nacio Elwin. Elwin era un joven elfo con un sueño: convertirse en un mago. Había nacido en una pequeña aldea en el bosque y desde niño había sentido una conexión especial con la magia. Pero, a pesar de su talento, su camino hacia el Colegio de Magia parecía imposible. Elwin provenía de una familia pobre y no podía permitirse pagar los costosos estudios en el Colegio de Magia. Además, muchos en la aldea lo consideraban un soñador y le decían que se conformara con su vida y trabajo como carpintero. Pero Elwin no se conformaba. Él sabía que tenía un don especial para la magia y no estaba dispuesto a abandonar su sueño. Así que, con la ayuda de su mejor amigo, un enano llamado Golig, Elwin comenzó a buscar una forma de entrar en el Colegio de Magia. Después de mucho buscar y rechazar muchas ofertas, Elwin y Golig encontraron a un mago solitario que vivía en el bosque. Este mago, conocido como el Anciano, estaba buscando un aprendiz y estaba dispuesto a enseñar a Elwin todo lo que sabía sobre la magia. Elwin aceptó el ofrecimiento y comenzó a aprender con el Anciano. Trabajó duro y aprendió más rápido de lo que nadie esperaba. Al cabo de unos años, el Anciano le dio su bendición a Elwin y lo envió al Colegio de Magia, donde finalmente podría seguir su sueño. Una vez en el Colegio de Magia, Elwin demostró ser un estudiante talentoso y dedicado. Aprendió rápidamente y ganó el respeto y la amistad de sus compañeros. Al final de sus estudios, se convirtió en un mago poderoso y sabio, y regresó a su aldea natal para ayudar a sus amigos y proteger a Eldorado. La historia de Elwin se convirtió en una leyenda en todo Eldorado, y muchos jóvenes con sueños similares se inspiraron en su historia para luchar por sus propios sueños y alcanzar la grandeza. Después de muchos años de éxitos y logros como mago, Elwin comenzó a sentirse insatisfecho con su vida. Él había alcanzado todos sus sueños, pero aún sentía un vacío en su corazón. Este vacío se convirtió en obsesión y Elwin comenzó a buscar más poder y conocimiento. Él viajó por todo Eldorado, reuniendo libros antiguos y artefactos mágicos, y estudiando antiguas formas de magia oscura. Poco a poco, Elwin comenzó a perder el contacto con la realidad y cayó en la locura. Su obsesión por el poder lo llevó a cometer atrocidades, incluyendo la conquista de aldeas y la opresión de sus habitantes. Los guardianes mágicos de Eldorado intentaron detenerlo, pero su poder era demasiado fuerte. Elwin se convirtió en un villano temido y odiado por todos en Eldorado. Sin embargo, todavía había un atisbo de bondad en su corazón y, en sus momentos de lucidez, se arrepentía de sus acciones. Pero su locura era demasiado fuerte y no podía detenerse. En el 202 de la 6 era nació Farel. Farel era un joven lino talentoso, pero algo rebelde y descarado. A pesar de sus habilidades, nunca había sido aceptado en el Colegio de Magia debido a su naturaleza imprudente. Sin embargo, cuando la locura de Elwin comenzó a amenazar la seguridad de Eldorado, Alatar vio en Farell una oportunidad. Él le otorgó el poder de la magia del caos, una forma de magia muy antigua y peligrosa que había sido sellada por los guardianes mágicos. Farel aceptó el desafío y se enfrentó a Elwin en una batalla épica. A pesar de su juventud e inexperiencia, Farell utilizó su magia del caos con habilidad y valentía, logrando derrotar a Elwin y restaurar la paz en Eldorado. Sin embargo, después de la batalla, Farell se dio cuenta de que el poder de la magia del caos lo había cambiado de manera irreversible. Él había ganado la batalla, pero se había perdido a sí mismo. Desde entonces, Farell ha vivido como un recluso, luchando contra su propia locura y tratando de encontrar un camino hacia la redención. Después de muchos años de luchar contra sus demonios internos, Farell finalmente logró controlar la magia del caos y encontrar un camino hacia la paz interior. Con su experiencia y habilidades, fue elegido como el nuevo director del Colegio de Magia. Bajo su liderazgo, el colegio prosperó y se convirtió en un lugar aún más prestigioso para estudiar magia. Farell también decidió renombrar el colegio en honor a Elwin, el antiguo villano, como un recordatorio constante de los peligros de la magia y la importancia de usarla con responsabilidad. El Gremio de Magos de Elwin se convirtió en un centro de conocimiento y habilidades mágicas, y sus graduados se convirtieron en los protectores más respetados y temidos de Eldorado. La ciudad de Elwin se creó como una comunidad alrededor del Colegio de Magia, y rápidamente se convirtió en un centro de comercio y cultura en Eldorado. Los habitantes de la ciudad eran principalmente magos y linos, pero también había humanos, enanos y otros seres mágicos y no mágicos que vivían y trabajaban allí. La ciudad de Elwin era conocida por sus edificios mágicos y sus calles pavimentadas con piedras mágicas que brillaban con una luz misteriosa. Había tiendas y mercados llenos de productos mágicos y objetos curiosos, y un gran parque donde la gente podía disfrutar de la naturaleza y la magia. Elwin también albergaba algunos de los festivales más grandes y brillantes de Eldorado, con actuaciones mágicas, fuegos artificiales y comida deliciosa. La ciudad era un lugar vibrante y alegre, y la gente de Eldorado la visitaba con frecuencia para disfrutar de sus atracciones y su vibrante escena cultural.