Noche. Posada Ikeda. Fuera
--Hora del perro—
Luego de que arribamos a Ikeda, fui enviada a entregar bastantes recados. Cuando volví encontré a Nagakura hablando con Okita.
Shinpachi Nagakura: Bien, luce como que acertamos esta vez. No estoy seguro si llamarlos valientes o estúpidos por reunirse al lado de un edificio del gobierno…
Okita Souji: Sabía que estarían aquí. Después de todo, siempre se veían en Ikeda antes.
Shinpachi Nagakura: Si, ¿pero la noche misma en que arrestan a Furutaka? Eso simplemente me parece estúpido. Digo, ¿por qué no cambiar el lugar? Cualquiera se preocuparía si estuviera siendo cazado.
Okita Souji: Obviamente, no tienen mucho sentido común. Después de todo, siguen viniendo a Ikeda, ¿cierto?
Para el asunto, pudo haber pasado cualquier conversación entre Okita y Nagakura.
Tal vez Choshu intentaba engañar al Shinsengumi—ciertamente no sabía. Sea cual fuera la razón de su comportamiento casual, no parecía que Nagakura u Okita estuvieran particularmente preocupados de eso.
Heisuke me notó y se acercó.
Heisuke Toudou: ¿Entonces? ¿Cómo va eso? ¿Has visto a alguien de Aizu o de la Comisaría Judicial?
Chizuru Yukimura: Bueno…para ser honesta, no vi a muchas personas cerca de aquí.
Él frunció el ceño infelizmente para el mismo.
Heisuke Toudou: ¿Entonces aún no actúan? Les dijimos antes del anochecer, ¿qué rayos están haciendo…?
Shinpachi Nagakura: Cálmate, Heisuke.
El hombre alto palmeó a Heisuke en el hombro con una risa sonora.
Shinpachi Nagakura: No es como si fueran útiles de todos modos, aunque vinieran. Si pasa algo, lo arreglaremos nosotros mismos.
Heisuke Toudou: Seh, pero, Shinpatsu-san… ¿No crees que huir y dejarlo todo a nosotros es bastante negligente?
Sus palabras de seguro hicieron mella en más de uno de ellos, porque decidieron esperar refuerzos.
…
Esperamos por bastante tiempo, pero nunca llegó nadie más.
--Hora del jabalí--
Miré al cielo.
La luna ya había hecho gran parte de su jornada por el cielo desde que llegamos a Ikeda.
Shinpachi Nagakura: Rayos, se está haciendo bien tarde.
Okita Souji: Kondo-san, ¿qué quieres hacer? Dejar pasar esta oportunidad sería bastante patético.
El jefe había estado cállate por varias horas, pero cuando Okita habló, se levantó y dejó caer su mano sobre mi hombro.
Isami Kondo: Yukimura, ¿puedes alejarte de la Posada?
Chizuru Yukimura: ¿Um…?
Isami Kondo: Será peligroso desde ahora. Este lugar está lleno de rebeldes, no tengo intención de dejarlos escapar.
Entonces él se adelantó, me dio una sonrisa, y corrió dentro de la Posada.
Isami Kondo: ¡Somos el Shinsengumi: ¡Empleados del teniente-general del Dominio de Aizu! ¡Por decreto imperial, están bajo arresto!
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Hakuoki _ Demon of the Fleeting Blossom [Okita Souji]
Novela Juvenil·˚ ༘₊· ͟͟͞͞꒰➳ Al final de una era, los hombres del Shinsengumi luchaban para sostener los ideales samurái. Cuando una joven chica es lanzada en medio de ellos, se encuentra a si misma irrevocablemente atada a su trágico destino. Este es un trabajo d...