Yuuri al despertar lo primero que vio fue al ángel que dormía profundamente a su lado ya que después de compartir abundantes besos pasaron la noche abrazados bajo las cobijas felices de sentir el calor de sus cuerpos, al principio jamás pensaron que algo así ocurriría pero ahora ahí estaban, sumidos en una relación a todas luces imposible pero a la que no pensaban poner fin salvo que alguien mas lo hiciera.
El nipón se levantó con cuidado de no despertar al ángel y se dirigió al baño para darse una ducha, pasó largo rato bajo la regadera absorto en sus pensamientos, sabía que lo que habían hecho inevitablemente tendría repercusiónes, ¿pero cuáles serían estas? la mas posible era que Viktor se marchara antes de lo señalado inicialmente. En cuanto a él pensaba que lo mas seguro era que le sería negado el acceso al cielo al haber violado una regla divina y haberse involucrado con un ser prohibido.
--Buenos días Yuuri.-- lo saludó el adolescente bastante adormilado aún.
--Buenos días Viktor, creí que todavía dormías.-- Yuuri se quedó de pie junto a la cama un poco inseguro en volver al lado del peliplata.
--Desperté cuando te levantaste.--
--Lo lamento no quise hacerlo.--
--No hay problema, además ya no es demasiado temprano.-- Viktor se incorporó para recargarse en una pila de almohadas.
--Eso es verdad, se ve así porque la mañana es muy oscura.--
--¿Te quedarás ahí?.-- preguntó el ruso.
--Iré a preparar el desayuno.--
--Al menos que tu tengas mucha hambre yo preferiría quedarme un rato mas aquí.--
--A mi también me gustaría.-- Yuuri levantó la cobija para meterse debajo.
Viktor sin ninguna timidez se acercó al japonés para apoyar la cabeza en su pecho a la vez que lo abrazaba por la cintura en tanto Yuuri pasaba su brazo por su espalda.-- Todo está muy silencioso.-- dijo después de un par de minutos.
--La mañana después de navidad por lo general es asi, la gente al parecer aun está en cama.--
--Como nosotros ahora.-- Viktor se aferró aún mas al pelinegro.
--Eso sin contar con que está nevando muy fuerte.-- añadió el nipón.
--Razón de mas para quedarse en casa.--
Yuuri permaneció en silencio durante un largo rato, se sentía feliz pero también culpable, tener al ángel entre sus brazos resultaba sorprendente pero sabía que acababa de transigir una regla sagrada y eso le atemorizaba aunque no tanto por él sino por Viktor, le preocupaba que su vida en el cielo se viese afectada.--Viktor.-- dijo al cabo de varios minutos.-- ¿Qué crees que pase con nosotros?.--
Viktor se tensó al escuchar la pregunta sin embargo era algo que de lo que debían hablar.--No lo sé, supongo que no será bien visto en mi mundo.--
--Pero...tengo miedo de que tengas problemas.--
--Seguramente los tendré, pero aun asi no me arrepiento de nada.-- respondió acurrucandose más al japonés.
--Pero Viktor...--
--Yuuri por favor, ahora solo quiero ser feliz y no pensar en el futuro, sé que tendré que marcharme tarde o temprano pero no quiero atormentarme desde hoy.-- Viktor se incorporó levemente para ver directo a los ojos del nipón.
Yuuri tomó un mechón del cabello del ángel que cubría una parte de su rostro y lo pasó por detrás de su oreja.--Te amo Viktor y sé que cuando te hayas marchado ya nada será igual, yo...sinceramente no sé que haré sin ti.-- de los ojos del nipón resbalaron un par de lágrimas que provocaron un enorme dolor en Viktor.
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Send me an angel
FanficEn una noche de invierno un carruaje corre frenético, dentro de el seis huérfanos conducidos por su profesor huyen de la revolución rusa la cual está en su punto álgido, creen que van hacia la salvación pero...la muerte los acecha en una remota mont...