Sobrevivientes [Un Mundo Diferente]

Cap 10

—¿Cómo que confiar en ellos?, ¡Pero si no los conocemos!—chillo viví de nuevo

¿Pero que le pasaba? ¿No se cansaba de contradecir lo que digo?

Pero que molesta estaba y ya me entraban unas buenas ganas de callarla de una puñetazo de una puta vez

Hiba a hablar porque ya me estaba agotando la paciencia, pero el chico se me adelantó, creo que igual de harto que yo

—Mira niñata—hablo cerrando los ojos y dando un profunda bocanada de aire, quizás implorando paciencia—si quieres te quedas, nos harías un gran favor a todos, en especial a mi

Esta vez se volteo a mirarme fijamente con una expresión mucho más suave y volvió a hablar

—Rossi, tenemos que apresurarnos

Estaba por dar la orden a los demás para que se prepararán y nos largaramos, pero otra vez Vivian abrió el osico, ¿¡Que coño le pasaba hoy!?

—Bueno ¿Y tú quien te crees?—Ataco ofendida refiriéndose a Jay

Ok, hasta aquí, mi paciencia es muy limitada y hasta aquí a llegado

—Ya cállate Vivian—ordene con la voz más fuerte y autoritaria que e usado pero sobre todo resaltaba lo molesta que estaba—No entiendo que coño te pasa y por ahora no me interesa pero si quieres morir en esta pocilga, adelante, quédate

—¡Rossi nos quieren asesinar!—solto la morena con la voz más aguda que antes—No podemos confiar en cualquiera

Vale, tenía razón

Pero yo soy su superior y ella tiene que acatar mis órdenes y aún mejor si es sin rechistar y si le estoy diciendo que confíe, así no esté segura, solo tiene que seguirnos y ya, no armar tanto drama, si no confía en ellos fácilmente debería confiar en mí

Ni siquiera tu sabes quiénes son, solo te estás guiando por un absurdo sentimiento

Ataco mi conciencia y tenía razón, pero algo me decir que si podía confiar en estos chicos y de verdad ya el puño me temblaba por estamparlo en su cara

—¡Vivian, soy tu maldita superior, tu líder, así que ya no te estoy hablando como tu amiga, ni cómo tú compañera de clases, ni aliada, ni ninguna de esas mierdas. Te estoy hablando como tu superior, así que es una puta orden. Ahora muévete de una maldita vez—regañe tan rápido y fuerte que al terminar el pecho me subía y bajaba rápidamente y tuve que tomar una gran bocanada de aire para reconponerme

Vivian quedó pasada, al igual que todos en la sala a excepción de el tal Jay que esbozaba una pequeña sonrisa de lado y poco después

Viví no tardó en fruncir el ceño y mirarme furiosa, pero no dijo ni una palabra

—Bien chicos, ya no hay tiempo, tomen los chalecos y las armas y vámonos—ordeno Hanna adentrandose a la sala para tomarme de el brazo y llevarme a una esquina—¿De verdad confías en ella?

¿Cómo que...? Claro que sí, es de mi fraternidad, de mi categoría, de mis amigos casi familia

—Claro que si, solo debe estar asustada, aunque si que sabe sacarme de mis casillas, pero claro que confío en ella—dije con la vista fija en los ojos oscuros de la chica