OCEAN HEART (Emiliaco)

Capítulo: 10

Emilio pudo confirmar que ZanJin había dicho la verdad, el chico que había conocido el día de la fogata estaba caminando a través del mercado con múltiples guardias a su alrededor, protegiéndolo.

El oji-verde se dedicaba a observar todo lo que sucedía mientras se mantenía apoyado en una pared, piensa una estrategia para poder acercarse y hacer "las pases" sería un poco complicado.

Sin más, el pirata despega su espalda del concreto y camina hacia su objetivo, esquiva a los pueblerinos y su oportunidad se hace presente cuando el chico se separa un poco de los guardias.

El rizado pasa por al lado de él y choca su hombro contra el del ojimiel, inmediatamente se voltea a verlo cuando el príncipe suelta un quejido.

__¡Lo siento!__exclama el oji-verde y toca el brazo del chico para ver si le había hecho daño, obviamente todo había sido planeado y estaba fingiendo.

Los guardias reales rodean al príncipe y uno empuja a Emilio hacia atrás, este le sonríe cínicamente y muerde su lengua para evitar decir una grosería, debía verse arrepentido.

__No le hagan nada, estoy bien__la voz del pelinegro se hace presente, pero aún así los guardias no pierden su compostura__lo conozco.

Emilio pone sus ojos sobre el chico y le da una mirada de arrepentimiento, el chico se encoge de hombros ante eso, restándole importancia.

El pirata supo que debía esforzarse mejor.

__Realmente lo siento, te debo una buena disculpa y también me gustaría agradecerte__el ojimiel sale del círculo en donde estaba siendo protegido y se acerca hasta a Emilio, ambos tomando una distancia de los guardias para poder conversar.

__¿Agradecerme por qué?

__Supe lo de las dagas, son realmente preciosas, gracias__murmura con suavidad el rizado y el pelinegro asiente con lentitud__así que príncipe.

El chico vuelve a asentir y suelta un pesado suspiro.

__Si te hubiera dicho que era el príncipe me hubieras odiado de inmediato, aúnque bueno... Me odiaste sin saber lo que realmente era__el oji-verde ríe roncamente y se cruza de brazos, en eso tenía razón.

__Suelo ser desconfiado la mayoría del tiempo__bien, el plan era hacerse su amigo y sacarle información, podía hacerlo, así que iría directo al punto__disculpa, pero no sé cual es tu nombre.

__Wang Haoxuan__Emilio inmediatamente evalua su nombre y frunce su ceño ante eso, sabía que la familia real tenía nombres realmente con significado.

__Tú nombre procede de un gigante de la mitología, hijo de Poseidón y Afrodita, se relaciona con una serpiente marina.

Xuan se sorprende y sonríe porque era la verdad, lo que había dicho el pirata estaba más que bien.

__Se nota que sabes del tema, ahora dime tu nombre.

__Emilio.

__Un nombre bastante hogareño__el oji-verde entrecierra sus ojos y observa minuciosamente al chico frente a él.

__¿Te aburre siempre recorrer el mismo lugar y tener guardias a tu alrededor? Por eso el día de la fogata estabas usando una capa y dijiste que eras herrero, no mostrabas tu rostro, eres tan obvio.

Las facciones del príncipe cambian, la sonrisa desaparece y el desconcierto se hace presente en su rostro.

Emilio había dado en el clavo.

__No puedes suponer eso de mí así como así, estás siendo irrespetuoso__Emilio rueda los ojos ante eso, vamos, esperaba aúnque sea una grosería.

__Sólo digo la verdad, ¿por eso fuíste bueno conmigo? Porque soy un pirata y hay aventura en mi vida, ¿quieres eso?__el oji-verde da un paso más cerca del ojimiel y este traga en seco.

Quizás si sea la verdad.

__Y-yo...

__Quieres saber lo que se siente ser libre antes de atarte al trono y tener que casarte, ¿lo peor? Es que te gustan los chicos__la respiración de Xuan de atasca en su garganta.

No podía ser posible, ¿cómo era posible que un completo desconocido lo estuviera leyendo como un libro abierto?

__Bueno, puedo mostrarte las cosas simples de la vida, tómalo como un agradecimiento por las dagas__el pirata ofrece sin más y piensa algún día en el que puedan reunirse, piensa en Joaquín y una sonrisa se forma en sus labios, obviamente el oji-azul era su prioridad.

Vuelve a mirar a Xuan y suelta un suspiro.

__Búscame en el muelle, el viernes__concluye con simpleza y hace una reverencia sarcástica__no tardes.

Sin más se va de ahí y se felicita a sí mismo por haber logrado que todo saliera tan malditamente bien.

Lamentable estaba jugando con fuego.

Un paso en falso y el príncipe podía mandarlo a la horca.

Un paso en falso con Li y este lo mataría por traición.

Un paso en falso con Joaquín y lo perdería para siempre.

Estaba siendo apuntando por todos lados y debía jugar bien, tenía que saber moverse y pensar antes de hablar.

Ahora lo único que tenía en su mente era que mañana volvería a ver a Joaquín, no sabía que preguntarle ya, sabía lo suficiente de él pero aún no se sentía satisfecho.

Quería tomar todo de él.

El tritón era tan jodidamente encantador que pasaría horas escuchándolo hablar, pasaría horas sólo mirándolo.

Había conocido a bastantes chicos a lo largo de su corta vida, pero de verdad, ninguno era lo mitad de bonito de lo que era Joaquín.

Ni siquiera el príncipe que tenía facciones bastantes escantadoras.

Joaquín sin duda era mejor que todos ellos.

El problema que realmente le preocupaba tenía nombre y apellido; Li Daikun, alias... Su capitán.

Emilio sentía apego hacia a Li, habían crecido juntos y miérda, sentía que le estaba ocultando algo de vida o muerte y quizás si era así.

Pero por fin había conocido a alguién que lo atraía lo suficiente como para atraparlo.

La vida no podía haber sido más injusta, justo la criatura que tenía que atrapar, estaba atrapándolo a él lentamente.

Aparte, que el destino sea una miérda y haya decidido poner su lealtad en una cuerda floja no era culpa suya.

Alguién en esa historia sería traicionado por Emilio y aún no se puede saber exactamente quién o cuantas personas serán.

Sólo esperaba tomar la decisión correcta con el pasar del tiempo y no equivocarse.