El Reencuentro || TEMPORADA 2 de LPLQQ || Pedri González

Capítulo 5.

Pedri bajó los escalones de dos en dos, con pisadas fuertes. No tenía ganas de bajar a abrir la puerta, quería continuar lo que estaba haciendo Paula.

— ¿Qué pasa Pedrito? Menuda cara, ¿has dormido mal? — preguntó Gavi entrando en cuanto la puerta se abrió, sin pedir ningún tipo de permiso.

— No sé cómo coño puedes estar así de animado después de haber dormido tan poco.

— Es lo que tiene ser joven, tú se nota que ya estás mayor — Gavi rió ante su propia broma y se dirigió a la cocina en busca de algo para desayunar — No tienes ni unos putos cereales, a ver si vamos a hacer la compra, ¿eh?

— No me gustan los cereales, y lo sabes — respondió con fastidio.

— ¿Qué tal Paula? — Gavi seguía centrado en su búsqueda de algo para desayunar.

— Eh... bien, bien — el nerviosismo en la voz de Pedri se notó a pesar de que lo disimuló lo mejor que pudo.

Gavi se giró inmediatamente para mirarle, cambiando su expresión alegre a una más seria.

— ¿No habrás aprovechado lo borracha que estaba para hacer algo con ella, no? — Gavi se acercó a Pedri, intentando intimidarle.

— No, yo no me he aprovechado de nadie — Pedri giró la cabeza mirando hacia otro lado porque la cercanía de Gavi cada vez le ponía más nervioso.

Se escucharon pasos provenientes de las escaleras y poco después apareció Paula vestida con una camiseta de Pedri, que había cogido de su armario, dándose ella misma el permiso.

No llevaba nada más que la ropa interior en la parte de abajo dejando que se le viese medio culo, y lo hizo a propósito.

— Buenos días — dijo fingiendo un bostezo.

Ambos se quedaron mirándola, escaneando su cuerpo de arriba a abajo. Cuando Gavi salió del trance, miró a Pedri pidiendo explicaciones, pero no fue lo que obtuvo, en su lugar, Pedri pasaba la lengua por sus labios sin apartar la vista de Paula.

— Bueno, ya vale de mirar tanto — dijo Gavi molesto y le dio una colleja a Pedri.

Estaba claro que algo de celos tenía y, más aún, porque el hecho de ver aparecer así a Paula le hizo pensar que Pedri se había acostado con ella.

— Eso Pedri, deja de mirarme, que pareces un acosador — Paula dijo eso y le miró de forma juguetona, provocándole porque sabía que Pedri prefería que Gavi no supiese lo que estaba pasando en los instantes anteriores a su llegada.

La mirada que recibió de él fue de aviso, pero, en el fondo, Paula sabía que a Pedri le apetecía entrar en el juego.

— No te estaba mirando por lo que tú crees, no te hagas ilusiones. Es porque tienes papel higiénico pegado en el culo.

Inmediatamente Paula se llevó las manos al culo para comprobar si era verdad lo que le estaba diciendo, además de girarse intentando verlo también.

— Dios, no te soporto, eres imbécil — dijo Paula fastidiada.

Gavi se limitó a reírse, la cara de preocupación que había puesto Paula le había parecido adorable.

...

Habían decidido ir a desayunar al centro, ya que Pedri no tenía nada decente para desayunar.

Estaban sentados en la terraza de una cafetería. Paula y Gavi estaban situados a un lado de la mesa, mientras que Pedri se había sentado frente a ellos. La cara de este último cambió al instante, de hecho, Paula diría que se había puesto Pálido.